ENAMORADOS DE LOS SLYTHERIN

El fuego se propaga

Narrador P.V.O

Hermione está despierta. Bueno, si es que se puede considerar "despierta" a una persona que oye y piensa pero que no puede moverse.

-¿¡...PERO CÓMO HEMOS LLEGADO A ESTE PUNTO?! -escucha Hermione a su mejor amiga.

De repente, recobra toda la sensibilidad en su cuerpo. Abre imperceptiblemente los ojos. Draco la observa fijamente, y sus ojos expertos ya saben que Hermione está atenta de todo.

-¡¿QUÉ QUERÍAS QUE HICIESE?! ¡¡NO IBA A DEJARME MATAR POR WEASLEY-PIS!! -se defiende Draco, ya que su amigo Zabini lo observa con una mirada reprochante. Y Ginny lo miraba con cara de odio y rencor acumulado.

-¡¡TÍO, PERO NO MATARLO!! -Blaise, inconscientemente, se ha acercado amenazadoramente a él.

-¡¡CALLAOS DE UNA MALDITA VEZ!! -tercia Hermione, gritando más fuerte que nadie. Nadie puede reprocharle ese fuerte rugido que demuestra su procedencia de Gryffindor.

HERMIONE P.V.O

-¡¡CALLAOS DE UNA VEZ!! ¡¡ESTÁIS DISCUTIENDO EN VANO!! ¡¡RON ESTÁ MUERTO Y YA NO SE PUEDE HACER NADA PARA REVERTIR EL PASADO!! -grito al borde de las lágrimas. Cuando consigo tranquilizarme vuelvo a hablar para romper el silencio incómodo que empezaba a aparecer en la sala -A mí también me duele su muerte. Es más, creo que estoy paranoica: antes lo vi al lado de Draco en el Gran Comedor.

-Hermione, lo que viste fue real -Draco me mira con preocupación. Supongo que le da miedo saber cómo me lo voy a tomar.

- ¡¡ES IMPOSIBLE QUE SEA UN FANTASMA!! -tercian Ginny y Blaise a la misma vez.

-Pues es posible porque lo que es. No es una ilusión, algo extraño ha pasado y se ha convertido en fantasma.

Entra un medimago, especialmente guapo, que se dirige y atrae la atención de Hermione.

-Bueno, guerrera. Los exámenes de sangre han salido bien. Sólo tienes que firmar y ya podrás irte -Draco lo observa detenidamente de reojo.

-¡Gracias! Ya me empezaba a preocupar... -ni ella misma se daba cuenta de que coqueteaba con el medimago.

-Aunque, si prefieres quedarte, no hay ningún inconveniente -Draco carraspea para hacer notar su presencia.

-Tranquilo, Draco, no parece morder -lo relaja Herm.

-Sólo si tú me lo pides -el medimago le guiña un ojo a la castaña.

-¿Ya me puedo llevar a mi mujer? -el rubio recalca el determinante posesivo.

Recogen todas las cosas que hay por la habitación y se marchan. Al salir, la recepcionista le echa una mirada de arriba a abajo al Príncipe de Slytherin, y éste le corresponde con una sonrisa tan seductora de marca Malfoy.

HERMIONE P.V.O

-Luego soy yo la que coquetea... -dejo caer al salir del hospital.

-¿Sabes qué? Tengo inmensas ganas de echarte en cara todo lo que haces, pero no voy a hacerlo, ¿y sabes por qué? Porque esperaré al momento en el que me reproches algo, para poder restregarte todo lo que has hecho.

-Nosotros no pintamos nada aqui... Le diremos a la directora McGonagall que ya regresareis a Hogwarts -Blaise le coge cariñosamente la mano a Ginny y se marchan.

-¡Oh vaya! Mira quien vuelve: el egocéntrico, narcisista, antipático, presumido y chulo del Príncipe de Slytherin.¿Soy tu mujer y aún así me vas a sacar todo lo malo?

-¡¡SÍ!! ¡¡PORQUE NO ERES PERFECTA COMO TÚ TE CREES!! -Draco me está gritando y me estoy poniendo de los nervios. La gente nos mira. Normal, estamos haciendo un espectáculo en mitad de la calle.

- ¿A qué viene todo esto ahora? ¿Te molestó lo del medimago? -intento coger su mano pero me esquiva.

-Eres mía, sólo mía. La gente quiere lo que es de los demás.

-¿¡TUYA?! ¿¡CÓMO QUE TUYA?! ¡¡NO SOY UN OBJETO NI UN TROFEO?! ¡¡SOY UNA PERSONA!! ¡¡SON UNA GRANGER...!! -sigo gritando. Ya me da igual si la gente nos ve.

-Se ha vuelto loca... ha perdido el juicio... -murmura Draco.

-¡¡NO ESTOY LOCA, MALFOY!! ¿¡QUÉ FUE LO QUE VI EN TI?! ¡¡SIGUES SIENDO EL MISMO DE ANTES!! ¡¡NUNCA VAS A CAMBIAR Y ESE ES TU GRAN PROBLEMA!! -me quito el anillo de casada y se lo tiro. Quizás me arrepienta, quizás no -...Pido el divorcio...

DRACO P.V.O.

Me deja destrozado lo que Hermione acaba de decir. Casi puedo escuchar, literalmente, mi corazón partirse en un millón de trozos. Trozos afilados y cortantes como el hielo. Mi corazón de hielo.

Ahora mismo no puedo hacer nada. Cuando se enfada así lo mejor es esperar a que se tranquilice. Recojo el anillo y lo guardo en mi bolsillo.

-¿Otra pelea de parejita? -aparece Roniefantasma detrás de mí - No os lo niego, el medimago ese estaba para comérselo enterito.

-A ti, lo gay, no se te va ni después de muerto. -bufo muerto de cansancio.

No sé cómo lo hago, pero apenas deseo que me deje solo y, repentinamente, se esfuma. Como si nunca hubiese estado ahí.

-Necesito una copa... -me masajeo las sienes mientras mando un patronus a Blaise.

NARRADOR P.V.O.

Blaise está demasiado ocupado desnudando a Ginny en el cuarto de baño de Myrtle La Llorona como para hacer caso al patronus.

Hermione se dirige a la biblioteca, como cada vez que se enfada.

Y Draco se dirige al pub de Cabeza de Puerco. Allí, por lo visto, no sabe llevar la cuenta de la cantidad de botellas de whiskey de fuego. Se olvida de contarlas al beberse la número 18. Se aleja a un sitio más apartado, saca su varita, se apunta con ella y dice:

-Avada Kedavra.