Cuando San salta hasta él puede regresar, desde hace minutos que su mente estaba lejos, corriendo diez pasos atrás de él por los largos pasillos de la torre. No quiere hacer preguntas, no quiere recordar lo que ocurrió, tan solo abraza al niño con fuerza mientras que su hermana se une al abrazo casi tacleándolos en el proceso. Es un alivio tenerlos, saber que están ahí, pero la luz roja parpadeante pone sus nervios de punta.
Sí, hay que salir de ahí pronto, pero la gente ha abarrotado las escaleras y los elevadores, no hay salidas viables y que sean rápidas, pudo comprobarlo cuando corrió por todos los pasillos junto a YoonGi. ¿entonces que hacer? Su mirada cae sobre YoonGi mientras que este toma aire, como si correr unos cuantos metros hubiera acabado con toda su energía.—¿Qué hacemos ahora?— Pegunta JiMin intentando ponerse de pie, sin embargo no soporta el peso de su niño y casi cae. YoonGi lo sostiene.
—Hay que salir, y llevarte con un médico, parece que vas a desmayarte, estás todo pálido.
—¿Qué le pasó a tu hombro?— Pregunta San. —¿Duele mucho? ¿Dónde estabas?
—¡Estábamos muy preocupados!
— Grita MyeongSuk. —¡¿y porque estamos en una emergencia?! No parece un simulacro.—No lo es. Realmente es una emergencia.— Dice YoonGi tomando a JiMin para que este no caiga. —¿Por qué no evacuaron cuando sonó la alarma? ¡Ahora será casi imposible!
—¡Dijiste que no nos moviéramos de aquí! MyeongSuk dijo que era mejor esperarte. Tonta MyeongSuk.
—Tonto Choi, si nos hubiéramos ido ellos hubieran llegado hasta aquí para nada.
JiMin suspira un poco. Ver a MyeongSuk y Choi discutir no es algo que le sorprenda, ellos suelen hacerlo de vez en cuando, por lo general cuando los dos se aburren de estar en paz y sacan cualquier cosa para discutir, y es un poco estresante, porque sabe que su pequeño solo lo hace para molestar a Sukie, a San realmente no le interesan las cosas sobre las cueles discuten, para ser honestos a San parece no interesarle nada por más de dos segundos.
Se abraza a YoonGi para no caer, aunque sus piernas tiemblen sabe que soportan su propio peso y poco más, solo espera a que están aguanten lo suficiente como para salir de la torre. Cierra los ojos por un segundo. Su cabeza duele.—¿Estás bien?— Escucha a YoonGi preguntar casi directamente a su oído. Asiente. —No te desmayes, aún no.— Vuelve a asentir y un pequeño beso aterriza sobre su mejilla. Y es jodidamente extraño. Sus piernas fallan pero por suerte YoonGi soporta su peso y evita que caiga. —Hey, desfalleces por mí, que halagador.
—Te detesto.
Se abraza a YoonGi admitiendo que lo extraña un poco, extraña aquellos días simples donde no pasaba nada malo, donde le daba la pequeña ilusión de tener una familia. Un sueño tonto que fue cumplido gracias a él.
YoonGi le quitó todo, le quitó a su familia, su hogar, su padre, le quitó su primer beso, su primera vez, todo lo que JiMin tenía y que realmente no era suyo YoonGi encontró una manera para arrebatárselo ¿Cómo podía entonces estar enamorado de él? El amor es tan extraño e incomprensible, tan difuso que no sabe si lo que siente es o no es amor ¿Cómo saberlo? Sus padres no parecían muy enamorados, JiMin ni siquiera entendía porqué su madre estaba con una persona como su padre. JiMin no sabe nada de amar.Sabe cuidar, sabe proteger, pero no sabe si realmente ama. Ama a San, a su hermana, y amó a su madre ¿eso es suficiente? ¿Cómo puede saber si ama a YoonGi?
—Vámonos de aquí— Escucha a YoonGi.
Los niños son obedientes y siguen a YoonGi mientras este camina a la salida, JiMin se sostiene de él aunque siente que en cualquier momento ambos caerán. El pasillo se encuentra silencioso, no hay nadie corriendo, las puertas abiertas a lo largo y los papeles sobre el suelo dan una extraña impresión que se combina con la luz roja.
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Inmundo »YoonMin« #2
RomanceJiMin es un chico de 15 años tratando de sobrevivir a los vestigios de una guerra. Recolectaba, vendía compraba en su pequeña y devastada ciudad, pero un sucio llegó para tambalear su corta vida. Cuatro años después, habiendo logrado huir de su ant...