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—¿En serio se tienen que ir?— pregunta el pequeño Joon con un puchero en sus labios mientras sostiene un peluche de conejo en sus manitos.

— Si pequeño, el tío tiene que regresar a su trabajo — le dice Jimin mientras lo levanta del piso y lo sostiene en sus brazos.

— Los vamos a extrañar mucho — dice la señora Park mientras me da un abrazo de despedida.

— Nosotros igual — le dije mientras le devolvía el abrazo más fuerte.

Me había encariñado con esta hermosa familia, era perfecta la sensación de sentirte en casa junto con ellos y ahora tendríamos que volver a nuestra casa donde los males entendidos estarían presentes.

Ambos nos despidimos de todos y cuando ya estábamos sentados en el auto la señora Park se acerca a mí lado de la ventana y me dice: "recuerda lo que hablamos linda".

Solo asentí con una sonrisa y me coloque el cinturón de seguridad y comenzó el viaje.

Nadie decía una mísera palabra así que tire mí asiento un poco hacia atrás para dormir y me puse a pensar en lo que me había dicho la señora Park hace unos días en la cafetería.

Flashback:

Entrábamos nosotras dos a la cafetería. La mamá de Jimin me había invitado a tomar un café con ella por lo cual no me negué, ella parecía una madre para mí que me consentía durante estás dos semanas.

Nos sentamos en una mesa una frente a la otra  que nos dejaba ver una ventana donde se podía ver a las personas con sus compras o que paseaban por ahí.

—¿Que piensan ordenar?— nos dice un mozo

— Dos cafés, por favor — le responde ella —  y unas medialunas.

El solo asiente y se va a preparar lo que pudimos. 

—¿Cómo la estás pasando acá?— me pregunta ella mientras toma mí muñeca izquierda y me regala una sonrisa.

— La verdad es hermoso, no quisiera irme de acá pero Jimin tiene que volver a la empresa para sus prácticas — le respondí.

— Es entendible linda — no quitaba esa hermosa sonrisa de su boca.

— Me da un poco de cosa volver a la casa y estar solo nosotros dos ahí — dije mientras desviaba mí mirada.

— Te entiendo. Se que no debe ser fácil pero te aseguro que Jimin no es un mal muchacho.

— Lo sé, pero somos tan pero tan diferentes — la mire

— Créeme que lo sé. Jimin es un muchacho muy inseguro de si mismo y tu si eres segura de ti misma.

— No entiendo porque él es así

— Bueno la fama tiene su lado bueno y su lado malo — dice.

El mozo aparece con nuestras órdenes y se retira después con una breve reverencia.

— Pero lo tiene todo — le dije mientras llevaba mí café a la boca.

— No lo creas linda, no confía en si mismo y por eso tiene problemas contigo

— Me da un poco de vergüenza que usted sepa de nuestros problemas — le dije algo avergonzada mientras bajaba mí cabeza.

— Ay linda. Es obvio que todos los matrimonios van a tener problemas porque no son perfectos pero lo importante es que sepan cómo resolver sus problemas.  — dice y luego le da un sorbo a su café — Con el padre de él también hemos tenido problemas pero siempre supimos resolverlo.

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