Cap XII

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-¿Por qué salimos de compras? Tú nunca quieres ir de compras- Indagó Sarah, de todos modos, se mostraba entusiasta con la idea.

-Los chicos con los que trabaja tu hermano me pidieron que sea su fotógrafa en el tour- Ella se volteó con una gran sonrisa- Así que viajaré con ellos algún tiempo, luego veremos que va sucediendo, quizás vuelva antes de lo planeado o me quedé más, no lo sé.

-Eso es genial, conocerás un montón de países a los que no has viajado aún y con tus amigos, es una gran oportunidad, me alegra mucho que hayas aceptado- Asentí con la cabeza- Así que estamos comprando ropa por eso.

-Bueno, sabes que casi toda mi ropa es para el trabajo y, como no salgo mucho, debo tener dos vestidos, quizás- Ella asintió con la cabeza, de mala gana- Los chicos siempre están de fiesta y probablemente, de vez en cuando, salga con ellos. Quizás como esta noche.

-¿También irás a la fiesta?

-¿Ryan irá?

-Si, me llevará al aeropuerto para que vuelva a Nueva York y luego irá por su novia.

-Ella es muy linda, ¿sabes?

-No la conocí de la mejor manera.

-Te agradara, lo juro. Sabes que nunca me agradan las novias de Ryan porque también es como mi hermano y soy más celosa que tú, pero Giselle es una chica muy amable y cariñosa, a Ryan le encanta- Sonreí caminando por los pasillos del centro comercial, junto a ella- Solo dale tiempo.

-De acuerdo, tomaré tu palabra- Ella dejó de caminar de golpe y también lo hice, para ver lo mismo que ella veía- Deberías probarte ese vestido.

-Pruébatelo tú.

-No tengo tu cuerpo, apuesto a que puedes lucirlo mucho mejor que yo- Lo miré con más detalle. Era un lindo vestido negro de mangas largas, ajustado y no muy corto, pero si sexy- Es perfecto para ti. No muy revelador, pero tan ajustado que es sexy.

-No lo creo- Sarah ignoró mis palabras y me hizo entrar a la tienda. Pronto ya teníamos una pila enorme de ropa que ella me hacía probarme solo a mi porque, según ella, está embarazada y no tiene energía para eso. Hacía mucho que no hacíamos estas cosas, así que cumplí su capricho y, de paso, conseguí buena ropa.

Definitivamente me llevé el vestido que guardaría para algún momento especial en el futuro y muchas otras prendas.

-¿No te sientes genial? Era hora de que hagas un cambio de estilo- Asentí con una pequeña sonrisa, mientras ella acomodaba alguna de las bolsas de todo lo que habíamos comprado en el día.

-Te invito un helado y luego vamos a casa para que recojas tus cosas.

-Acepto el helado y me apena tener que irme, en serio te extraño mucho- Hizo un puchero e, instintivamente, hice uno también.

-No te preocupes, estaré en Nueva York pronto, debo visitar a mamá y a la tuya también, ¿le dirás que la extraño mucho?

-Claro, aunque ya lo sabe, le dices cada vez que la llamas.

-Aún la llamo mucho más a ella que a mi madre- Suspiré por lo bajo- Me siento mal por eso.

-Si, bueno. No es como si fuera la mejor madre del año- Incliné la cabeza hacia un lado, dándole la razón- Cada vez que la llamas terminan discutiendo.

-Ojalá solo lo olvidara- Meneé la cabeza y sonreí- Mira, una heladería.

Decidí olvidar el tema y disfrutar el poco tiempo que me quedaba junto a Sarah, antes de que vuelva a casa.

(...)

Bebí de mi trago, revisando mi teléfono por cuarta vez, en busca de algún mensaje de los chicos.

Perfect Picture ~cth~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora