Prefacio

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Detenerte a pensar en las consecuencias de tus actos no te llevaría a salvar una vida, incluso cuando lejos de ti está el deseo de quedar como un héroe.
Si alguien me hubiera revelado que luego de ese día, sería yo quien necesitaría ayuda, volvería una y mil veces a actuar con toda la imprudencia de la que soy capaz con tal de ayudarla.

Odio admitir que no me encontraría en las garras del acosador en este momento de haber actuado con prudencia como tanto me habían aconsejado pero, ser caprichosa es mí mayor defecto.

Presiona con fuerza mis muñecas contra la roca mientras me mira con malicia, quiere asegurarse de que es capaz de infligir todo el miedo posible en mí. De eso se alimenta, eso lo desquicia y le da vida al mismo tiempo. El miedo de su presa.

A pesar de encontrarme despojada de toda fortaleza, rendirme no es una opción. Siempre he pensado que ser la heroína de tu propia historia es lo ideal pero mantener la esperanza de que alguien más es capaz de arriesgarse por ti, eso también es noble.

Nunca se sabe, quien menos lo esperas, puede querer ser tu Héroe.




Quiero ser tu HéroeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora