📱🗯

338 31 16
                                    

Los tres chicos estaban sentados en la sala de aquella casa, uno secaba sus lágrimas mientras oía la conversación de los otros dos. Los demás los dejaron para que tuvieran más confianza, tranquilidad y pudieran calmarse.

— Raptor, ¿Por que no le avisas a alguien? A alguna autoridad, no se. Ah... —dio un breve suspiro.— No puedes dejar que siga esto, a la larga puede hacerte más daño.

— Lo sé... —agachó la mirada.— Pero Mike es la más grande autoridad aquí, se supone que esto no debería de pasar... Un puto mundo "perfecto". Yo no veo lo perfecto en esta mierda. —Miró nuevamente al castaño.—

— ¿Sabes? Quédate hoy aquí, tengo cosas que contarte. —Muzi miró atónito al menor, con confusión.— ¿Quieres salir de aquí?

— Sparta... ¿Podemos hablar? —El chico con sudaderas de rayas tomó de la mano rápidamente a su amigo y lo llevó unos cuantos pasos hasta que se asegurara de que no se oiría la conversación.— ¿Que piensas decirle?

— Si el no quiere quedarse aquí, puede ayudarnos. ¿Te das cuenta todo lo que sabe? Podemos usar eso en contra de Mike, podríamos hasta exponerlo. Solo piénsalo. —Sparta soltó la mano de Muzi y se dirigió a donde estaba su invitado.— ¿Entonces que dices? ¿Te quedas?

— Claramente. —dio un salto y abrazó al castaño.— Gracias, realmente no quiero volver. Pero tengo miedo de que vengan aquí. Somos vecinos, rápidamente pensará que estoy aquí...

— De eso no te preocupes, nosotros estamos aquí, somos seis personas contra una. — Dijo el moreno, algo que le causó mucha ternura a Sparta.—

— Antes que nada, tenemos que decirte algo. –Los dos chicos se miraron unos segundos y desviaron la mirada.— Pero promete que no dirás nada.

— Claro, díganlo. —Dio una sonrisa, aun con lágrimas en los ojos.—

— Bien, confiamos en ti, pero como digas algo... —Muzi detuvo a Sparta.—

— Y Trollino? No vamos a avisarle? —Raptor los miro confundido.—

— Acaso secuestran gente? —Los dos contrarios se sorprendieron con la pregunta del invitado.—

— Jaja, no. —Dijo sarcásticamente Muzi.—

— Te lo dirímenos en la tarde. —Raptor bufo y los chicos volvieron a mirarse.— ¿Tan malo es?

— No es eso... digamos que es peligroso. —El castaño bajo la mirada.— Muzi, trae a Trolli.

— Lo que digas jefe. —Simuló comillas con sus dedos en esta última palabra.—

— Mira Raptor, esto es peligroso, porque nos estamos enfrentando en una guerra fría contra este mundo. —Raptor lo miro confundido, inclinó un poco la cabeza.—

— ¿Guerra Fría? –Preguntó.—

— Solo necesitamos una cosa, y es que nos digas cosas que nos pueden ayudar en esta situación. —Sparta miró a Raptor.—

— ¿Pero que cosas? Ni si quiera se dé que hablas. —Raptor pensó un poco.— Es sobre Mike. ¿Verdad?

— Así es... — Trollino se encontraba bajando las escaleras junto con Muzi.— Y nos tienes que prometer que si te quieres ir de este lugar, nos tienes que ayudar.

— Los demás chicos miraron a Raptor, una presión lo invadió.— P-Pero... —tartamudeó un poco.— ¿Que quieren saber sobre el? ¿Y para que?

— Trollino habló.— Somos parte de la rebelión. —Raptor se quedó atónito.— Y necesitamos de tu ayuda. ¿Quieres salir de aquí? Todo tiene un precio.

—Raptor miró sus manos, sintió el sudor frío recorrer su cara. Todo de lo que había hablado con Mike alguna vez estaba sucediendo, la rebelión se había infiltrado.— Yo...

— Ya no hay vuelta atrás Raptor. —dijo Sparta.— Podemos ayudarte, pero tú también tendrás que colaborar. —Raptor dirigió su mirada hacía Sparta, que se encontraba dándole una sonrisa cálida, algo que hizo que sus mejillas se tornaran un color carmesí, que no se llegaba a notar por lo moreno de su piel.—

— Está bien. — Raptor también sonrió.— Todo tiene un costo, pero ese costo lo pagará Mike.

[...]

— ¿Por que tardaste tanto Mike? —preguntó Acenix con un tono de angustia.—

— Ya sabes, el estupido de Raptor haciendo su drama. —dio un pequeño bostezo.— Desearía que solo no se quejara tanto.—

— A veces no sé qué hacer contigo... —Acenix prendió su monitor, el se encontraba sentado, el otro chico parecía controlar algo en el aire, una especie de pantalla.—

— Creo que tengo la solución, al menos por las próximas 2 semanas. —dijo mientras movía sus manos cerca de esa pantalla.—

— No me digas... —El chico de pelo grisáceo volteo rápidamente.— Mover el mapa de nuevo no nos ayudará Mike, solo le dará ventaja al virus.—

— Pero, si no nos movemos nos alcanzarán. —El chico contrario quedó en un silencio total, sabía que tenía razón, pero a la vez empeoraba las cosas.— Por cierto, intente hablar con los chicos nuevos. En especial con el de corona.—

— Aja... —Solo hizo una mueca, lo estaba escuchando, mientras veía algo en su monitor.— ¿Qué te dijo? —

— Realmente nada, solo lo deprimente que es el mundo actual, y lo mucho que le gusta el café. — Al recordarlo hizo que una pequeña sonrisa se posara en la cara de Mike.—

— Bien, supongo. Intentaré hablar con Flex, parece que se lleva bien con uno de ellos. — Soltó sin más y siguió con su trabajo.— por último, por favor cura a mi novio, has lo único que te pido, su ojo está así por tu culpa.—

— Ugh... si. —suspiró; ¿Cómo decirle a Acenix que esta vez no tenía la suficiente energía para curarlo?—

— Le mandaré un mensaje a Flex, diré que traiga a los nuevos. —Mike escuchó como el contrario tocaba rápidamente las teclas, escribiendo tan rápido que no pudo si quiera sugerir algo para el plan.— Hablaremos con ellos y los enviaremos a investigar la otra zona, mientras nosotros movemos el mapa. Les daremos equipamiento y dentro de este incluiremos cámaras para vigilarlos.

— El castaño quedó atónito.— Por algo es el jugador número 2... —Susurro.— ¿De verdad era buena idea mandarlos así sin más? Apenas los conocían; Jon era experto en las investigaciones, y aun así siempre regresaba lastimado, ¿Cómo se suponía que los nuevos regresarán con información, y más importante, con vida? —

[...]

Un chico de pelo azul brillante yacía en una de esas lindas bancas que estaban en el parque, tenía tiempo esperando ahí, su tan emocionante cita terminó siendo un completo fracaso, empezando porque su cita jamás llegó. Prácticamente se sentía devastado.

— Jamás debí ilusionarme tanto con Silvio.—pensó Flex antes de levantarse y sacudir su pantalón.—¡La próxima vez-! —gritó.— No, no habrá una próxima vez. —Camino con la cabeza gacha todo el camino hasta su vivienda.

Mientras este daba pasos cortos sintió como su celular vibró, por un momento le regreso la esperanza de que aquel chico se disculpara y le diera muchas razones por las que no pudo ir; pero terminó siendo un mensaje de Acenix.

"Trae a los nuevos, para hoy. Necesitamos llevarlos al otro lado del mapa. Recuerda, casa 45."

— Al... ¿otro lado? —murmuró. Estaba asustado, ¿Mandarían a los chicos a una zona tan peligrosa? Tan rápido mencionaron a su nuevo amigo, olvidó su ánimo y salió corriendo hacia la casa de los antes nombrados.—

[...]

— — — — — — — — ✈︎

— ¡Regresando para publicar al menos dos capítulos más! Gracias a la persona que me escribió en mi muro que siguiera la historia, sinceramente ya me había olvidado ( ' ▽ ' )

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 18, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

❤︎🌃 𝙸 𝚕𝚒𝚔𝚎 𝚖𝚎 𝚋𝚎𝚝𝚝𝚎𝚛 🏙❤︎  ᖴᒪᗴ᙭KᗩTODonde viven las historias. Descúbrelo ahora