No estás sola. | Georg Listing

Capitulo 9

- ¿Pasa algo Georg? ¿Estás bien?- lance al aire con ese tono de curiosidad que emanaba de mi boca y así fue como quedo, exactamente en el aire, ya que no recibí respuesta del castaño que rondaba con pasos pesados a mi lado- Tranquilízate Georg... ni que estuvieras caminando al altar de tu propia boda- unos cuantos pasos mas y llegamos a la puerta de mi habitación tome entre mis dedos con firmeza la perilla y la abrí, dejé mi bolso sobre uno de los sillones que se encontraban a pocos pasos de la entrada y me senté en el otro. 

El ambiente en la habitación no era mas que la expresión mas grande y pura de lo que tensión significaba, mientras que aquel compañero de sabanas se encontraba de pie con la mirada desorbitada sin emanar ni un triste sonido, podía percibir como de sus poros brotaban ligeras gotas de sudor y se posaban en su cien, algo quería decirme y lo notaba. Realmente la espera me estaba matando lentamente, llena de agonía interna por la actitud indescifrable del ojiverde pero antes de que pudiera abordarle nuevamente por fin algo salió de sus labios.

– Es que... - hizo un larga pausa dirigiendo sus pasos hacia el sillón que se encontraba al lado mío y opto por sentarse – no había pensado en esto antes ¿Sabes?

- Exactamente a que te refieres con "esto" - mencioné haciendo énfasis en la palabra y enmarcando unas enormes comillas con mis dedos,  creo que era evidente la confusión que se posaba en mi cara ya que el nerviosismo de la persona que tenia delante aumento de manera significativa- ¿Qué cosa es "esto" Geo?

- ¿Q-qué sucederá...ahora...entre tú y yo?

- Acaso lo dices por... - y a pesar del nerviosismos que lo inundaba, mirandome a los ojos; él asintió – dime ¿Tu que quieres que suceda?

-Pues...no lo sé...- su nerviosismo y sus pausas me mataban de tantas maneras, me causaba ansiedad de una manera inimaginable y al mismo tiempo no podia dejar de apreciar como aquello lo hacia lucir tan extrañamente bien- Tu me gustas, pero...

Y antes de que pudiera seguir, suponía lo que venía y decidí pararlo en seco cual coche que para abruptamente después de ir a 100 km/hr segundos antes.

- Justo ahí para, no sigas, ya se hacia donde va esta conversación y te evitare el mal rato; debemos conocernos más para tener "algo" lo sé- lo solté claro y sin rodeos a pesar de la pizca de decepción que empezaba a inundarme por dentro por permitirme pensar y sentir algo que creía diferente.

-No, no Chloe, no es eso... - el ambiente inevitablemente cada vez se volvia extremadamente tenso, notaba como el pecho de Georg subía y bajaba con dificultad; a lo que yo me preguntaba que pensamiento lo tenia de esa manera, antes de que mi cabeza pudiera seguir maquinando conclusiones absurdas él continuó-  yo quiero tener algo contigo pero, es que... de verdad tengo tanto miedo.

-¿Miedo? ¿A que? - inmediatamente esa decepción que yacía dentro de mi tomó un giro de 180 grados y todo se volvió confusión absoluta, esperaba que Georg en lo siguientes segundos dijera que solo estaba jugando pero, no fue así.

- Tengo tanto miedo a que te suceda algo malo por estar conmigo- dijo mientras bajaba la mirada.

-Algo malo... dime precisamente ¿Qué es algo malo? ¿Por qué dices eso? ¿Que me podría pasar?

-No lo sé...es que – su cuerpo empezó a temblar como un cachorro lleno de miedo mientras fijaba su mirada en la mesita de café que estaba frente a él.

-¿Georg?- puse con delicadeza mi mano sobre su hombro en un intento que su cabeza dejara de cavilar- ¿Tan grave es? ¿Qué sucede?

-Chloe yo... jamás le he dicho esto a alguien...pero creo que te lo diré – tomó una gran bocanada de aire antes de continuar – mi madre tiene una pareja y desde que lo ví no me pareció un buen hombre para ella.