Pequeño Virgen (Kouta Shinohara)

Capítulo 30. Debería de Mostrarte.

Llegamos algo cansados y con nuestra respiración agitada, además un brillo adorna mi frente.

--¡Ja ja ja! Eso fue un poco agotador--Digo dejando escapar mi aliento, para después sacar un pañuelo color lila que guardaba en mi bolsillo. --No pensé que el sol estuviera tan fuerte--Comenté acercándome a Kouta.

--¡H-hai!--Dice Kouta confirmando lo dicho. Se ve cansado.

Pongo el pañuelo sobre su frente, pasando obviamente por debajo de su flequillo y comienzo a dar pequeños golpecitos, tratando de retirar todo el sudor posible.

--Tu cabello está húmedo--Digo con un tono alegre.

--¿Eh? ¡P-perdón!--Se sobresalta, para después alejarse de mí.

--Kouta, no me da asco tu sudor. ¿Sabes? Me gusta que sudes cuando estamos haciendo cosas de adultos--Confieso divertida, dándole una mirada pícara, mientras veo como se sonroja de sus mejillas y orejas.

--¡S-scar!--Grita alarmado con sus manos echas puño al costado de su cuerpo en el aire aún avergonzado.

--Solo digo la verdad--Menciono mirando directamente su cara. --Si quieres hoy puedo visitar tu cu~ar~to~ ¡Ahh! ¿¡Qué demo...nios--Grito, pues algo me envuelve fuertemente desde mi espalda. Al girar un poco mi cabeza, veo una cabellera color blanca. --Kanade.--Digo ahora tranquila y con ternura, pues se aferra a mí como un koala al bambú.

--¡Scar!--Grita mi nombre, haciendo mucho más fuerte el abrazo y hundiendo su cara en mi ropa.

--Kanade, si no me sueltas moriré asfixiada--Digo tratando de hacer que se divierta, pues lo noto extraño.

Me suelta sin decir nada, por lo tanto me giro sobre mi eje y me pongo cara a cara frente a él. Se encuentra con su cabeza hacia abajo, no solo por el hecho de ser más alto que yo.

《Aquí hay algo raro》

--Kanade ¿Pasó algo?--Digo con sutileza, mirando de reojo a mi peliaqua, para regresar de nuevo con el albino.

--Solo... no lo entiendo--Me responde distante algo frustrado.

--¿Qué no entiendes?--Le pregunto confundida, mientras de nuevo entrelazo mis dedos con los de Kouta, para que no se sienta fuera de lugar. El cual solo me da una ligera sonrisa cálida.

--Si dos personas son importantes para ti y una de ellas quiere lo mismo que tú. Está bien compartir, ¿No?.--Me dice afligido, haciendo fuertemente sus manos puños. Se ve como los nudillos comienzan a hacerse blancos.

《¿Habla de un objeto?》

--Kanade, ¿Qué es eso que quieres compartir?--Pregunto intranquila y agobiada, frunciendo mi ceño y tratando de ver su cara.

--Es a Ka... ¡Oh! Scar! ¡Pareces un pirata!--No termina de decir su frase, pues se distrae con la venda que tengo en uno de mis ojos, posteriormente ve la venda que esta en mi brazo--¡También una momia!--Sus ojos forman estrellitas de lo sorprendido que esta--Eres una... ¡Pirata-Momia!--Parece que busca un apodo más apto--¡Mompia!--Dice orgulloso por el sobrenombre que ha elegido para mí. --¿Se siente bien tener eso? ¡Te ves muy genial!--Sigue alabando mi nuevo aspecto, invadiendo más y más mi espacio.

--¡Eh! ¡Kanade-kun! E-espera... La estás agobiando--Dice Kouta, apartando a Kanade de mí con su mano derecha.

--iUh-hh! Yo solo quería saber Kouta-san--Expresa con tristeza Kanade. Sus cejas están en descenso, pero haciendo un tierno puchero.

--Kanade--Le llamo. Obtengo su atención. --Esto que ves, no solo es para lucir genial, estas son marcas de una guerra ganada que tuve--Digo con tono bajo, haciendo un ambiente misterioso.