Mistletoe |Larry Stylinson| [2]

Capítulo 1.

Pequeñas piedras chocaban contra la ventana de Harry, el chico estaba profundamente dormido entre las tibias sábanas de su cama.

Había sido una semana muy pesada en el trabajo y ese era el momento en dónde estaba recuperando todas sus energías, aunque claro sus amigos no tenían planeado dejarlo descansar.

Una de las piedras impacta más fuerte contra el vidrio y se escucha una exclamación, un golpe y estruendosas risas.

Harry despierta desorientado y se levanta rápidamente de la cama, el mareo que lo invade lo hace sentarse de nuevo, su cabeza daba vueltas.

Una vez que se siente mejor se acerca a abrir la ventana de su humilde morada, sus amigos estaban mirándolo desde el patio delantero.

—¿No pueden despertarme como a una persona normal?

—Romeo, Romeo ¿dónde estás que no te veo?— Niall pone una mano sobre su pecho y le extiende una flor que había tomado del suelo.

Harry ríe con somnolencia antes de responder.

—¡Aquí, Julieta!— Taylor cubre su rostro con ambas manos y aguanta la risa.

—Baja tarado, ¡vamos a hacer snowboard!—Niall comienza a saltar en su lugar emocionado y en ese momento Harry ve las tablas al lado de sus amigos.

—¿Hoy? Estoy cansado... Fué una larga semana en el Matterhorn Ski Paradise, no quiero volver ahí— Harry tenía el trabajo de sus sueños, pero realmente había sido una semana agotadora, muchísimos turistas habían llegado a la zona y todo se había vuelto un caos.

—¡Iremos como visitantes! No irás a trabajar, el día está grandioso, la nieve está hermosa y la montaña Matterhorn está imponente— Harry ríe y ve la punta de la montaña desde su ubicación, estaba imponente como todos los días.

—Oh, qué más da, vamos— Harry cierra la ventana y va a buscar sus cosas para prepararse.

Protector solar, guantes impermeables, ropa de esquí térmica, sus icónicas barritas energeticas, gafas de ventisca y por supuesto su tabla de snowboard tipo freestyle.

Sería un gran día.

|❄️❄️❄️|

—¡Vamos, no quiero perder el vuelo!— Louis era el más emocionado ese día, desde que sus amigos le dijeron que habían comprado boletos a Suiza para su cumpleaños, la emoción no había abandonado su cuerpo.

Su destino era Zermatt, una de las pequeñas localidades de Suiza, pero tenía una de las más grandes atracciones de Esquí y Snowboard.

Se consideraba un aventurero innato y ese regalo de cumpleaños era perfecto.

Un mes y medio en Suiza ¿se lo imaginan?

—Louis, no perderemos el vuelo ¿okay? Cálmate— murmura Zayn con suavidad y busca con la mirada el andén para subir.

Zayn y Liam estaban agotados, habían comprado solo los boletos de avión y en la última semana se dieron cuenta que no tenían cotizados ni los hoteles, ni los vehículos para transportarse.

Inmediatamente se pusieron a trabajar en eso y había sido el motivo de sus desvelos.

Lo positivo es que ya tenían todo listo una vez que llegaram a Zermatt, así que ya no había motivos para preocuparse.

También estaban emocionados por conocer Suiza y la gran montaña Matterhorn, era uno de sus destinos desde que habían comenzado a viajar por el mundo conociendo cada lugar recóndito.

Aparte amaban la nieve, amaban todos los deportes respecto a esta, desde alpinismo hasta snowboard.

—Me calmaré cuando estemos arriba de ese avión— Liam ríe ante la hiperactividad de Louis, era entendible, la verdad es que él se sentía igual.

El trío de amigos ya estaban sentados en sus respectivos asientos, el ojiazul miraba a través de la ventana con emoción, sabía que sería una gran aventura más en su lista.

Créanme que esa lista era larguísima.

|❄️❄️❄️|

Harry miraba como Taylor descendía y hacía unos cuantos trucos en la bajada, Niall la seguía de cerca y eso era obviamente incómodo para su amiga.

Niall era de esas personas que te hacía tropezar solo para molestarte.

Harry mira a su alrededor viendo la cantidad de gente que había, muchísimo trabajo le esperaba en la semana.

Siente un grito y ve como Taylor ya estaba tirada en medio de la nieve y Niall seguía riendo mientras terminaba de descender.

El rubio derrapa al frente de Harry y logra frenar en seco.

—¿Qué pasa?— el ojiverde hace un gesto con su cabeza a el alrededor.

—Tendré mucho trabajo.

—Nosotros vendremos a ayudarte, eso queríamos contarte, Jhon nos pidió si también podíamos hecharle una mano con los principiantes, daremos clase y nos irá turnando entre los tres— Harry sonríe ampliamente y abraza a su amigo, eso era un alivio para él.

Había llegado hace cuatros años a Suiza, tenía un título en Turismo y Administración de Empresas, amaba viajar.

Una vez que pisó Zermatt por primera vez se enamoró de el lugar, iba constantemente a hacer Snowboarding en el Matterhorn Ski Paradise y se convirtió en cliente frecuente durante su estadía. Participó en todas las actividades al aire libre y los paisajes junto a la montaña habían ganado su corazón, no pudo irse.

Amaba con su vida ese lugar.

Jhon le ofreció trabajar en el Ski Paradise y no declinó, se compró una rústica cabaña un poco apartada de el centro y se quedó, quería hacer raíces ahí.

Era felíz en su lugar, no había ruido de autos, las zonas verdes eran impresionantes, los lagos majestuosos y la montaña... La montaña era todo junto. Él realmente amaría ver crecer a su familia ahí, junto a un lugar tan puro y rodeados de personas amables.

Harry sabía que ese era su lugar, que ha pesar de haber nacido en Reino Unido, su hogar siempre estuvo en Suiza, específicamente Zermatt.