Capítulo 2

116 24 10
                                    

-Eso era un zombie- completó Lolito.

Por un momento Isis dejó de respirar, dejó de forcejear para que la soltaran, sintiendo como un cúmulo de emociones se mezclaban en su interior. Sus piernas empezaron a temblar, mientras ella no creía lo que había dicho el contrario.

- ¿Cómo has dicho? - dijo en un hilo de voz.

- No sabemos como, pero resulta que... - empezó a decir Lolito nervioso, temiendo la reacción de la pelinegra. - Cuando tu estabas desmayada, algunos hemos salido a la calle para ver si alguien necesitaba ayuda o al menos para comprobar que no se hubiera caído el techo de todo el edificio y hemos visto como una niña estaba siendo comida, al parecer por sus propios padres. Intentamos ayudarla, pero eran más fuertes que nosotros y al final la mataron. - En ese punto del relato al chico se le quebró la voz-  Íbamos a volver a entrar para escondernos de ellos y avisar a los demás, cuando la niña se empezó a mover de nuevo, pero ya no era ella, parecía vacía, muerta en vida, como si su alma ya no estuviera ahí y solo fuera una cascara utilizada por otro ser. Mientras corríamos de vuelta, oímos a alguien gritar mientras era mordido por la niña. La chica logro escapar y nosotros volvimos aquí.

Isis se encontraba sorprendida, parecía imposible que alguien normal se pudiera creer ese relato, pero no fue la historia en sí, sino la forma, el miedo con el que lo contó, que hizo que Isis se lo creyera por completo.

Cuando la fémina salió del trance, empezó a buscar dentro de su cabeza alguna explicación médica, alguna enfermedad, algún virus que pudiera haber causado este desastre. Obviamente no lo encontró, ¿qué enfermedad iba a causar que los muertos volvieran a la vida y se comieran a todas las personas que veían? No había otra explicación posible, eran zombies, verdaderos zombies con sed de sangre y hambre de carne humana, que harían cualquier cosa por morderlos y convertirlos en uno de ellos.

Rubius y Mangel la soltaron.

- No es posible... - susurró, más para ella misma que para los demás.

- Ya, no tiene explicación, pero esperemos que dure poco y que pronto venga alguien a rescatarnos. - dijo Rubius mientras se colocaba al lado de Lolito.

Pasaron un par de minutos en silencio hasta que Isis se levantó y dijo mientras que cogía su bolso:

- Quiero salir de aquí.

- Ok... - empezó a decir Lana mientras jugaba con un mechón de su pelo.

De repente entró un chico de alrededor 20 años, bastante alto, piel aceitunada, pelo negro, corto y ondulado, además de unos bonitos ojos café. Parecía muy asustado y alterado:
-¡Vienen!- gritó el chico mientras corría hacia la puerta de atrás.
Isis paralizada del terror vio como unos treinta cuerpos humanos aparentemente vivos pero sin un signo de alma en sus ojos entraban corriendo por la puerta con las manos extendidas hacia ella:
-¡Corre!- gritó Lolito cogiéndola del brazo izquierdo y obligándola a correr.

Corriendo salieron del centro donde se celebraba el Media Fest mientras que los zombies corrían tras ellos. Madrid estaba destruida y trozos de antiguos edificios creaban montañas de escombros haciendo más difícil escapar que si estuvieran corriendo por las calles limpias de la capital.

De repente oyeron un grito agudo y por un momento todos miraron hacía atrás con horror. La escena era horrible: Una chica de unos diecinueve años se había caído clavándose una vara de hierro en la pierna derecha. Los zombies estaban a punto de alcanzarla y ella lloraba desesperadamente mientras que se quitaba con dolor la vara de su pierna atravesada.

Isis corrió hacia ella y la ayudó a levantarse pasando el brazo izquierdo de la chica por sus hombros y empezaron a correr lo más rápido que podían:

-¡Por aquí!- gritó Luzu en la distancia mientras que subía una pared de hormigón de tres metros de alto.

Isis y la chica herida llegaron al muro las últimas y gritaron:

-¡Ayuda!

Luzu apareció encima de la pared e Isis le dijo:

-No puedo subirla por la pared.

-Dame las manos- dijo Luzu mirando a la chica herida.

La chica le dio las dos manos y con ayuda de Luzu subió la pared. De repente Isis sintió como unas manos rodeaban su cuello y le cortaba la respiración. Con esfuerzo la pelinegra sacó el espejo de su bolso y lo rompió clavándose varios cristales en los nudillos. Llevó la mano con cristales y corto los brazos del zombie que la atacaba. 

Tas liberarse de su atacante Isis subió la pared y al pasar al otro lado empezó a llorar.

(...)

Habían montado su pequeño campamento en la primera planta del edificio que estaba detrás de la pared de hormigón ya que no se había derrumbado. Ya eran las dos de la mañana y todo el mundo estaba dormido excepto Isis.

Se había quedado pensando, pensando en todo lo sucedido el día anterior: La muerte de Clara, los zombies y la idea de que seguramente morirían todos:

-¿En qué piensas?- preguntó una chica de piel ligeramente morena, pelo marrón ondulado con mechas rojas y un ojo de color verde azulado y otro morado.

-De todo esto...- contestó Isis a la chica mientras que se sentaba al lado de la pelinegra- Es todo tan confuso... Deseo que sea un sueño; los zombies, la destrucción, la muerte de mi mejor amiga... Todo. Pero, sé que no es así, sé que ella jamás volverá, que nunca más reiremos juntas o que no volveré a verla... Pero, igualmente es lo que deseo, aunque sepa que ese deseo jamás se cumplirá por que ella está muerta y todos moriremos y nos convertiremos en cuerpos vacíos de emoción para matar a nuestros amigos y familia. El resto de nuestros días los pasaremos tratando de evitar nuestro destino aunque todos sepamos que al final nos convertiremos. No podemos hacer nada para evitarlo; a lo mejor lo más inteligente sería tirarme por una ventana y reunirme con Clara.

-No digas eso- dijo la de los ojos de colores- Sobreviviremos, te lo aseguro, cogeremos armas y mataremos a esos zombies.

-Yo no creo que sea capaz de matarlos: Son humanos.

-No, los que eran humanos ya están muertos. Los zombies no tienen alma solo utilizan el cuerpo de gente muerta, pero, no son ellos. Estoy segura de que podrás matarlos. Yo te enseñare.

-Gracias...- dijo Isis limpiándose las lágrimas que caían por su rostro con la palma de las manos- Soy Isis.

-Mëliå.

-Encantada- contestó Isis mientras que se daban la mano- Bueno, yo me voy a la cama, tenemos que estar despiertas para matar a esos zombies.

-Buenas noches- dijeron las dos al unísono mientras que se tumbaban y sucumbían a la oscuridad.


Apocalipsis Zombie (Karmaland) [[CANCELADA]]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora