Capítulo 9 ¡Quiero mi Prawn!

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De repente la Amperguila nos vio, por suerte logre agarrar el saco y subir al Seamoth antes que nos viera.

-¡corre!- grito Adriana

-¡está bien que seas una genia y que lo sabes todo, ¿pero cuando vas a aprender que estamos en el agua y no puedo correr sino nadar?!- le pregunte yo haciéndome el chistoso al prender el Seamoth.

-¡no sé pero corre!- grito ella desesperada

El Seamoth arranco a toda velocidad mientras la Amperguila nos perseguía, intente activar la defensa perimetral del vehículo pero en vez de electrocutar al enemigo lo hizo más fuerte.

-¡Rayos!- me queje empezando a tocar todos los botones sin saber su función

Pero desafortunadamente el submarino exploto. Lo bueno fue que sobrevivimos y logre encontrar rubí, pero la Amperguila no se cansaba. Por suerte la explosión del Seamoth la atraso un poco, cosa que me dio tiempo a escapar al Cyclops. Bebí un poco de agua para restablecer mis signos vitales, active el sonar del vehículo lo que me ayudaría a saber la ubicación del enemigo y arranque el Cyclops.

Pero casualmente vino también la familia Ósea que quería vengarse de la situación del día anterior.

-¡ahora tenía que ser, ¿no podemos arreglar para otro día?!-

-¿porque otra vez, ya los habías visto antes?- pregunto Adriana porque en ese momento ella no estaba

-son unos enemigos míos, me los encontré ayer- le conteste y ella entendió

Puse el piloto automático y me senté a pensar.

-¡ya se! esto me va a doler, ¡pero los voy a distraer con cookies!- pensé a modo de idea

Entonces coloque las galletas en el compartimento de torpedos y las lanza a ellos. Pude distraer a algunos, pero los tíos eran celiacos y a la Amperguila no le gustaban las galletas con chispas de chocolate.

-¡al menos nos libramos de la mitad de ellos!- dijo la PDA mientras me comía algunas cookies

-¡están ricas!- dije masticando

-¡es mal momento para galletas!- aviso Adriana

Y yo volví a manejar. Nada más se me pasaba por la cabeza, así que tenía que perderlos de vista.

Entre a un bosque de algas (que era el lugar donde conseguiría los dientes de acechante los cuales me servirían para hacer vidrio esmaltado) y di vueltas por todas la algas para perderlos, perdí a los tiburones óseos, pero la Amperguila era muy habilidosa.

-¡Nos siguió hasta aquí!- grite confundido

-tengo una idea, vamos a la cueva de los acechantes donde se les caen los dietes y guardan el metal y matamos dos pájaros de un tiro, agarramos los dientes y culpamos a la Amperguila de robar el metal- dijo a modo de plan Adriana

-¡muy buen plan!

¡Entonces pusimos el plan a prueba y funciono teníamos todos los materiales necesarios para el prawn!

-¡genial! ¡El enemigo fue engañado!- grite felizmente y volvimos a casa

Ya en nuestra instalación desplegamos la bahía y ¡chan chan chan!

-¡por fin mi esperado traje Prawn!- dije abrazándolo y me subí

-es normal que cuando se pilota por primera vez un Prawn tener la sensación de poder ilimitado, los pilotos de estos vehículos reciben semanas de entrenamiento para no descontrolarse. Tendrás que arreglártelas con tu propia disciplina- aviso Adriana

-Subnautica- Una Aventura MarinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora