31. Experimento Parte 2

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Inna fue cambiada de habitación bruscamente. La aventaron sin cuidado provocando que se dislocara el hombro pero de tantas heridas y fracturas ya no le importaba el dolor.

Al levantar la mirada encontró que era una habitación igual a la anterior, la única diferencia es la sirena en el fondo.

Canvi se encontraba en posición de feto, llena de sangre y sin varias escamas, las aletas mochas y con la cola rota.

Lo único que quería Inna era dormir para "escaparse" de su realidad pero el sonido de metal chocando atrás de ella la puso alerta.

Le entregaron dos tazones de comida, esta era una masa café con extraños pedazos de carne.

Inna se dio cuenta que Canvi no reaccionó al fuerte sonido, la observó con detalle, Canvi apenas si respiraba.

Así que Inna empezó a arrastrase por el piso, lentamente y con gran dolor logró llegar junto a la Sirena con los dos tazones de comida. Apenas iba a comer cuando el cansancio le ganó y cayó dormida.

***

La noche se iluminaba por la luna y las estrellas, los árboles se movían con el viento y los grillos cantaban. El frío era presente a estas horas de la madruga.

Pero Inna desea ver el cometa y Shoto quiere cumplirle ese sueño.

La pareja se encontraba recostada en el pasto, el bicolor abrazaba a la azabache la cual se acurrucaba en su lado izquierdo.

Tenían música en el fondo a un volumen bajo para que no opaque los sonidos de la noche. Una balada empezó a sonar.

—¿Quieres bailar? —preguntó Shoto acariciando el cabello de su novia.

—No sé bailar —respondió apenada.

—Yo tampoco.

Inna se rió al escucharlo.

—Entonces hay que aprender juntos —dijo la chica, se levantó y le ofreció la mano a su novio.

Entre pisadas y varias disculpas empezaron a agarrar el ritmo de la canción, al final solo se abrazaron balanceándose levemente.

—Te amo —dijo Shoto.

Antes de que la azabache le pudiera responder unas luces los distrajeron: Una lluvia de estrellas.

Inna empezó a llorar, nunca había contemplado algo tan hermoso y está feliz.

—Te amo —respondió antes de besarlo.

***

Abrió los ojos, otro recuerdo.

Enfrente de ella se encontraba Canvi, despierta y comiendo el extraño alimento que les daban.

—¿Quién es Shoto? —preguntó—. ¿Es tú destinado?

Inna la ignoró.

...

Tercer día de la segunda semana. Se llevaban a las sirenas en diferentes horarios paro no juntarlas y cuando regresaban se encontraban en peor estado.

Inna se la pasaba recordando a su familia entre sueños y aveces hablaba dormida. Canvi siempre la escucha y empezó a intrigarse.

Siren - Shoto Todoroki Donde viven las historias. Descúbrelo ahora