Mistletoe |Larry Stylinson| [2]

Capítulo 10.

Ya iban de vuelta, no iban a quedarse afuera, el frío se volvería insoportable, pero aún así habían disfrutado al máximo cada momento ocurrido durante el día.

Harry estaba un poco pensativo respecto a la pregunta que le había hecho Louis, no se le había ocurrido que decir y se había mantenido en silencio, el ojiazul no había vuelto a hablar con él por lo avergonzado que estaba.

Taylor se pone al lado de Harry y frunce ligeramente su ceño.

—¿Qué sucede?— Harry juega con sus manos dentro del bolsillo de su polerón para luego responder.

—Louis me preguntó por qué aún no lo invitaba a salir.

—¿Y qué le dijiste?

—Nada.

Taylor rueda los ojos y evita golpear su frente con una de sus manos en un claro gesto de irritación.

—¿Qué haré contigo? Invítalo a salir, eso quieres hacer.

—Pero- —Taylor alza su mano y la sacude, aún no terminaba de hablar.

—Si no lo haces te arrepentirás, ve que surge durante su estancia aquí, disfruta— Harry mira la espalda de Louis que iba a un par de metros adelante de él y asiente para sí mismo tomando valor.

Sin decirle nada a Taylor avanza hasta Louis y con suavidad jala del ojiazul apartándolo discretamente de sus amigos.

Louis frunce su ceño ante eso y cuando ve que es Harry la vergüenza otra vez se hace presente en sus mejillas.

—¿Te gustaría salir conmigo?— la sorpresa en las facciones de Louis hacen reír ligeramente a Harry, el ojiazul sonríe logrando salir del shock y asiente con su cabeza.

—Claro que sí— ambos bajan la mirada como si fueran un par de adolescentes, Harry asiente y pasa su brazo por sobre los hombros de Louis.

—Cuéntame, ¿qué tal la pasaste?—Louis mira la mano de Harry y ve el tatuaje de una cruz en esta, muerde su labio inferior con fuerza y una boba sonrisa aparece en sus labios recordando los demás tatuajes que adornaban la blanca piel de Harry.

Eran muchísimos y Louis tenía una obsesión con los tatuajes.

Una gran obsesión con los tatuajes.

❄️❄️❄️

—¿Qué tú qué?— Liam deja de masticar su galleta de avena, no sabía si había escuchado realmente bien.

—Era obvio Liam, a Louis le atrae Harry— Zayn se sienta frente a Louis con una taza de chocolate caliente entre sus manos.

—Louis... Sabes que nos iremos, nuestra estadía no será permanente— el ojiazul asiente, lo sabía, siempre lo supo pero la atracción que sentía por Harry era más fuerte, no lo podía evitar.

—Lo sé, pero es algo raro Liam, nunca me había sentido así antes, quiero ver que sucede— el ojicafé suspira y vuelve a morder una de sus galletas, estaba preocupada temía que alguién saliera con el corazón herido.

—Tengo un mal presentimiento— susurra y Zayn voltea a mirarlo, cuando Liam se da cuenta de la mirada que le estaba dando el ojimiel traga en seco, no era agradable.

—Deja de ser aguafiestas, Louis sabe lo que hace— Liam suspira y se encoge de hombros, toma el resto de su té y se mantiene pensativo.

Había estado observando a Harry y se notaba que amaba este lugar, sus ojos brillaban y su sonrisa en su trabajo se lo confirmaban.

Harry no dejaría este lugar y Louis no dejaría su vida en Londres.

¿Realmente era el único coherente en ese momento? Sólo quería evitar que uno de los dos saliera realmente dañado.

Quería evitar un corazón roto o quizás dos.

Se levanta de su lugar y va a dejar sus utensilios en el lavaplatos, lava lo que había usado cuidando el agua en el proceso y se apoya contra el frío metal.

Odiaba ser el coherente del grupo, siempre le daba dolores de cabeza.