Without you • Nomin

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Cuando Jeno despertó la tristeza y los recuerdos le invadieron casi inmediatamente, se volvió loco, los gritos desconsolados salían de su habitación mientras que su madre trataba de calmarlo pues en cuanto recordó todo intentó ponerse de pie, desconectando todo cable que estuviera sobre su cuerpo.

"Me quiero morir mamá, no puedo vivir sin Jaemin, por favor déjame morir"

La escena era desgarradora, tanto él como su madre lloraban, ver a su hijo destrozado le partía el corazón, pero ni siquiera le había dado tiempo de hablar con él cuando la puerta de su habitación se abrió casi abruptamente y reveló a un Jaemin que a pesar de estar agitado y débil, casi sin poder caminar, llegó como pudo a esa habitación pues al escuchar aquellos gritos supo inmediatamente que se trataba de Jeno quien por fin había despertado.

Sus ojos se encontraron y casi inmediatamente el llanto cesó, incrédulo, Jeno entrecerró los ojos.

Mientras tanto Jaemin no podía borrar la enorme sonrisa que con lágrimas de felicidad yacía en su rostro

"Jaemin" dijo Jeno en un susurro, su madre se separó de él y le ayudó a ponerse de pie pues en cuanto intentó hacerlo por sí solo sus piernas temblaron.

"Jeno" un fuerte suspiro salió de sus labios y con sus últimas fuerzas corrió hacia él hasta estar entre sus brazos.

"Estás aquí, de verdad"

Jeno aún no lo podía creer, las lágrimas corrían por sus mejillas desconsoladamente mientras abrazaba con todas sus fuerzas al amor de su vida.

No pasaron más de 5 segundos cuando finalmente y desesperadamente unieron sus labios en un profundo beso lleno de emociones y lagrimas, un beso que habían esperado por más de 3 años, el besos de sus vidas.

"Te amo Jaemin, te amo como no tienes una idea, te amo tanto por favor no desaparezcas de mi lado, por favor dime que te quedarás conmigo", Jeno aún parecía incrédulo a aquella experiencia, podría jurar que estaba muerto y Jaemin le estaba recibiendo en el más allá.

"Estamos aquí amor, estamos vivos y yo también te amo con todo mi ser"

"¿De verdad estamos vivos?, pareces un ángel recibiéndome en el cielo."

Sus ojos se habían convertido en dos medias lunas que apenas y le dejaban ver.

"De verdad lo estamos Jeno, por fin estaremos juntos otra vez, para siempre."