00 | Prólogo: ''La última pieza.''

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Hyung, ya sabes lo que piensa todo el equipo: las seis chicas que hemos seleccionado son excepcionales. Este proyecto no necesita nada más —afirmó Wookjung, CEO de JYP Corporation, con una seguridad que solo años de experiencia pueden otorgar.


JYP se mantuvo en silencio, con la mirada fija en el ventanal de su oficina. Afuera, las luces de Seúl brillaban en la fría noche de diciembre, pero no era realmente eso lo que atrapaba su atención. Tenía la mente en otra parte.


—Lo sé, Wookjung, son talentosas. Cada una de ellas es especial —admitió Jinyoung, girando su silla al cabo de un rato para afrontar a su amigo y colega—. Pero... sigo sintiendo que falta algo.

Wookjung frunció el ceño, sin comprender del todo—. Seis es un número perfecto. Es equilibrado, fácil de manejar. Además, ya hemos invertido mucho en estas muchachas. Insisto en que podríamos desestabilizar la dinámica del grupo si corremos el riesgo de añadir una más. ¿Por qué siete, Jinyoung?

JYP respiró hondo, intentando de organizar sus pensamientos antes de responder—. Ni yo mismo puedo explicar bien eso aún, pero tengo la certeza de que así debe ser —sonrió—. No es meramente una cuestión de cantidad; se trata de completar el cuadro. Creo que todavía no se ve con claridad toda la imagen.

Wookjung no entendía nada, pensaría que se había vuelto loco si no lo conociera tan bien. Esperó al menos encontrar algún atisbo de incertidumbre en los ojos de su jefe, pero no. JYP estaba convencido, y cuando él sentía esa certeza, era difícil hacerlo cambiar de opinión. Wook había aprendido a confiar en la intuición de Jinyoung, por más irracional que pareciera.

—Está bien —cedió finalmente con un suspiro—. Seguiremos buscando. Esta chica tendrá que ser extraordinaria, no podemos permitirnos menos —estuvo a punto de salir, pero se volteó nuevamente hacia JYP—. No quisiera ser yo quien te diga esto, Jinyoung, pero el tiempo corre. No tenemos idea de cuánto puede tomarnos esta búsqueda, y hay bastante en juego. Espero que estés muy seguro de seguir aplazando esta decisión.


Park asintió, sintiendo una extraña paz en su corazón. Sabía que la encontrarían. Como bien decía Wookjung, era cuestión de tiempo, pero la espera valdría la pena.

Unas semanas después de esa conversación, JYP se hallaba rumbo a Pledis Entertainment, compañía liderada por un viejo amigo, Hang Seongsu. El propósito de su visita era puramente comercial, un acuerdo para coproducir una nueva serie de conciertos que estaban planeando para el próximo año. Las reuniones de negocio no eran su actividad favorita, pero siempre abrían las puertas a nuevas oportunidades.

La decoración de la sala de juntas era cálida y acogedora, en contraste con el aire gélido del exterior. La reunión transcurrió como cualquier otra, tocando puntos cruciales sobre contratos, promociones y detalles logísticos.

Finalmente, después de varias horas encerrados con el resto del equipo que representaba a ambas empresas, Hang sugirió a JYP un descanso para hacer un pequeño tour por sus instalaciones. JYP aceptó de inmediato, feliz de poder estirar las piernas. Caminaban charlando casualmente por los largos pasillos, cuando una melodía suave y llena de emoción flotó en el aire. Jinyoung se detuvo en seco. La música parecía envolverlo, cada nota resonaba profundamente en su corazón. Su intuición se disparó, tenía la sensación de que estaba en el lugar y el momento indicados.

—¿Quién está cantando? —preguntó, sus ojos brillando con curiosidad. Se adelantó unos pasos siguiendo la voz femenina que llegaba del final del corredor.

—Oh, esa debe ser la encantadora Soji —respondió su amigo, sonriendo—. Es una de nuestras aprendices. Ha estado entrenándose durante años, sin embargo, las circunstancias no han sido favorables para su debut. Es talentosa, pero...

AGAPĒ: Más allá del escenario | Stray KidsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora