Refuge

23♥

Kiwoo estaba en esa habitación, acariciando con tristeza uno de los cuadros que allí guardaban.
La única con llave. Pero las únicas dos copias colgaban de su cuello y del de su esposa.

Sintió el timbre y saltó de repente. Lo dejó donde estaba y limpió su rostro lo mejor que pudo; saliendo y cerrando de nuevo.

Aspiró aire para dejar ir la sensación y se mostró despreocupado cuando se dirigió hacia la puerta principal.
Esa también tiene llave, no se preocupen.

ㅡ Oh. Taehyung. ㅡ se sorprendió al verlo ㅡ ¿Qué puedo hacer por ti?

Jugó con sus dedos ㅡ Quería ver a Jungkook, si es posible...

Kiwoo mordió su labio pensante.
ㅡ Él está... Dejame ver qué hace. Le avisaré que estás aquí. ㅡ se movió de la entrada ㅡ Pasa, quizás atienda a un amigo.

Taehyung asintió y entró, juntando sus manos hacia adelante mientra esperaba en el recibidor. El señor Jeon se perdió por el pasillo.

No era común en él ser un chismoso, pero realmente necesitaba ver una foto de Seulgi.
En esta pared, sólo había un par de fotos; los mayores de un lado, Jungkook pequeño del otro.

Caminó hacia la sala, de seguro ahí debía haber alguna.
Le sorprendió lo equivocado que estaba.
Por más que ojeó, no pudo ver rastros de que alguien más, a parte de ellos tres, formara parte de la familia.

ㅡ Él no me atiende. Seguro ha de estar durmiendo. Lo siento, ¿podrías volver más tarde? ㅡ Kiwoo llegó a la sala, sintiendose culpable.
Si bien Jungkook no respondió a su llamado, era obvio que no estaba durmiendo. Los bajos sollozos que escuchó al pegar el oído en la puerta, se lo habían hecho saber.

Taehyung lo miró de una manera que el hombre no supo interpretar.

Era pesadumbre.
¿Cómo podría esperar que Jungkook superara la pérdida, si no había podido ni siquiera cerrar el asunto?

El simple hecho de no encontrar rastros de Seulgi en la casa, le hacía saber que no se le permitía ni siquiera transitar el duelo.

Sin decir nada, se adelantó a paso apresurado. Esquivó a Jeon e ignoró su reproche, aún cuando éste lo siguió desde atrás.
Su mano ya estaba en el picaporte de la primera puerta que vio.
Abrió y Jungkook alzó la cabeza.

ㅡ ¿Qué...? ㅡ no entendió, Jungkook no entendió qué hacía ahí.

Fueron unos segundos en que todos se quedaron estáticos. Pero pareció una eternidad.

Segundos en los que Jungkook sintió que su ansiedad y nervios subían y bajaban de manera rápida.

Frente a él, el chico que lo ponía en ese estado; siendo a la vez el chico que lo calmaba todo.

¿Era bueno que estuviera ahí?
¿Era malo?

Ciertamente Jungkook no quería que lo viera así.
Jungkook no quería que Taehyung viera o siquiera conociera su lado más patético.

ㅡ ¿Qué... Qué...? ¿Qué hac-

El pelinegro quería soltar de una vez esa pregunta.
¿Qué hacia él en su casa?

Pero Taehyung reaccionó más rápido, y en menos que nada, sintió su cuerpo casi caer encima suyo, y unos brazos rodear por completo sus hombros.

Taehyung se había tirado en la cama y lo estaba abrazando.

Fue cuando Jungkook ladeó una sonrisa, que Kiwoo cerró la puerta despacio y se retiró de ahí.

Los brazos de Jungkook también rodearon el cuerpo del castaño, y una mano comenzó a sobar su espalda ㅡ ¿Por qué lloras, Taehyung? No vas a ser un bebé ahora, ¿o sí?