Capítulo 1

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El overlord y el legado...

Era el año 2138 d.C., y el término DMMO-RPG no solo existía, si no que se estaba volviendo común. Siendo el acrónimo para o en inglés Dive Massively Multiplayer Online Role Playing Game, describía un tipo de juego interactivo donde uno podía jugar en un mundo virtual como si fuera la vida real, al conectar una consola dedicada a la nanointerfaz neuronal – una red de nano computadoras intracerebrales compuestas de la quintaesencia de la cibernetización y la nanotecnología. Era como si en verdad entraras en el juego. Entre los numerosos DMMO-RPGs que habían sido desarrollados, había un título que destacaba inmensamente. Yggdrasil. Era un juego que un renombrado desarrollador Japonés lanzó al mercado doce años atrás en el año 2126. No importaba a que DMMO-RPG se le comparara, Yggdrasil era un juego que ofrecía un altísimo nivel de libertad a los jugadores. El número de clases que formaban la base del juego fácilmente superaba las 2000 si se tomaba en cuenta las clases normales y las de alto rango.

Todas las clases tenían un nivel máximo de 15, lo que significaba que un jugador tenía que tener al menos 7 clases o más para llegar al nivel máximo que era 100. Además, podías probar un poco de varias clases mientras cumplieras esta condición. Había encendido el espíritu artístico de los jugadores Japoneses y causado un fenómeno que luego sería llamado "Popularidad Visual". Con una explosiva popularidad tras él, había alcanzado tal nivel de ovación que Yggdrasil y DMMORPG eran considerados como uno y el mismo en Japón.

—Sin embargo, esa era una historia de la generación pasada

Una gran mesa redonda de obsidiana brillante se encontraba en el centro de la cámara gremial, rodeada de 41 lujosos asientos. Pero la mayoría estaban vacíos. Solo dos siluetas eran visibles ahora donde todos los miembros alguna vez se sentaron. Uno llevaba una elaborada túnica completamente negra, adornada con oro y bordes violetas. La decoración alrededor de cuello parecía algo excesiva, pero extrañamente, era bastante apropiada.

Sin embargo, la cabeza que debería estar sobre el lujoso collar no era más que un cráneo, desprovista de piel y carne. Dentro de las órbitas oculares había un brillo rojo oscuro, y un objeto oscuro con forma de halo brillaba tenuemente detrás de su cabeza. El otro individuo en la mesa tampoco era humano. Era un bulto negro de masa viscosa. Su superficie, que daba la impresión de ser alquitrán, se estremecía y no mantenía una forma consistente ni por un segundo. El primero era un Overlord que ocupaba uno de los lugares más altos incluso entre los Liches Ancianos – Usuarios Mágicos que se convirtieron en no-muertos en su búsqueda de la magia más poderosa. El otro era un Ooze Negro Anciano, una raza con poderosas habilidades acídicas que estaba cerca de los más fuertes entre los del tipo Slime. Sin embargo, ellos no eran monstruos. Eran avatares de jugadores. Las razas jugables en Yggdrasil estaban divididas en tres categorías diversas: Razas humanoides clásicas como humanos, enanos y elfos; razas semi-humanas con apariencias desagradables como goblins, orcos, y ogros, favorecidos por su destreza física; y las razas heteromórficas que poseían habilidades de monstruos y stats mayores a cualquier otra raza, pero que les eran dadas restricciones en varios aspectos. Si se incluyeran las razas de alto nivel para estas 3 categorías, el número de todas las razas llegaría a un total de 700. Por supuesto, Overlord y Ooze Negro Anciano eran unas de las razas heteromórficas de alto nivel que los jugadores podían escoger. Entre esas dos personas, el Overlord hablaba sin mover la boca. Incluso siendo el mejor DMMORPG de la generación pasada, era tecnológicamente imposible cambiar las expresiones para que acompañasen la conversación.

"Wow, ha pasado realmente mucho tiempo, Herohero-sama. Incluso siendo el último día de Yggdrasil, honestamente no esperaba que nadie viniera."

"Estoy de acuerdo. Ha pasado tanto tiempo, Momonga-sama."

Overlord entre diosesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora