Recuerdo cómo al principio y durante todo momento intenté ser tan respetuoso contigo como pude.
Pero cuando te sentabas en mi regazo y comenzabas a besarme de esa forma simplemente no podía evitar meter mis manos debajo tu camisa y tocar tu abdomen.
No paso mucho tiempo cuando decidimos que era hora de hacer algo nuevo, avanzar en nuestra relación.
Realmente no lo veía necesario, yo te amaba incluso si tenía que abstenerme. Pero no puedo mentir cuando digo que verte tan excitado, con las mejillas rojas, tu respiración y tu cabello desordenado me volvían loco.
Amaba la forma en que te movías sobre mi regazo con desesperación y una de tus manos hacia fuerza en mi nuca mientras yo besaba tu cuello y observaba aquella expresión tuya que me tenía totalmente delirando.
Amaba cuando decidías que aquella fricción no era suficiente y tus manos desabrochaban mi pantalón y liberaban mi erección solo para que tomaras nuestros miembros entre tu mano y empezaras ese juego que me volvía loco hasta que finalmente cedía.
Siempre me gustó ser quien te hacía sentir así y a ti siempre te gustó recibir. Pero tampoco puedo mentir y decir que no amaba verte montado sobre mi miembro mientras movías tus caderas en un vaivén que me volvía totalmente loco cuando aumentabas el ritmo con mis manos sobre tu cintura.
Me encantaba tomarte de las piernas con fuerza para ayudarte aunque sea un poco.
Me encantaba acariciar tus piernas de arriba a abajo para hacerte sentir mejor, para que te relajaras y te tomaras tu tiempo.
Recorrer tu cuerpo con mis manos siempre te hacía temblar, sobre todo cuando mis manos estaban en tus pezones, soltabas pequeños gemidos que me parecían más lindos que cualquier otra cosa.
Amaba cuando casi llegando al orgasmo recargabas tus manos en mi abdomen, reducías el ritmo de tus caderas y pausada y fuertemente te movías, para así darte las últimas estocadas, finalmente terminabas liberando aquel líquido sobre mi pecho, sonrojado, sudado y con el cabello desordenado te recargabas en mi pecho para después recostarte sobre mí sin importar el hecho de que ambos terminábamos hechos un desastre.
Me encantaba terminar dándote un dulce beso y acariciar tu espalda repetidas veces con mis dedos para finalmente decirte "te amo" mientras te veía a los ojos.
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Without you • Nomin
Fanfic"23/04/2017" "Fue el día en que te conocí" • Historia corta • Capítulos cortos