Pov Natalia.
Maldito Miki.
Maldito juego.
Y maldito el momento en que acepté jugar.
Un silencio se había formado en aquel círculo, y todas las miradas se centraban en mi. Todas menos la de Miki, que miraba nervioso hacia el suelo.
No me atrevía a hablar. Ni siquiera a mantenerles la mirada. Pero el silencio que más me estaba aterrando era el de Alba. Sentía su mirada sobre mí, pero no quería ver en sus ojos lo que sabía que estaría pensando.
-De eso hace mucho tiempo.- Repitió Miki con un hilo de voz, captando ahora él las miradas.
-Qué fuerte...- Escuché murmurar a Marta. -¿Tú lo sabías, Alba?
-¿Pero cómo va a saberlo? ¿Tú le has visto la cara?- Contestó Dave, haciendo que me tensara, mirando a la rubia de reojo.
-Pero...- Balbuceó ella, sin apartar sus ojos de mi, haciéndome cerrar los míos nerviosa. -¿En qué momento...?
-Alba, hace años de eso. No puedes reprocharle nada a Natalia porque...
-Miki.- La seriedad en el tono de Alba hizo que se callara al instante. -¿Tú no piensas decir nada?- Se dirigió a mi, que simplemente me encogí de hombros.
No quería hablar de eso. Y no veía la necesidad de hacerlo. No estaba con ella cuando pasó, y eso era lo único que Alba necesitaba saber.
-Fue antes de estar contigo.- Dije como si nada, atreviéndome esta vez a mirarla un instante.
-¿Y eso es lo único que vas a decir?
-No puedes exigirme explicaciones por lo que hice antes de estar contigo.
-¡Es Miki!- Alzó la voz incrédula, ante mi tono impasivo. -¡Estamos hablando de nuestro mejor amigo desde hace 7 años! ¿No crees que tenía derecho a saberlo?
-No veo por qué...- Contesté, encogiéndome de hombros, todavía a la defensiva.
-Vete a la mierda, Natalia.- Soltó cansada, levantándose y marchándose de ahí a paso rápido, dejando de nuevo a todos en silencio.
Un silencio de nuevo incómodo.
-¡Joder!- Solté frustrada, llevándome ambas manos a la cabeza.
-Nat, lo siento...- Se disculpó Miki, colocando una mano sobre mis hombros. -No quería buscarte problemas.
-Da igual, Miki...- Suspiré, poniéndome también en pie. -Da igual...
-¡Nat!- Me llamó, pero yo no le hice caso y empecé a andar en busca de Alba.
No me puedo creer que estemos así otra vez. Ni dos horas puedo estar tranquila.
-Me cago en mi maldita adolescencia, en mi maldita cabezonería de hetero, y en todo lo cagable.- Murmuré mientras recorría todos los rincones de aquel parque. -¡Alba!- Grité al pasar por una zona poco iluminada, ya que apenas se veía nada. -Va, sabes que me conozco este parque como la palma de mi mano. Sal, y no me hagas tirarme una hora buscándote.
-Natalia.- Escuché una voz a mi espalda que me hizo pegar un bote.
-Coño, Miki. Qué susto.- Me llevé una mano al pecho. -¿Me quieres matar de un infarto o qué?
-Perdona. Era llamarte o cogerte directamente del brazo, pero creo que hubiera sido peor.- Bromeó.
-Probablemente te hubieras llevado un puñetazo en la cara.
ESTÁS LEYENDO
Aura
RomanceAlba y Natalia son mejores amigas desde que se conocieron el primer año de instituto. Desde entonces siempre han sido inseparables, no había una sin la otra. Pero con los años su amistad se ha visto influida por nuevos sentimientos. Nuevos sentimie...