La búsqueda interminable
Me bajé del bus con una sensación de tristeza en el pecho. Era tarde en la noche y en las calles de Victoria Avery, rumbo a mi casa, no había nadie.
Caminé, abrazándome los brazos desnudos, reprimiendo el nudo en la garganta para no llorar. Llevaba semanas así, volviendo a casa tarde con las manos vacías y el corazón roto, como si algo me faltara.
Y es que me faltaba todo. A ese punto, a esa hora, después de pasar el día entero caminando entre pastizales, peinando la tierra y buscando bultos debajo de ella, me sentía tan vacía que ni la energía de todo el mundo podría llenarme.
Siempre supe que la búsqueda sería difícil, pero no conté con el dolor que me ocasionaba no obtener las respuestas. No encontrar a Penélope y regresar a casa, con cada día que pasaba, se volvía una carga más y más pesada.
Tomé mi teléfono celular y escribí un mensaje en el grupo de Whatsapp que más usaba últimamente.
Esperé menos de un segundo antes de que Luca me respondiera. Nora y Edén también contestaron al instante, pero, a diferencia de mi novio, ellas no indagaron en el sitio al que había ido hoy. Él estaba de vacaciones y tenía una pésima señal en la costa del país, así que no habíamos charlado demasiado sobre mis planes de búsqueda.
Llegó otro mensaje y casi que no tuve que mirar quien había sido. Nora estaba esperando mi reporte.
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Sueños enterrados (Suspiros Robados 2)
ParanormalSegunda parte de Suspiros robados. • Serena ha vengado su muerte, pero ahora debe encontrar los cuerpos de las demás chicas asesinadas para darles justicia y detener otra serie de muertes que podrían implicar un nuevo círculo de sangre...