Capítulo 2: Comienzo

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Ahora que he decidido empezar de nuevo y dejar todo mi pasado atrás, debo buscar algo en qué entretenerme o ver qué es lo que voy a estudiar. Creo que este pichón debe dejar el nido muy pronto. No puedo seguir abusando de la amabilidad de los padres de Orielle. Además, debo ver la forma de retribuir todo lo que me han brindado, aunque me cueste toda una vida. Orielle es mayor que yo por tres años y ya está perfilándose en sus estudios. Ya encontró lo que desea dedicarse. ¿Y yo? Sigo buscando. ¡Vaya forma de querer retribuir todo lo que me han dado! Aunque estoy entusiasmada por estudiar, no sé por dónde empezar. Anhelo con desesperación encontrar mi pasión, pero ni siquiera quiero ver las carreras disponibles. ¿Habrá algo malo con ello? No todos nacen con ese bichito del estudio. Algunos tienen otro destino, talento o propósito. Tal vez, seré famosa. ¿Cantante? ¿Actriz? ¿Modelo? Okay, no exageremos. ¿Modelo? Me reiría de eso, pero me burlaría de mí misma, y eso no puede pasar. ¿Actriz? Por favor, ni siquiera en las obras de la escuela he querido participar para pensar en ello ahora. ¿Cantante? Genial, solo me escuchan en la ducha, y muchas veces me cortan el agua caliente para que me calle. Dejemos de pensar en tonterías y busquemos esas carreras.

Solo que hoy no, no. No tengo ganas de eso. Ni mañana, lo puedo asegurar. 

— ¡Ely! ¡Ely! — entró de forma abrupta a la habitación mientras gritaba mi nombre.

 — ¿Qué ocurre? Un poco más y te llevas por delante la puerta y luego tendré que decir "adiós privacidad". —la vi rodar los ojos y sentarse a mi lado en la cama. 

—Deja tus comentarios y escúchame. — asentí. 

—Ely, acabo de ver un fantasma y ocurrió lo más extraño de toda mi vida. Y si te digo extraño, es porque está fuera de lo normal o de lo natural. Claro, en mi vida nada es normal y lo extraño abunda.

¡Claro que nada en su vida es normal! ¿Quién acoge a una desconocida y la convierte en parte de su familia? ¿Cómo es posible que piense que ver fantasmas no es normal, pero tener fallas en la memoria retrógrada y en la episódica sí lo es?

—Si te refieres a extraño por tener a una hermana con la cabeza hueca, no puedo discutir eso. — Orielle me mira molesta. — ¿O quieres decir por lo otro? Desde que estoy en tu vida, las almas no se te acercan. Si llamas a eso normal, déjame diferir de lo que tú crees normal. — me ve severamente. — ¿Acaso no puedo dar mi humilde opinión?

—¡Escucha! El fantasma me habló, no intentó tocarme. — estaba desconcertada y entrando en pánico. — Me dijo que me cuidara, te cuidara, sobre todo a ti. Estas fueron sus palabras exactas, las citaré: "Orielle, hay algo rondando afuera que será peligroso para ti y para ella. Ella es el centro de todo. Protégela y confía en...". Nada más.

—¿Cómo que nada más? ¿En quién tenemos que confiar? ¿Soy el centro de quién... o de qué? ¿Seré actriz?

—¿Qué estás diciendo? — Orielle me ve confundida y me río por eso.

—Hmm... nada, nada. Olvídalo. ¿Qué te dijo el fantasma?

—"Orielle, hay algo rondando afuera que será peligroso para ti y para ella. Ella es el centro de todo. Protégela y confía en...". Nada más. — repite.

—Espera, ¿no intentó tocarte? ¿Cómo es eso? Siempre quieren tocarte y compartir su muerte contigo para poder irse y descansar en paz.

—Por eso te digo que fue extraño. — se levanta y comienza a caminar de un lado al otro en medio de la habitación. — El alma dijo palabras que me causaron miedo. ¿Quién en su sano juicio va a estar tranquilo al escuchar "peligro", "merodear" y "buscar" en la misma oración? ¡Vamos! Lo que sea que esté ahí afuera te está acechando, Ely. — Orielle ya estaba desesperada. Comenzó con su manía de morderse el dedo pulgar cuando algo la angustia o siente demasiado estrés.

Noche de LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora