Capítulo 15

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Un lugar oscuro. Paredes de color oscuro. Aquellas piedras calizas. Todo eso estaba a su alrededor, rodeándola. Un sueño maldita. Un final maldito.

-El bien siempre prevalecerá al final-

...

O eso es lo que creía en lo más profundo de ella al menos hace tiempo.

Ella luchó. Valiéndose por sí misma, se había enfrentado a aquellas fuerzas que se ocultaban en las sombras del mundo, lejos de la vista de los dioses.

Ella resistió, contra aquella oscuridad que era tan asquerosa, tan aborrecible que tan solo el hecho de mirar le daban ganas de vomitar o simplemente de querer destruirla.

Un enfrentamiento entre la luz y la oscuridad. Defendió sus ideales, sus justos ideales, arraigada a ellos hasta el final, ella luchó.

Su cuerpo llevado hasta los límites posibles e imposibles.

¿Por qué luchaba sola?

Sí, era porque nadie más había notado su presencia. Los que lo hicieron no tuvieron un buen final.

Aquello era fuerte y se había arraigado fuertemente a las raíces de este nuevo mundo.

Tenía poder, sí. Era antiguo, sí.

¿Era asqueroso?

Definitivamente.

Era algo que nunca antes había visto.

Luchó y luchó. Sola y sin nadie en quién apoyarse, ella se resistió a caer sin hacer nada.

Ohh, dios mío todopoderoso. Dame la fuerza una vez más para levantarme y triunfar contra el mal

¿Por qué lo hacía?

Ella no lo sabía. No era creyente. No era alguien que se apegara a los panteones ni a otros.

Pero ya se le acababan las fuerzas. Nadie era insondable. Todo, sin excepción, algún momento se romperá.

Su mente era justa, sus ideales eran justos, así que

¿Por qué perdió?

¿Era tonta?

No, definitivamente no. Incluso fue considerada un genio entre genios, un talento visto solo cada mileno, pero...

Aun así perdió.

¿Le faltaba fuerza?

Posiblemente.

Aquello era fuerte, demasiado para ella.

Una y otra vez, tratando de vencerlo, no pudo. Intento tras intento, al final, no hizo más que ser un juguete para ellos.

Sus brazos, estaban cansados y débiles, ya no podían sujetar su arma.

Sus piernas, de las cuales la hacían moverse a una velocidad increíble, ahora estaban llenas de sangre y cortaduras para que no pueda moverse más.

Sus músculos gritando de dolor por la sobreexplotación a la que se enfrentaron.

¿Su mente que una vez fue tan fuerte como una montaña?

Ahora solo estaba vacía.

¿Por qué luchaba?

Ya no lo recuerda. A pesar de que luchó y luchó, sin esperar una recompensa por lo que hacía, (Un ideal justo) al final solo mató y mató. Sin embargo, ahora ya no recuerda.

No, ella ya estaba cansada.

Hizo lo mejor que pudo.

Se resistió hasta que sus huesos crujieron. Hasta que sus músculos se destruyeron.

Overlord entre diosesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora