Capítulo 13

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La chica se encontraba sentada en el porche, observando a sus primas corretear detrás de varias mariposas.

- Entonces te va bien en Hogwarts, ¿verdad?- preguntó su tía.

- Si te refieres a las notas, tengo todas las asignaturas con matrículas.

- Es bueno oírlo.- la mujer dio otro sorbo a su té.

Ashlyn se mordió el labio, intentaba con todas sus fuerzas reprimir la pregunta que se estaba repitiendo en su mente desde su llegada a la villa.

- Tu hermana también va a venir, mañana por la tarde.- dijo , sacándola de sus pensamientos.

- ¿Thalía? - preguntó, sorprendida.

- Pues claro, no tenemos a otra Thalía en la familia.

- Tía Erin, ¿puedo saber si has recibido alguna noticia del hospital? Porque dudo mucho que Thalía venga desde América para hacer una visita familiar.- soltó al fin, mirándola a los ojos.

Ella cogió una bocanada de aire y dejó la taza en la mesita . Tenía que decírselo o su reacción sería aún peor si lo descubría por si sola.

- Cielo, sé que hemos pasado por momentos muy difíciles y has logrado afrontarlo como toda una mujer adulta, pero todavía la herida sigue abierta. Las secuelas del incendio no han desaparecido de tu madre. Ashlyn, mandé que te sacaran de la escuela por un único motivo. Verás, hace semanas que me lo dijeron pero no quise decirte nada. El doctor que lleva el tratamiento de Brianna está perdiendo las esperanzas de que se despierte.- el miedo azotó con fuerza al cuerpo de Ashlyn y sin darse cuenta se clavó las uñas en las palmas.- Me sugirió la idea de traerla aquí y mandar a una enfermera para que la cuide. Lleva un año dormida, Rosé, y todavía no han dado con alguna poción idónea. Si no mejora , tendré que hablar con la familia de...

- ¡NO!- Ashlyn se levantó de golpe, haciendo caer el azucarero al suelo.- No puedes hacer eso, es tu hermana. Habrá otras cosas que a lo mejor funcione.- dijo, al borde del llanto.- Por favor, no lo hagas, dala más tiempo. Es una mujer muy fuerte. Yo, yo no me imagino otra pérdida más. ¿Cómo se lo podré explicar a mis hermanos? Ellos aún creen que la volverán a ver caminar. Tía Erin, por favor, no destruyas la vida de la única persona que consigue mantener juntos a mis hermanos y a mí.

Erin miró a los ojos de su sobrina y la imagen de su querida Brianna se materializó delante. Ashlyn era la única que se parecía a ella, había heredado el mismo color cabello, largo ondulado y sedoso, la forma de corazón de su rostro, hasta tenían casi el mismo timbre de voz.

- ¡Ashlyn!- la pequeña Riley corrió hacia su prima y ésta giró la cabeza para que no viera las lágrimas que salían de sus ojos. - ¡Ven a jugar con nosotras!

- Luego acabaremos la charla, Rosé. Anda, disfruta de la tarde.

Ella sólo asintió en modo de respuesta y esbozó una sonrisa falsa al coger la mano de la niña. Gwen las esperaba sentada en la hierba.

- Lo siento, Lyn, pero sabes que Riley cambia de juego a cada rato.- Gwen se quitó una hormiga del pantalón y sacó una caja del bolsillo.- Ahora que somos tres podemos jugar a los naipes explosivos, ¿qué os parece?

- ¡Valeee!- Riley saltó, entusiasmada.

- Nada de aburrirte a los cinco minutos de empezar.

- Oh, vamos, no lo voy hacer. Me gusta ese juego.

- ¿En serio?

-  No seas tan pesimista, Gwendolin. Te vas a convertir en una vieja amargada  antes de cumplir los doce.

Ashlyn soltó una risita ante el comentario de Riley pero se puso sería al notar la mirada de Gwen en ella.

- Venga, parad de pelear.- la mayor se sentó al lado de Gwen y Riley la imitó.

Pasaron unas horas en el jardín, charlando de diferentes temas y cotilleando un poco.

- ¿De qué habéis estado hablando mamá y tú? Parecía algo importante.- preguntó de repente la menor.

- ¡Riley!

- No pasa nada, Doly, lo deberían saber. Mañana vendrá Lía.

- ¿En serio?

- Cierra la boca, no querrás tragarte un bicho, Ley.- la molestó su hermana mayor.

- Deja de meterte conmigo.

Ashlyn se acordó de Luke y de Daphne y deseó estar con ellos en el patio. Se sintió vacía, como en aquella noche...

Indómita (Tom Riddle y tú) #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora