Todo es tu culpa [Catradora| AU Moderno]

𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 𝟏

@𝓞𝔀𝓲𝓲𝓼𝓪 𝓪𝓻𝓽

Catra acaricia suavemente el cabello de su novia, mientras con sus uñas se encargaba de cepillarlo levemente.

- Sigues igual de hermosa -sisea mientras su mirada recorre cada parte del cuerpo dormido, cubierto por sábanas de hospital.

- Hoy se acabó oficialmente otro cuatrimestre de ingeniería, lo aprobé, Adora -aún le dolía hablarle al cuerpo inerte de su novia, aunque con los meses había sido más llevadero y de alguna forma la hacía sentir más tranquila-. Pero creo que voy a dejar la carrera por un tiempo, será lo mejor para ambas, podré cuidarte cuando despiertes -le explica como si pudiese recibir una respuesta-. Para empezar, en realidad quiero que huyamos de aquí.

Toma la mano de la rubia, sin respuesta alguna de su parte y besa sus nudillos para levantarse de su lugar, pues empezaba a hacerse tarde, alguien toco la puerta en ese momento y cuando Catra dio el permiso de pasar vio a una enfermera que ya conocía por el tiempo visitando la sala.

- Lo siento, Catra, ya la hora de visitas se acabó -le avisa aunque la chica lo sabía, por ello estaba por retirarse.

Las primeras semanas fueron difíciles, no había forma de que alguien la separara de Adora, sin embargo Shadow Weaver la amenazó de tirarla a la calle si no le daba dinero, no podía importarle menos esa mujer pero por el momento no se sentía en condiciones de estar buscando otro lugar a donde vivir y desatender a Adora en sus pocas horas libres a la semana.

Además de que sus días podían resumirse en ir a la universidad, hacer trabajo, visitar en las noches a Adora, quedarse hasta el último momento permitido y dormir en la casa de Shadow Weaver, a la cual rara vez la encontraba despierta.

- Cuídala -le pide Catra a la enfermera que le regala un sonrisa en respuesta.

Le tocaba el turno de noche desde hace meses y siempre recibía ese comentario de Catra antes de irse.

- No lo dudes -tras decir eso, entró en la habitación para verificar el estado de la paciente.

- Ella estará bien -Catra salto en su lugar al escuchar a alguien de la nada, Escorpia estaba junto a Perfuma y a Entrapta.

- ¿Qué hacen aquí? Ya es tarde, si es que venían por Adora -informa siguiendo su camino, técnicamente ignorándolas.

- No vinimos por Adora -responde Scorpia-. Vinimos para que salgas un momento con nosotras, iremos a una fiesta, creemos que sería bueno despejarte.

Perfuma y Entrapta no conocían de nada a la tan mencionada rubia que conformaba un pequeño grupo en la universidad con Catra, Glimmer y Bow, o bien, que alguna vez conformó.

Sin embargo Perfuma esta en una relación con Scorpia, la cual es la mejor amiga de Catra y Entrapta sabía de la chica por charlas con sus amigas.

- Agradezco lo que sea que traten de hacer, pero no me interesa salir a festejar nada, cuando Adora despierte del coma podemos ir a cuantas fiestas deseen, ahora solo quiero descansar.

- Dijiste que querías ver a Glimmer, estará en la fiesta, sabes que siempre está en esos lugares -claro que lo sabe, tuvo que sacar a Adora de uno de esos lugares luego de que Glimmer y Bow  la hicieran emborracharse.

Adora ni siquiera había bebido más de media botella en su vida como para soportar algún tipo de juego de alcohol como ese día.

- Bien, pero no me pienso quedar -le aviso de inmediato.

Entrapta al notar su afirmación empezó a caminar hacia el carro de Scorpia, mientras la peliblanca se sentía feliz con su logró, seguía pensando que una fiesta haría a Catra relajarse por un momento, por otro lado Perfuma decidió no comentar nada pero sabía que Catra no tenía el mínimo interés en hacer algo aparte de Adora.

Era evidente, sin embargo, para Perfuma era claro que a Scorpia no le importaba el estado de la rubia en coma, solo la felicidad de su mejor amiga.

Subieron al auto y mientras iban en el camino Entrapta decidió empezar a contarle a Catra una investigación que había hecho sobre los casos en coma y el porcentaje de personas que lograban despertar, no dejo a Catra hablar demasiado, tenía mucha información que dar así que emocionada se lo contó.

La morena no estaba muy interesada en saber casos de otras personas, las probabilidades siempre podrían variar, un día Adora podría solo morir o abrir los ojos, al menos en su mente era así, no había un tal vez, era un sí o no.

- Gracias Entrapta, lo voy a tener en cuenta, cuando la vea mañana se lo diré -le avisa.

- ¡¿Puedes comunicarte con ella?! -pregunta Entrapta, asombrada-. ¿Sería posible que hable con ella?

- No es un diálogo en realidad, Entrapta, es más como... un monólogo, ¿entiendes? -Catra había usado las palabras correctas para hacerla comprender-. Es solo que... hablarle me hace sentir mejor siempre, antes de dormir nos contábamos nuestro día, no quiero perder costumbre.

- Llegamos -avisa Scorpia saliendo rápidamente para rodear el carro y abrirle la puerta a Perfuma que sonrió enternecida por el gesto, siempre lo hacía, desde su primera cita.

Catra sintió un escalofrío al ver el edificio, era un bar de ambiente, un bar en específico que conocía muy bien, Adora había sido atacada bastante cerca, en la madrugada cuando iba saliendo del lugar.

- Vaya mierda -objeta molesta, si bien el bar era agradable, no quería nada con el desde que Adora no volvió a abrir sus ojos-. Scorpia, gracias por traerme, yo voy a buscar a la princesita.

Scorpia solo le regaló una sonrisa y todas entraron al lugar, la chica de cabello albino abrazó a la morena para despedirse.

- Cuídate -al verla partir por el lado contrario, ella decidió ir a las zonas VIP, donde siempre se encontraba Glimmer y sus amigos.

Pensó en devolverse pero tenía un objetivo, llevaba días con la idea de buscar a Glimmer y ajustar algunos problemas, sin embargo parecía una rata bastante escurridiza.

- ¿Nisiquiera sientes un poco de lastima, brillitos? -pregunta a la espalda de un chica baja con el cabello recién cortado y teñido en colores pastel, esté estaba decorado con escarcha-. Que estilo tan molesto.

- Ca-Catra, ¿qué haces aquí? -pregunta al verla, tras haberse volteado, aún sentada.

- Ya sabes, me encanta venir a bailar al último lugar que visitó mi novia antes de que casi la asesinaran -resalta con obviedad-, como tú, no hay nada mejor que divertirse en lugares como éstos -contesta cruzando sus brazos-. Eres un asco de persona, pero eso ya lo sabías, ¿no?

𝓖𝓻𝓪𝓬𝓲𝓪𝓼 𝓹𝓸𝓻 𝓵𝓮𝓮𝓻 𝔂 𝓬𝓸𝓶𝓮𝓷𝓽𝓪𝓻