Mistletoe |Larry Stylinson| [2]

Capítulo 31.

Louis quita sus guantes rápidamente cuando está frente al hogar de Harry, toca la puerta con su puño y espera a que el ojiverde se asomara para abrirle la puerta.

Se mueve impacientemente en su lugar y muerde su labio inferior con fuerza, no podía con la preocupación.

Sin dudarlo desliza la ventana que estaba al lado de la puerta de Harry, mete su brazo por ella y se abre la puerta a sí mismo.

Entra al hogar de Harry y cierra la puerta detrás de el, sin pensarlo va hacía el baño y toma una de las pequeñas toallas de Harry, la moja y luego la estruja hasta dejarla húmeda.

Va hacía la cocina y saca una botella de agua del refrigerador, el ojiazul sube las escaleras de dos en dos y entra a la habitación de Harry.

Cuando lo ve en el centro de la cama totalmente acurrucado y con sus manos sobre su cabeza siente aún más preocupación en su sistema.

Se acerca hasta a Harry y quita sus zapatados, se hinca en la cama y toca el hombro del rizado.

—Hey, estoy aquí, necesito que te mantengas hidratado— murmura mientras abre la botella con rapidez, Harry abre sus ojos para posarlos sobre Louis y toma la botella con sus manos temblorosas.

Toma un trago largo y decide dejar esta sobre el velador de su costado.

Louis se acerca un poco más y muerde el interior de su mejilla.

—¿Qué parte de la cabeza te duele?— Harry apunta su lado izquierdo y Louis pone la toalla sobre la zona— hará que el dolor sea menos intenso— susurra con suavidad y Harry asiente sin tomarle mucha importancia— estarás bien.

Ambos se mantienen en silencio, esperando a que el dolor se pasase aúnque sea un poco, Louis aprovecha de otorgarle suaves caricias en la zona de su hombro.

Harry estaba aliviado, se sentía muchísimo mejor, con lentitud lleva su mano hacia la de Louis y aleja la toalla de su cabeza.

Louis se mantiene atento ante cada movimiento por parte de Harry.

—¿Necesitas algo? Puedo preparte un té si quieres— el ojiverde sonríe de medio lado y niega con su cabeza.

—Sólo... Quédate aquí, ven— Louis frunce su ceño y deja la toalla sobre el velador de Harry, se acerca a este un poco nervioso.

Harry toma el rostro de Louis entre sus manos y mira sus ojos fijamente.

—Siento que te conozco o no lo sé, la verdad esta tarde llegaron recuerdos a mi mente que no recordaba tener— Louis traga en seco, ¿lo había recordado? ¿era eso?— por lo cual me hace pensar que tengo mucho que recordar.

Louis se mantiene en silencio y decide cerrar sus ojos, inconscientemente se apega un poco más al cuerpo de Harry en busca de calor.

—Siento que olvidé a alguién importante— susurra por última vez el ojiverde.

|❄️❄️❄️|

Harry se remueve en su cama cuando pequeños rayos de sol impactan sobre su rostro, en ese momento se estaba maldiciendo por no haber cerrado las cortinas el día de ayer.

Finalmente abre sus ojos y permite que estos se adapten a la luz del día, mira a su costado y ve como Louis dormía plácidamente.

Una pequeña sonrisa se forma en sus labios e intenta moverse, tenía que levantarse.

—No te muevas— murmura con suavidad el castaño y el rizado se queda quieto en su lugar— duerme Hazz.

—Tengo que ir a hacer el desayuno— Louis abre uno de sus ojos y mira hacia a Harry.

—¿Tienes hambre? Yo puedo ir a hacer el desayuno— Harry niega ante eso, su mente comienza a aclararse y varias dudas llegan a su mente.

—¿Cómo llegaste aquí ayer? No te alcancé a dar mi dirección— Louis se mantiene en silencio por un momento, intentando crear una respuesta rápida y coherente.

—Niall me dió tu dirección.

—¿Por qué no vino él?

—Bueno, porque me pediste que viniera yo y aparte me la había dado hace un tiempo.

Harry frunce su ceño ante esa respuesta, estaba un poco confundido aún, necesitaba respuestas.

—¿Eres amigo de Niall?

—Sí, algo así.

—¿Desde hace cuánto?— Louis suspira y decide levantarse de la cama, se estira en su lugar y con una de sus manos peina su cabello.

—¿Qué clase de interrogación es esta? Iré a preparar el desayuno y no te muevas, ayer me asustaste— Louis no alcanza a dar ni siquiera un paso cuando Harry ya estaba haciéndo preguntas otra vez.

—Sólo tengo curiosidad, ¿podrías responder por favor?— Louis no puede negarse ante eso, por lo cual como era obvio, cede ante Harry.

—Hace un mes más o menos— finalmente Louis sale de la habitación y baja las escaleras yendo directamente hacía la cocina.

Harry se mantiene pensativo e intenta recordar aunque sea algo de hace un mes, nada llega a su mente, era como si hubiera estado apagado durante ese tiempo.

¿Por qué no recordaba nada?