Tutorial de cómo NO enamorar a alguien ❇ Katsuki Bakugō

08| NO caigas en provocaciones.

⟶¡Al fin seremos héroes profesionales! ⟶, Shirami sonrió dejándose caer en el sillón. ⟶Pero no he visto a Katsuki hablando con Nami, ni una sola vez, Eiji-kun.

⟶Eso es porque siempre que los ves, los interrumpes y provocas que Manashi huya. ⟶, Kirishima sólo imitó su sonrisa, sentándose en el recarga brazos. ⟶¿Tratas de romper una posible relación?

⟶¡Yeh! ⟶, ella recargó su espalda y tomó la mano de Eijirō.  ⟶Si Katsuki no está dispuesto a luchar por ella, veo un desperdicio que le muestre sus sentimiento. Soy el perfecto obstáculo, ¿no crees?

⟶Las personas suelen cansarse.

⟶Pues deben pensar en ello antes de hacer algo tan serio como esto. ⟶, respondió con simpleza, dejándolo y levantándose para darle la espalda mientras se estiraba. ⟶Agh, siento que quiero tronar mis huesos. ¿Estaré loca?

⟶Eres como NULE* Claro. ⟶, Shirami giró su cabeza hacia la izquierda, mirando a Kirishima con una leve sonrisa.

⟶¡Mueve el tracero, Katsuki!

Ahí estaba de nuevo. El cuerpo de Shirami se mantenía recargado bajo el oscuro techo del salón, gracias a la singularidad de Uraraka.

⟶¡No me provoques, bastarda!

⟶¡Bájale a tu actitud de mierda, o no conquistarás a Nami! ⟶, Bakugō apretó los dientes y el palo de la escoba sin decir nada, y Shirami comenzó a reír, abrazando el palo de escoba que ella también llevaba para limpiar el techo. ⟶¡El pobre no puede ni decir “¡me importa una mierda!”!

⟶¡Te mataré!

⟶¡Ven e intentalo, rubia!

⟶¡Dejen de pelear ya! ⟶, exclamó Iida, apareciendo el oscuro lugar junto a Yaoyorozu, quien negaba con la mirada baja.

⟶¿¡Por qué tenemos que limpiar el salón!? ¡¡Eso es trabajo de los extras!!

⟶Chicos, por favor, guarden silencio. ⟶, la pelinegra soltó un suspiro, frotando su frente mientras que algunos alumnos de la clase A veían el espectáculo con una leve sonrisa. A Shirami le gustaba el desastre, y Katsuki explotaba fácilmente. ⟶Sero, ¿podrías ayudar a Kimura para que baje?

⟶Sin duda. ⟶, respondió aquel, dejando la cubeta de agua a un lado, y alzando su codo para lanzar cinta hacia la chica de ojos azules, quien lo tomó y comenzó a ser arrastrada de nuevo hacia el suelo, donde Uraraka liberó su singularidad.

Como Shirami había levantado la mano y estaba apunto de hablar, Shinsō, quien iba caminando hacia el lado contrario, le metió un bollo en la boca para que no siguiera gritando, provocando que algunos alumnos se rieran con diversión ante aquella imagen.

⟶Bueno, sólo limpiamos, y regresamos, ¿no? ⟶, Uraraka asintió mirando a Sero.

⟶Pero estoy de acuerdo con Katsuki. ⟶, Shirami masticó y tragó el bollo, para seguir hablando. ⟶¿Esto no era trabajo de otras personas? ¿Por qué tenemos que limpiar nosotros?

⟶Esto es parte del trabajo de un héroe, Kimura. ⟶, respondió Yaoyorozu, acercándose a ella para darle la tela carmesí con la cual debía cubrir las barandas.  ⟶Debemos ser organizados y aligerar la carga a los demás.

⟶A Momo le lavaron el cerebro. ⟶, dio otra mordida al bollo, mirando de manera curiosa a la de cabellos oscuros. ⟶¿Te das cuenta de que le estamos quitando el trabajo a pobres personas que necesitan obtener dinero para poder vestirse, comer y vivir bien?

Momo parpadeó varias veces ante sus extensas palabras.

⟶No te dejes influencias por ella. ⟶, pasando por su lado, Hisae se detuvo para tomar el hombro de la joven chica, con una ligera sonrisa divertida.

⟶Yaoyorozu, trajimos las mesas. ⟶, al salir de trance, la joven giró hacia la puerta de entrada, donde algunos estudiantes de la clase B, llegaban con varias mesas desarmadas, gracias a una singularidad.

⟶Muchas gracias, chicos. Pueden dejarlas apoyadas en la pared.

⟶¡Hola, Nami!

Bakugō sintió un escalofrío en todo su cuerpo tras la mención de Shirami, aunque era más por el miedo a que esta dijera otra cosa estúpida con ambos cerca, y Nami saliera huyendo con otra mala impresión.

Además de que la bruta pelea en el primer festival deportivo hace unos dos años, aún se repetía en su mente, y le provocaba un mal sabor de boca, ahora que le había dejado aquella carta. No podía evitar sentirse nervioso de tenerla cerca. Ni siquiera quería cruzar mirada con esta.

⟶¿Qué eres? ⟶, Shirami cubrió su boca tratando de resguardar su risa al ver cómo Bakugō estaba tan tenso y con ese rostro pensativo. ⟶¿Una doncella asustada?

⟶¡Shirami! ⟶, ella comenzó a reír estrepitosamente.

⟶¡Siguiente sección: NO caigas en provocaciones! ¡Espera!  ¡SERO, AYUDA!

Ahí iban de nuevo.