Los humanos en la actualidad dan todo por quedar bien ante la sociedad pero que pasa cuando la sociedad no existe, cuando tienes que sacar a tu verdadero yo para sobrevivir a un apocalipsis, en donde cualquiera está dispuesto a matarte por sobrevivi...
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Había transcurridos unos cuantos meses, los pequeños ahora no tan pequeños se habían convertido en adolescentes, su forma de ver la vida cambió en uno de ellos, se volvió más reservado, más cerrador y por supuesto más callado.
—Carl,—llamó la ahora adolescente Maddie quien lucía un tanto cambiada en unos cuantos meses, sus ojos azules destellaban el mar del océano debido a su alegría que traía consigo, su cabello castaño llegaba hasta su cadera atado en una trenza hecha por Beth y su vestimenta era una chaqueta que le había dado Daryl por su cumpleaños acompañada de una camisa blanca y unos jeans desgastados
—Maddie —contesto seco como era costumbres desde hace meses, este vestían casi igual que la adolescente a excepción de la chaqueta este traía una para el frío y botas a comparación de la chica que solo tenía tenis
—encontre esto—le extendió un pequeño bote de pudín—lo encontré en un estante —el niño sonrió como solía hacer solo con la chica puesto a que quitó la sonrisa cuando llegó su madre a la escena
—Maddie, cariño no hagas tanto ruido—advirtió la embarazada entrando con cuidado a la farmacia—solo vinimos para llevarnos algunas medicinas —cogió unas que estaban en un estante cercana
La castaña asintió con vergüenza y riendo en secreto, él castaño se dio la vuelta y siguió buscando más cosas para llevar al campamento, Lori suspiró y siguió echando cosas a su bolsa, la castaña corrió tras su mejor amigo para ayudarlo o solo hablar con él.
—Carl, espérame—lo alcanzó e inmediatamente tomó el arco en su espalda y agarro una de sus flechas
—no hagas ruido—susurro viendo a los tres caminantes encerrados en una especie de bodega llena de medicamento
Los dos con precaución asintieron para abrir la puerta aunque una voz la evitó, dando finalizada la búsqueda de medicina, los dos niños dudaron en que hacer, aunque después de todo era muy riesgoso, Maddie corrió tras Glenn y esté aviso a Rick sobre la bodega, decidido el plan entraron en busca de todo el medicamento.
—no debiste decirles—reclamó el castaño a la ojiazul, caminando con la mochila de ambos en la espalda
—lo siento—lo abrazo—pero era un riesgo—susurro inocente
—ve con Beth, quiero pensar—ordenó, la pequeña sin querer hacerlo asintió y fue tras la rubia que miraba la escena
—hola, Beth—saludó con una sonrisa
—hola, Mads—revolvió el pelo de la castaña sacando unos cuantos mechones de su cabello—¿algún día lo cortarás?—la castaña negó
—Margaret decía que solo lo cortaba cuando algo malo pasaba, algo que rompía tu corazón y solo eso era una señal para seguir adelante, olvidando el pasado, ya que si lo cortas seguido desperdicias momentos buenos y cuando lo cortas cuando algo te afecta te liberas del dolor provocado en ese momento—la rubia asintió caminando hacia los autos
