1. ¿Club de qué?

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Gilbert Blythe.

-No puedo tenerlos una vez más en detención, chicos. Los profesores están quejándose de sus peleas diarias en clase, ¡es su segunda visita a mi oficina esta semana! sin mencionar el accidente de la ventana rota el mes pasado. ¿Piensan seguir así lo que resta de la preparatoria? porque si la respuesta es sí, lamentablemente tendré que expulsarlos a ambos.

-¿Expulsarnos? ¡Marilla me mataría!—Anne habló preocupada—Le prometemos que no volverá a ocurrir otra discusión ni alboroto por parte de nosotros, ¿no es así, Blythe?

-Le doy mi palabra, no sucederá de nuevo, Señor McGrath.

-De acuerdo, pero debo decirles que ya tengo planeado un castigo para ustedes, uno que les ayudará a construir una mejor relación o al menos una donde no hagan peleas a mitad de los pasillos—Shirley y yo nos miramos confundidos.

-¿Limpiaremos como cada sábado?—pregunté, el director nos dió una mirada y sonrisa cómplice, lo cual me aterró.

-Oh no, chicos. Verán, la profesora Gladwell abandonó esta semana el club de teatro debido a su pierna rota, ¿lo recuerdan?—preguntó entrelazando sus manos sobre el escritorio.

-¿Hay un club de teatro?—susurró Anne inclinadose un poco hacía mi sin girar su cuerpo. A lo cual solo me encogí de hombros.

-Lo que significa que no habrá obra de teatro como cada primavera—continuó el director haciendo una pequeña pausa—A menos que alguien tomara el lugar de la señorita Gladwell y lo dirija.

-¿Esta diciendo que quiere que dirijamos una obra de teatro, siendo totalmente inexpertos?—solté una risa irónica, ¿no estaba hablando enserio, cierto?

-Es correcto, señor Blythe. Estoy seguro que podrían ayudar a este grupo de jóvenes que esta en el olvido y motivar a más estudiantes a participar.

-No quiero faltarle al respeto, señor director, pero apenas estoy enterada de que existe un club de teatro en esta escuela, y ni siquiera sabía que se presentaban cada año. Y si antes no tenía existo entre los estudiantes, ¿por qué la tendría si la manejáramos nosotros? ¿no cree que sería un gran desastre?

-Es cierto, odio decirlo, pero por primera vez concuerdo con Shirley—comenté.

Incluso preferiría limpiar los baños de la escuela lo que resta del año a encargarme de una obra escolar junto a Anne. Seguramente explotaríamos el aula de medios en el primer ensayo.

-Anne, he visto su trabajo de literatura, es muy bueno, hasta podría convertir uno de sus escritos en guión de teatro y sería completamente maravilloso—Shirley agrandó los ojos, parecía que quería esconderse entre su asiento, como si se avergonzara, eso si era algo nuevo. No todos los días podías ver a esa pelirroja sonrojada.

Ahora el adulto me miró a mi—Blythe, usted tiene un gran talento artístico, ayudaría con la escenografía para crear un ambiente realista y bello, así como sus dibujos—rasqué mi nuca tratando de evitar la mirada de Anne. La verdad es que nadie sabía sobre mi interés en el arte, a excepción de mi mejor amigo, Bryce Loski.

-Los dos son muy buenos en diferentes cosas, y estoy seguro que si dejaran de lado esa tonta rivalidad formarían un gran equipo—nos miramos incómodos—además es su castigo y ya esta decidido. Los espero mañana después de clases para comenzar con su trabajo, ¿De acuerdo?—se levantó de su asiento y lo imitamos.

-Pero...—estaba a punto de reclamar cuando Anne tomó mi brazo y me colocó detrás de ella empujándome hacia la salida.

-No se preocupe, director McGrath, aquí estaremos, gracias por su tiempo ¡que tenga un bonito día!—sonrió nerviosa y nos sacó de la oficina.

-¿Por qué me interrumpiste?—pregunté un poco alterado.

-¿Acaso quieres que nos expulsen? por si no oíste bien, es un castigo y no importa lo que digamos, si no lo cumplimos diremos adios a esta escuela y a mis perfectas calificaciones ¿entiendes?

-Si entiendo, no soy un idiota, Anne.

-Algunas veces te comportas como uno.

-¿Ah si? pues tu eres más idiota.

-Tu lo eres más, idiota.

-¡No, tu...!—De pronto la puerta de la dirección se abrió de golpe, haciendo que nos sobresaltemos.

-Si, si, ambos lo son, ahora váyanse de aquí antes de que los ponga a limpiar mi oficina también.

Sin duda, este será un ciclo escolar muy largo.

-¿Shirley?—hablé girándome hacía ella cuando el director cerró la puerta de nuevo.

-¿Si?

-Te odio.

-Y yo a ti—dijo antes de desaparecer por el pasillo.





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¡Holaaa! estoy muy emocionada por que al fin pudeterminar el primer capítulo, se que tarde demasiado pero es que no podía dejar de reescribirlo:(

¡Espero que les haya gustado!

-Sam

Ramé.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora