Sehun caminaba de regreso hacia su casa. Había sido un exhausto día a causa de su interminable proyecto de Historia que tenía que presentar al día siguiente y se había visto obligado en ir a la casa de un compañero con el cual no se llevaba muy bien que digamos. Baekhyun no era el mejor alumno del curso pero al hablar se desenvolvía perfectamente por lo que él tuvo que implorar y aceptar una invitación que él le propuso.
¿Para qué quería Baek salir con él, acaso se había vuelto loco? Ellos no se toleraban, y Sehun estaba seguro (mas que seguro, él lo afirmaba rotundamente) que en su antigua vida ellos habían sido rivales de combate (tal vez sonaba un poco tonto y arrebatado, pero Sehun se apoyaba más a esa idea que a otra teoría o lo que sea)
Caminaba por su vereda favorita, y aunque no tenía nada qué destacar a su favor, a él le agradaba. Siempre estaba despejada de cualquier persona, ni siquiera un solo gato se asomaba por ahí. Llevaba tomando ese camino (hacia su casa) desde que tenía uso de conciencia. Era como su camino hacia la tranquilidad, siempre le hacían sentir acogedoramente bien, el camino y Ed Sheeran en su reproductor (...) Pero curiosamente ese día, Sehun notó algo raro en el aire, en la forma en cómo las personas que estaban en el otro camino (a su lado izquierdo) se tomaban de la mano, se besaban o cargaban pequeños niños en brazos. Trató de no concentrarse mucho en la sensación de soledad que le causaba ver eso y se dispuso solo a ser tratado exquisitamente por la voz ronca de un inglés que ronroneaba en sus oídos... Hasta que por la quinta cuadra (dejando de lado a la besuqueadora pareja que se había estacionado frente a él y le había causado un susto inmenso al ver la escena casi pornográfica. ¡¿DE DÓNDE HABÍA SALIDO ESE PAR DE SALVAJES?!) se encontraba un muchacho, sentado en la acera, ¿por qué estaría un muchacho sentado en la cera a estas horas? pensó Sehun mientras chequeaba la hora en su móvil.
22:45
Oh, pobre de ese muchacho, desolado igual que él. Su corazón se encogió al ver que el muchacho frotaba sus manos para entrar un poco en calor. ¿Quién en este santo mundo saldría en medio de un invierno atemorizante y sin bufanda o guantes? Él aceleró su paso hasta que lo perdió de vista. Siguió así hasta doblar hacia la derecha y llegar a su acalorada casa. Se lo pensó mejor, se colocó una casaca roja y guantes, y salió por donde había ingresado y cerró la puerta. Se supone que esto debería de calmar el frío de aquel muchacho, si es que lo encontraba en el mismo lugar y con el mismo frío que expresaba. Tomó la bicicleta que estaba anclada en su estacionamiento (si es que podría llamárselo un estacionamiento de bicicletas a una rejilla al costado de su casa) y la montó para regresar al camino por donde había vuelto a casa después de estar con Baekhyun y sus besos.
Oh sí, Baek le había besado, y no solo una vez, sino que dos y tres veces más. Sehun estallaba en rabia de tan solo recordarlo. Pero su culo estaba en juego, así que era mejor aceptar el paquete completo.
Se detuvo cuando estuvo frente a él y KyungSoo no le había notado hasta cuando Sehun bajó de su bicicleta y caminó pocos centímetros hacia él. El muchacho levantó su mirada del suelo hacia Sehun, y es ahí donde a él se le recortó la respiración. Él no era un simple muchacho. Él era KyungSoo, y sí, Sehun sabía su nombre. Todo el instituto sabía su nombre, y es que pertenecer a un grupo de chicos "problema" y ser él, el más reservado los hacía (le hacía, además de pertenecer al Taller de teatro) ser popular ante todo mundo (del colegio). Luhan y Xiumin amaban hablar de ellos, y sorpresivamente a Sehun le gustaba oír cuando mencionaban a ese lindo chico callado de ojos intensos. En efecto, ese mismo chico que a él le gustaba, pues se encontraba, ahora, frente a él y a toda su disposición. ¿Qué se supone que debía de hacer o decir ahora que sabía quién era él?
—Ten.— Le tendió su bufanda, la única que tenía y gustaba.
KyungSoo se la rechazó con un poco de desprecio.
—No te estoy preguntando, te lo estoy -prácticamente- ordenando.
Y cuando él no se inmutó, Sehun tomó la bufanda y se la enrolló en el cuello de KyungSoo.
"Perfecto" pensó. A él todo le queda perfecto.
...
Cuando KyungSoo tomó su bicicleta y se la llevaba dificultosamente lejos de él, Sehun le mencionó algo como "si quieres quédate con ella hasta mañana" y se dio la vuelta para regresar a su hogar.
Ya a menos de cuatro metros para sacar su llave e ingresar a casa, miró nuevamente su móvil y la hora marcaba: 23:15 pm.
Tenía que darse prisa si es que no quería que su madrastra le prohibiera salir siquiera a hacer proyectos con algún compañero o con Baekhyun.
Definitivamente con Baek no. Quizás con Chen sí, pero Baek ya no.
Quizás era mejor si su nuevo compañero fuese KyungSoo, y pronto las "nutrias" (porque llamarle "mariposas" no le parecía nada encantador) fueron apareciendo hasta que un Sehun ilusionado cerró los ojos y se dedicó a dormir.
Mañana tendría que volver a ver a BaekHyun y para eso necesitaba estar bien descansado.
ESTÁS LEYENDO
¡Dame un beso, KyungSoo!
Fanfiction【EDITANDO】 SeHun tiene un -para nada extraño- sentimiento albergando su corazón cada que se encuentra observando (tras su libro de Biología en las horas de almuerzo) a un menudo chico que sonríe en complacencia con sus amigos. ¿KyungSoo nunca ha no...