Carta cinco; Hilo Rojo

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"Los japoneses tienen la creencia que si dos personas estas predestinadas a conocerse, tienen un hilo rojo atado a su dedo meñique. Este hilo rojo es invisible y permanece ahí, atado a las dos personas a pesar de las circunstancias y situaciones que puedan pasar.
El hilo puede enredarse o tensarse, pero nunca romperse."

Tu y yo estamos predestinadas.
No me lo dijo nadie, tampoco el destino.
Me lo dijo el corazón.
Me lo dijo porque al escucharte reír el responde
Al ver tu emoción el se alegra
Cuando mencionan la palabra amor recuerdo tu nombre
Cada pequeño detalle hace que mi corazón responda y te quiera a ti.
Tu eres mi hilo rojo, el destino, el amor, todo me llevo a ti.
No se cuanto debe pasar para estar junto a ti.
Para abrazarte como se debe y amarte como lo mereces
Porque tu lo eres todo.
Tu eres mi luz en medio de la oscuridad
La respuesta a mis preguntas
Mi anhelo y mi deseo
La causante de mis desvelos

K.

Estaba terminado de cenar con mi primo mientras leía la carta, ya iban cinco, me preguntaba cuando iba a ser el día que descubriría quién estaba detrás de estas cartas tan hermosas...

Aunque claro, ya tenía mis sospechas, solo necesitaba investigar más y todo saldría como lo planeaba.

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Jin! Jin!.- Baje rápidamente las escaleras, casi pero casi me caigo.- Ayúdame!

¿A quien tenemos que enterrar?.- Dijo mi hermano mientras leía el periódico.-

¿Que?.- El bromeando y yo apunto del colapso! Genial!.- No seas payaso!! Ayúdame

A ver.- Dejo el periódico en la mesa y me hizo un espacio en el sillón.- Dime, que necesitas ahora de tu sabio hermano

Que me ayudes a hacer un poema.- dije mientras tomaba asiento junto a él y sacaba mi libreta y lápiz.-

Para Rose?.- Pregunto sorprendido.- Ya no tienes inspiración acaso?

No! No es para rose.- Puse la libreta en la mesa y el lápiz, realmente me sentía frustrada.-

Había olvidado por completo el poema, ya debía entregarlo mañana y yo no había hecho absolutamente nada, ni una línea!! Y gracias al estrés nada venía a mi mente.

Es para una tarea.- comencé a explicarle mientras me recostaba en el sillón.- Lo olvidé por completo y no se me ocurre nada

Solo saca lo que sientes.- Dijo Jin mientras tomaba mi libreta y lápiz.- Vamos, eres una genio para esto.

¿Pero que siento?.- recibí mis cosas y me paré del sillón.-

No lo sé! No soy tu.- Tomo el periódico y lo siguió leyendo.- Jisoo solo, hazlo como si fueras hacer uno para tu adorada rubia ¿te inspiras por ella no? Entonces piensa en ella! Saca a la Jisoo poética que todos aman.

La Jisoo poética estaba en un aprieto, muy pero muy grande.

Subí a mi habitación y me senté en mi escritorio, realmente no sabía cómo salir de esta, una parte de mi decía que solo tomara uno de los que ya había escrito pero, quería algo nuevo, quería algo que sonara bien, que cautivara a la gente, que realmente transmitiera un sentimiento.

Me recosté en mi silla y empecé a dar vueltas, no se venía nada a mi mente, nada que no fuera esa rubia que me volvía loca.

Volteé a ver un marco, ahí tenía una foto con ella, fuimos al cine un día y llevaba una cámara en su mochila.

Flashback

Para que traes eso?.- Le pregunté a la rubia que tenía una cámara en su mochila.-

Habíamos quedado de ir al cine, hace mucho que ninguna de las dos iba así que ¿porque no?

Me gusta llevarla cuando salgo.- Dijo mientras rodeaba un brazo con mi cuello y tomaba la cámara.- Sonríe!

Nos tomamos unas cuántas fotos, cuando me las entregó era en un marco de madera con una línea blanca y un corazón en la esquina con nuestras iniciales.

La foto era hermosa, Rosie me estaba abrazando mientras me daba un beso en la mejilla ¿y yo? Yo tenía una enorme sonrisa.

Ese día fue uno de los mejores.

Fin del Flashback

Realmente quería a esa rubia.

No solo por ser linda y lo que quieran, el físico no lo es todo, pero ella en si era preciosa, su forma de ser, de expresarse, sus sentimientos, todo en ella era tan hermoso y puro.

No era como todas las chicas que me rodeaban, la mayoría solo buscaba un chico lindo que las complaciera en lo que sea y ya, Rosie no era así.

Rose era una chica tranquila y luchaba por lo que quería, no necesitaba a nadie para hacer las cosas, respetaba a los demás y siempre hacía que todos se sintieran bien, buscaba la comodidad y felicidad de todos.

Era como el pequeño rayo de sol que vino a iluminar mi vida y la de los demás.

Ella me hizo cambiar mi opinión respecto a ciertas cosas, una de ellas era el amor.

Bingo!! Ya tenía algo en mente.

Me giré para quedar enfrente de nuevo de mi libreta y empezar a escribir. Intentaba que sonara lindo y profundo. Expresar todo lo que en ese momento sentía ya estaba surgiendo poco a poco.

No era tan largo pero puedo asegurar que lleva un gran sentimiento cada línea y significado.

Y una vez más Jin tenía razón, solo debía pensar en esa rubia para que mis sentimientos surgieran y sacar lo mejor de mi.

Solo la necesitaba a ella...

Maratón 4/5

𝐂𝐚𝐫𝐭𝐚𝐬 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐮𝐧𝐚 𝐑𝐮𝐛𝐢𝐚    {𝓒𝓱𝓪𝓮𝓼𝓸𝓸}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora