Save Me - Kookmin

Distracción

Finalizada la cena Jimin ya estaba dispuesto a ir a su casa pero los padres del pelinegro querían ver primero si la policía se había ido, para eso necesitaban la ayuda de su hijo y por eso le hacían señas para que lo entretenga.
— Ya me tengo que ir, posiblemente en casa no me den una bienvenida como esta pero bueno — rió Jimin mientras se encontraba en la puerta junto al pelinegro.
— ¿Podemos subir a mi habitación 5 minutos?
El rubio lo miró intrigado — ¿Por qué? ¿Te me vas a confesar?
Jungkook no respondió, simplemente tomó su mano y ambos subieron las escaleras.
— Así que...ninety.
— No se de que hablas Park.
Jimin se sentó en la cama del pelinegro — Vamos Jeon, me parece algo muy dulce y me sorprende que hayas quedado tan flechado por ese beso.
Jungkook lo siguió y se sentó a su lado — ¿Fue tu favorito Ángel?
— Mmmmm fue nuestro primer beso, supongo que puede ser mi favorito, ¿y el tuyo?
— Estar en un recital de Jaden y besar un Ángel creo que es algo de otro mundo.
Jimin golpeó ligeramente el hombro del pelinegro. Le daba pánico aún pensar en todo lo que había sucedido entre ellos y no podía creer como estaban ahora.
— Sos un tonto Jeon.
— Puedo ser un tonto, pero soy tu tonto Ángel — suavemente tomó su cintura y lo acostó en la cama.
— Kook...
— ¿Por qué siempre que nos estamos por besar decís mi nombre?
— Para que reacciones y no hagas algo de lo que te podrías arrepentir.
El pelinegro empezó a dejar unos pequeños besos en distintas partes de la casa de Jimin — Yo nunca me arrepentiría de esto Ángel.
— Te escuchas muy seguro de eso.
— Lo estoy...
Amaban mirarse en uno al otro sin sentir vergüenza de eso, amaban estar juntos, amaban estar acostados juntos y ahora...amaban darse besos.