42-100

1.8K 66 12
                                    

-Llegamos- me dice mi hermana y me mueve el brazo

-Donde está?-pregunto

-Ahí, mamá y papá están abrazando a Oscar y Diana esperando que bajemos

-Ah..- digo abriendo los ojos- Ya llegamos!!

-Sí. Es lo que acabo de decir

Bajo del auto siguiendo a mi hermana. En el frente una linda y bastante grande casa con un parque enorme y mucho verde a su alrededor, es un pueblo. Pero es hermoso. Diana me abraza y me invita a pasar a la casa. Es mucho más hermosa por dentro y me siento como en casa. Nos llevan a nuestros cuartos, uno para mis papás y otro para nosotras. No veo a Julian por ningún lado, ni tampoco a Yolanda.

-Fueron a comprar!- me dice Oscar como si leyera mi mente

-Es la primera vez que Julian se ofrece para hacer algo- me dice Diana y me empiezo a reír

-Diana contame como estas, con todo lo que no hablamos- le dice mi mamá y las dejo hablando solas

Salgo al parque y me siento en un banco, para sentir el aire libre. El viento mueve mi pelo y por fin entiendo lo mucho que ama este lugar Julian. Escucho el sonido de las llaves y sé que llegaron.

-Oriiiii- me dice Yolanda cuando sale afuera

-Amiga!! Que bueno es verte

-Sí, me encanta que hayas venido. Espero que te haya gustado la casa- me dice y me abraza- Tu hermana?

-Adentro. Ordenando las cosas- le respondo y ella se va cuando entra Julian. Me levanto y él corre hacia mí. Nos abrazamos. Muy fuerte.

-Te extrañe- él me dice cuando dejamos de abrazarnos

-Es hermosa tu casa, ahora entiendo porque amas tanto este lugar

-Hay mucha paz, mucha vida

-Sí, y me encanta- le digo con una sonrisa

-Hoy te voy a llevar a un lugar especial

-Dónde?

-No tenes que saber todo, es una sorpresa

-Esta bien, a qué hora?

-En la tarde. Ahora es mediodía, y tenemos que almorzar todos juntos. Entramos?

-Sí- respondo y lo sigo

Trato de ayudar a poner la mesa pero Julian no me deja. Él quiere sorprenderme, lo conozco, y lo hace. Pero no me gusta que me consientan, aunque solo por esta vez lo voy a dejar. Para comer hay unos fideos caseros riquisimos que hizo diana. Durante la cena, miramos un poco la tele y comemos a toda prisa ya que todos tenemos hambre. Cuando llega la parte del helado, nuestros papás se ponen a hablar acerca del trabajo y esas cosas, nuestras hermanas de ropa y chicos, y nosotros estamos así, sentados. No se si hablarle o no, pero él me agarra la mano por abajo de la mesa.

-Lavo los platos y nos vamos- me dice Julian

-No hace falta que los laves, me ocupo yo- le dice Yolanda y me guiña un ojo

Después de saludar a todos y pedir disculpas por irnos tan rápido, salimos de la casa. Subimos al auto de Julian y vamos rumbo a ese lugar que no me imagino. Durante el viaje lo único que hacemos es escuchar música y sonreirnos. Después de una hora en el auto, llegamos. Primero solo hay una casa abandonada y pienso por qué estamos acá? Pero después Julian me lleva hasta el fondo por un pasillo, y descubro que solo es un atajo hasta una playa. La parte en la que menos gente está y siento como si fuéramos las únicas personas en el mundo.

ORIAN- Miedo a perderloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora