Capítulo 6

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Estaba en mi cuarto vagando por los últimos días de vacaciones de navidad mientras mi mamá y mi papá se habían ido a comprar yo no sé que.

—¡Buenas! –gritó Yeonjun al ver la casa muy asaltable, o sea sin un alma y la puerta del negocio abierta. Más solo que Petare a media noche y tal.

—Ya lo atienden –grité mientras me ponía algo porque estaba en top ya que hacía un calor del infierno, según yo. Mi cuerpo es muy coñoemadre porque a mí me da calor rapidito pero el frío no me da y a mí me gusta el frío.

—Hola Nana. Dile a tu papá que ya pagué los botellones.

—Está bien... No quiero empezar clases ¿Y tú? –dije con ladilla limpiando el botellón.

—Hablando de colegio ¿Sabes qué? —me preguntó me imagino yo que pensaba que era adivina. Pero no, yo soy divina, más no adivina.

—Que pasó. Cuenta el beta.

—Lo que pasó es que mi amá se enteró de los de mi liceo.

—¿Que de tu liceo? Explica las vainas bien. No me sirve el cuento mocho.

—No, que unos carajos ahí andaban periqueaos y bebiendo y mi mamá como no quería que yo fuera uno de esos chachos marihuaneros que viven en la calle me dijo que me iba a cambiar de liceo.

—¿Pa' cuál? —pregunté alzando una ceja.

—Adivina.

—No joda —dije arrechándome por el juego de adivinar, estaba que le tiraba el trapo con cloro en la cara.

—No, dale. Adivina.

—Pal veinticuatro.

—No, ni quiera Dios. Yo casi ni estoy con gente de aquí y voy a estudiar con ellos. Pa' cogete.

—Pal ilustre.

—Coño, yo soy un vago, pero un poquito aplicado y en ese colegio me van a matar a punta de trabajos.

—Me rindo ¿Pa dónde?

—Tu colegio –dijo con una sonrisa coñoemadre.

—El tricoñisimo de su madre maldito Maduro ojalá te mueras... ¿No te podías ir pal veinticuatro? ¿Era tan difícil? ¿Te iban a jalar de las patas en la noche si no te ibas pa mi colegio?

—Nojoda, yo pensaba que te caía bien. Senda falsa.

—Coño, si me caes bien y tal, pero, o sea, en el colegio es otra vaina.

—Yo sé pero naguará lo que agradezco es que no me hayan dejado aquí. Y échale la culpa a tu mamá que ella fue la que le recomendó ese colegio a la mía.

—No le puedo formá peo porque si no me castiga. Ahora me toca verte a demás de aquí, en el colegio... Y una pregunta ¿Cómo entraste al colegio si las pruebas ya las hicieron hace casi dos meses?

—O sea, yo las hice hace dos meses pero si no me decían "Si vas a entrar a este liceo" no te iba a decir nada porque ¿Pa qué? No tenía gracia –dijo y luego de unos segundo mis papás llegaron con bolsas con cosas que sabrá Dios que son ¿Algo comestible? Seguramente ¿Qué no me van a dar jartarme todo lo que sea chuchería que traigan porque ahí se ve unos Doritos XXL? Obviamente.

—Verdá que si. Bueno, ahora vas a ser uno más de la cuerda de mamaguevos de mis compañeros.

—Vasie —dijo mientras agarraba el botellón.

—Yo no discrimino a nadie.

—Que huevo tan pelao... Bueno, chao.

—¡Chao!

¡Buenas! - Choi YeonjunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora