The Remnant

Prólogo

Creo que no hay mucha necesidad en explicar lo que fue la guerra del santo grial de los Ainsworth en el mundo de Miyu.

Un chico que decidió traicionar el ideal de su padre y salvar a su hermana pequeña, codiciando la felicidad de la "Hija de Dios" en vez e salvar el mundo...y el mismo lo destruyó acabando con casi todos los participantes en una sola noche...

Y hago énfasis en casi.

Porque apareció un octavo miembro, un segundo Archer.

El rey de los héroes, Gilgamesh; de manos de la Angélica Ainsworth dándole una paliza a Shirou Emiya con la class card de EMIYA.

Incluso con la esfera de realidad que proyecto el joven de pelo rojo con blanco, no fue lo suficiente de hacerle frente a la espada de la ruptura...[Ea].

Pero fue el tiempo suficiente para cumplir el deseo de Shirou.

-Quiero que puedas conocer personas y amigos...una vida normal...- fue lo que deseo el antiguo héroe convertido en villano.

Pero Miyu sabía que sin el, no podría ser feliz, ella deseaba ser una hermana verdadera para Shirou.

Entonces, el Grial le concedió el deseo ambos pero como dicen...

Los Emiya tienen una maldición con la fuerte....

...

Viento soplaba sobre su rostro mientras seguían cayendo de manera libre junto a su hermana adoptiva, cuando su cuerpo sintió el aire rico en mana...pudo empezar a despertar y rápidamente entro en alerta.

Vio como su cuerpo y el de su hermana caían rápidamente contra el suelo de un lugar que transmitía sentimientos oscuros y maldad de tan solo verla.

Pero el hermano de la hija de dios decidió agarrar a su hermana y empezar a reforzar su cuerpo para el impacto.

En eso, el cuerpo se movió mientras que Miyu abría lentamente los ojos...

-O oni-chan?...- pregunto media conciente la niña.

-AGARRATE MIYU!.- grito, por lo que la pelimorada miro hacia el suelo comprendió todo.

Se aferró rápidamente a su hermano y se prepararon cuando Shirou dió vuelta quedando de espaldas contra los árboles muertos del lugar.

Crack!

Crack!

Crack!

Un fuerte estruendo sonó cuando cayeron a la tierra del lugar, con su cuerpo aún adolorido...Shirou abrió los ojos para ver a una Miyu ligeramente asustada.

-Ya estamos bien...por ahora.- dijo el pelirrojo antes de separarse ligeramente de Miyu y empezar a oler el lugar.

El mana del lugar era denso y rico, pero parecía no ser por las mejores circunstancias; en eso, Shirou observo la palma de su mano notando unos cambios...peculiares.

En la parte de su mano se notaba unos tipos de escamas rojizas que sentían que recorrían todo su brazo, sus ojos se mantuvieron de un color ámbar pero su pupila era rasgada como la de un reptil.

-Que...demonios?..- fue lo que recorrió por la mente del villano, pero no tomo atención cuando un fuerte rugido se oyó.

...

Miyu estaba queriendo recobrar la compostura cuando el rugido se escuchó y su cuerpo se hizo fuertemente, pero sintió que el rugido era más fuerte de lo que estaba.

En eso, sintió un movimiento en su cabeza...pasando su pequeña mano sobre su cabeza lo sintió, unas orejas.

Unas orejas de gato.

No dió tiempo a gritar de sorpresa cuando su hermano se había colocado enfrente de el y decía su aria de desencadenamiento.

Trace On.

Velozmente proyecto las inconfundibles Kanshou and Bakuya en sus manos mientras mentalmente empezaba a proyectar varias armas listas para hacerlas aparecer cuando sea necesario.

Disparos bastante fuertes se oyeron también junto al sonido de un mecanismo...y justo cuando menos lo esperaban.

Un beowulf salió inesperadamente, saltando y tratando atacar a los dos jóvenes, pensando que sería una presa fácil.

Pero lo único que vio la criatura fueron una docena de espadas empalando su cuerpo y dejando que se disolviera.

Tomando la mano de su hermana, empezaron a correr en aquel lugar tan oscuro entre árboles muertos y tierra carmesí.

-Donde estamos oni-chan?!.- grito con miedo Miyu mientras corría siguiendo el paso a su hermano.

-Lo desconozco pero si esas criaturas actúan como me imagino, colocar un campo delimitado será una solución temporal en lo que planeamos un plan de escape- con un tono serio, el pelirrojo con blanco siguió su carrera hasta, que unos pasos lo tomaron por sorpresa mientras entraban a un bosque muerto.

...

Summer estaba agotada y muy mal herida, su intento de enfrentarse a la amenaza de Salem había fallado; encontrándose luchando y huyendo como podía de los Grimms.

Su sangre había manchado su capucha blanca dejándola parcialmente roja, y dejando un cansancio notorio en su cuerpo debido al tiempo.

Sin comida, sin agua...era cuestión de tiempo para que cayera inconsciente o muerta por la sangre perdida.

Entrando a un bosque muerto, se dejó acostar en un árbol agarrando una herida y haciendo presión sobre la misma...

Sus ojos empezaban a pesar y su mente a desvanecerse...había fallado...

Sus hijas tendrían que luchar contra la demonio que era Salem...y no quería ese destino, había hecho esta misión para salvarlas de un futuro atroz.

Pero no pudo.

-Lo siento...Ruby, Yang..."Super mamá" no llegara a casa; lo lamento...Tai...- fueron sus últimos pensamientos antes de caer inconsciente.

Pero el destino es diferente aquí.

Aún con la poca conciencia que se mantenía, escuchó un grito muy nítido junto al sonido de algo clavándose en el suelo.

Sintió como un pequeño peso se acercó a ella y tocó su rostro...sus manos pequeñas le traían una sensación familiar...

-Oni-Chan! Está viva, ven ayúdame!.- fue lo que una voz infantil gritaba mientras unos gritos de dolor de Grimm se oían.

-Esta bien, déjame me limpio la zona de escape!.- grito con mientras más rugidos de Grimms se oían antes de silenciarse.

No pasó mucho, para sentir como su cuerpo empezaba a ser cargado con ligera facilidad.

Abriendo lentamente los ojos y su mente aún sin tanta energía sobre puso la imagen real, a unas figuras que tanto ama.

-Tai...? ¿Yang...? No... ¿Ruby...?.- fue lo último que pudo pensar antes de que todo se apagará.

Tal vez el destino que llevo ahí a los jóvenes ahora Faunos pero solamente una cosa es cierta.

El pasado siempre vuelve.

La magia regreso y una persona muy especial...le tocará ser el titere en esta ocasión.

Fin del prólogo.

Voy avisando, la protagonista de esta historia será Miyu y no Shirou.

Bye bye!