¿Qué pasaría si llegarán maestros nuevos a la escuela? 📏📚 ¿Qué pasaría si te enamoras de ellos? 😶✏
Mi nombre es Lily Rose tengo 17 años, estudiante de la preparatoria NorthRich, residente de L.A. California y está....es mi historia. ❤
con la cola...
Es tan aburrido estar pasando líquidos de colores de un vasito a otro y usar esas malditas capas blancas y lentes horribles que hacen que mi maquillaje se arruine. El año pasado tuve un problema con el profesor anterior, mis papás tuvieron que venir, ya que le dije al profe que podia meterse su químico por el culo cuando me llamó la atención porque use el celular en clase, idiota. Había un chisme buenísimo en la preparatoria y yo, la reina del chisme debía estar enterada a detalle de ello.
Esperemos que está vez toque un maestro bueno, al menos que me haga poner atención ya que es la única materia que tengo mal y mi padre insiste que si no la paso, no me dará el Jetta Rosa que le pedí de regalo de graduación.
Entré al salón y no había más lugares más que uno vacío a un lado de la anfetermana, mierda. Camine al asiento y las ignore, me puse la maldita capa y esperamos a que llegará el maestro o la maestra nueva. Tomé mi celular y entre a Facebook solo a revisar novedades con aburriendo.
— Oye Mike, ¿que almorzaremos hoy? — le pregunté a mi amigo en el asiento de atrás.
— No lo se, tengo ganas de pollo frito y de coger, tu dirás. — dijo mordiendo su labio
— Me leíste la mente — reí guiñando mi ojito derecho y escuche la puerta del salón cerrarse de golpe.
— Muy bien, todos a sus asientos y en silencio, por favor. — escuché una voz gruesa y vi a un chico alto, con peinado raro, anotando su nombre en el pizarrón, ¿Ese es el profe? Interesante.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— Mi nombre es Thomas Lee, pueden llamarme Profesor Lee o como les de la gana — se notaba algo desinteresado en el tema, parece que alguien eligió la carrera incorrecta.
— ¿Que tal si lo llamó "Daddy"? — dijo Sofía en los asientos de enfrente y todos se echaron a reír.
— ¿Que tal si te vas a la dirección? — respondió de mala gana
— Uh que genio — dijo aburrida.
— Voy a pasar por sus asientos preguntando su nombre y edad. — respondió empezando del lado izquierdo
No sé pero esa actitud me gusta, me excita, me agrada. Era guapo, alto, se notaba que tenía tatuajes debajo de su camisa de botones, algún momento lo ví sonreír, Sofía volteó a verme e hizo señas dando a entender que si estaba sexy, asentí y le hice una seña de sexo oral con mi lengua y ella reía sin hacer ruido.
— Disculpa, ¿terminaste? — dijo el profesor detrás de mi y salté de susto
— ¡Ay! ¡Perdón!, sí, lo siento. — sentí el calor recorrerme por la vergüenza
— ¿Podría decirme su nombre y edad? — dijo parándose muy cerca de mí asiento y sentí su rico perfume entrar por mis narices, activando mi libido enseguida.
— Paloma...Paloma Moner — Respondí mirándolo con una ceja arqueada y una sonrisa llena de malicia, ya sabes, de esas que incitan a pecar.
— ¿Tiene algún problema con su boca, Señorita Moner?. — dijo refiriéndose al gesto que hice hace unos momentos a Sofía.
— No, ninguno, sólo era una tontería.— sonreí poniendo un mechón de mi cabello detrás de mi oreja y me regresó la sonrisa, claro que sabe que significaba ese gesto.
— Evité hacer esas escenitas en la clase, Moner.— regresó a su escritorio y Sofía me miró burlándose y negando con la cabeza.
— Bueno, a decir verdad, si tengo un problema, me siento con la garganta un poco seca, profesor. — dije en un tocó coqueto.
— Beba un poco del sodio que tiene a un lado, eso quizá le ayude. — respondió incrédulo.
— Oh, vaya, como supo que me gustan los líquidos "Salados" — dije enfatizando la palabra clave.
Alzo su ceja y carraspeo la garganta tragando duro, negó con la cabeza e ignoro mi comentario.
