ᝬ 🏐 𖠵 ѕϲєиαяιοѕ | нαικγυυ

MIYA OSAMU

Sus mejillas se teñían de un ligero color carmín, mientras disfrutaba de la comida que le robó a su novia cuando ella no miraba.

La fémina hablaba animadamente con Atsumu, quien la escuchaba con bastante atención y de esas extrañas sonrisas honestas que escasas veces llegaba a reflejar. La vista del rubio se posó de repente en su hermano gemelo, apreciando como él se robaba de los onigiris de (N) sin siquiera haberle pedido.

Aunque era una costumbre de Osamu, y su enorme apetito parecía tomar el control total de él. No se lo dejó pasar, y jaló una de sus mejillas lo suficientemente fuerte como para que el muchacho de hebras grisáceas, se enfureciera.

─¡No te robes la comida de tu novia! ¡Eres tú quien debería ofrecerle! ─regañó un Miya al otro, arrugando el ceño mientras que se fijaba en lo enojado que lucía el otro.

─¡¿Desde cuándo sabes tanto de romance?! ¡Ni siquiera eras capaz de devolverle las cosas a tu ex! ─aquellas palabras escupidas por Osamu, era la gota que rebalsó el vaso, haciendo que el rubio jalara más fuertemente.

Quienes veían la escena con neutralidad y una pizca de irritación, eran los Suna. Rintarō sintió doler su cabeza al ver y escuchar a los gemelos, en cuanto a su hermana... Ella debió separarlos.

─Ya, no peleen por eso ─golpeó la cabeza de ambos de manera suave, admirando algunos rasguños en la cara de el par.─Puedes comer cuanto gustes, Samu ─comentó ahora con una sonrisa en los labios, sonrojando al peli-gris y viendo como asentía casi de forma tímida.

Ante los ojos de (N), Osamu era todo lo que necesitaba en un hombre; lo que menos le interesaba era que tan fastidioso fuera cuando pelea con Atsumu, su apetito más grande que él mismo, o su despreocupada personalidad. Aunque tuviese miles de defectos, ¿Porqué no apreciarlos?

⨾ primer escenario, y tengo sueño. En fin, resulta que Osamu fue el primer personaje con el que parecían querer que comenzara, así que, ¡Acá lo tienen!