La Elegida

Capitulo 21

Anahi

Tal como había dicho Alfonso, Phillip inmediatamente estuvo de acuerdo con mi idea de llevar a Lindsay a un lugar más relajado, en la distancia los dos nos miran mientras camino con ella hacia el césped junto al lago, no sé si todos los días son así, pero lo agradezco mentalmente por estar prácticamente vacío hoy.
Lindsay se sienta en el césped y juega con los bordados de su vestido, parece mucho más tímida de lo habitual.
-Aquí es hermoso, ¿no crees? - pregunto, tratando de hacer un punto.
-Es diferente...
Su respuesta es simple, pero sé exactamente de qué está hablando. Se trata de cómo todo es tan diferente de nuestra comunidad.
-Lo diferente también puede ser bueno.  A veces, es incluso mejor.
Lindsay se vuelve hacia mí y puedo sentir su mirada analizándome, su cabeza debe estar hirviendo con toda la nueva información por asimilar y sin embargo, intenta mantener un aire sereno.
-¿Eres feliz aquí, Anahi?  - ella mira hacia atrás al césped - Edward me dijo que encontraste a alguien a quien realmente amas y que él no te castiga.
-Estoy más que feliz, Lindsay. Como dije, algunos cambios pueden ser buenos.  - le levanto la cara con las manos para que me vea, quiero que vea toda la sinceridad de mis palabras, reflejada en mis ojos - No voy a negar que tuve miedo cuando me escapé de la comunidad, pero ya no pude soportar vivir allí, estando castigada por el simple hecho de haber hablado sin autorización, o de tener que casarme con alguien a quien no amaba. Salir de allí fue, con mucho, la mejor elección que he tomado, Alfonso me ama y yo lo amo, podré continuar mis estudios y podré trabajar, no necesito su autorización para hablar o estar en algún lugar y él no me castiga.
-Escuchando eso, parece que todo es tan perfecto aquí.
Ella suspira fuerte y yo sonrío, podría dejar a Lindsay pensando que esto es un cuento de hadas, pero sé que para llegar a ella, necesito ser totalmente honesta.
-Cuando conocí a Alfonso, llegué a creer que aquí era un paraíso, pero hoy sé que lo perfecto no existe, pero diferente a la comunidad, podemos tomar nuestras decisiones y buscar apoyo. No estamos solas.
-Siempre quise ser maestra. ¿Aquí puedo ser? - veo que tus ojos brillan de expectación.
-Aquí puedes ser lo que quieras, solo sigue siendo un estudiante aplicada y sé que lo lograrás. - su sonrisa aumenta, pero sé que necesito que hable de Mary
-Lindsay, creo que Edward te habló de Mary.
Ella asiente, pero permanece en silencio.
-¿Te gustaba ella?
-Mary hizo deliciosos dulces para mí y, a veces, tomó mis castigos por ella.
-Y si hubiera una oportunidad de ayudar a Mary, ¿lo harías?
-Cuando Edward me habló, estaba asustada.  - me confía mientras juega nerviosamente con los dedos - Tengo miedo de que todos en la comunidad me odien y me dejen sola.
-Estoy segura de que todos en la comunidad me odian, incluidos mis padres. Pero el tipo de amor que enseñan es el que duele. Yo también tenía miedo, Lindsay, pero luego encontré a Alfonso, su madre y su hermana, y ahora tengo una nueva familia. - le doy una leve sonrisa y la acerco más con mi dedo índice como para contar un secreto - Si nos ayudas y Mary está viva, puedes formar una nueva familia con ella y Edward. ¿Te gustaría eso?
La esperanza brilla en tus ojos y sé que toqué el lugar correcto. Lindsay es una niña necesitada y todo lo que necesita es una familia que le ofrezca amor y apoyo.
-¿Eso es posible?
-Edward estará muy feliz con tu ayuda y si encontramos a Mary, ella estará feliz de encontrarte. ¿Entonces que dices?
Lindsay cambia su mirada hacia el lago y, por unos minutos, parece perdida en un conflicto interno. La dejo tener su tiempo, no quiero presionarla y perder la confianza que ya me he ganado.
Miro hacia atrás y veo, en la distancia, Alfonso y Phillip debajo de un árbol, parecen distraídos hablando y mi atención está toda en el maravilloso hombre que me rescató.
-Anahi. - Lindsay atrae mi atención de nuevo hacia ella - Quiero ayudar a Mary y Edward.
-No tienes idea de lo bien que lo estás haciendo. - sostengo tus manos en las mías - ¿Podrías empezar contándome lo que viste la noche en que se suponía que Mary iba a morir? Edward dijo que sabes algo que puede ayudar, sea lo que sea, cualquier cosa.
-A veces tengo problemas para dormir, la noche que Mary murió, yo estaba en el cuarto de costura, me gustaba quedarme ahí y mirar el cielo. Papá no me vio porque dejé las luces apagadas, pero lo vi cuando bajó las escaleras con Mary en sus brazos y se lo entregó a un hombre al que nunca había visto antes.  - cerró los ojos como si tratara de recordar todos los detalles - Tenía una estrella en el pecho, vestía sombrero y uniforme, recuerdo que papá dijo exactamente así: "Espero que este mantenga a sus hombres alejados de nuestra comunidad y de mí".
-Y el otro hombre, ¿qué hizo?
-Se rió y le dijo a papá "por ahora sí" y luego se fue llevándose a Mary con él.
-¿Había alguien más con ellos? - era imposible que un forastero atravesara nuestras vallas sin ser identificado por un vigilante.
-Willian esperó en la puerta, no dijo nada, no se movió hasta que papá dio la orden. Eso es todo lo que sé, Anahi.
-Tendré que contarle a Alfonso todo esto, estoy segura de que sabrá qué hacer con toda esta información. - la abrazo y beso su frente - Eres una chica increíble, Lindsay. Mary estará orgullosa de ti.

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-Es como buscar una aguja en un pajar.  - Phillip suspira frustrado - La niña tenía buenas intenciones, pero hay muchos forasteros que podrían ayudar a Joe.
Tiene razón, debo admitir que la información de Lindsay es muy vaga.
Después de dejarla al cuidado de Edward, Phillip, Alfonso y yo fuimos a su oficina y le contamos todo, tal como Lindsay me confió. Phillip luce cansado y desanimado, pero Alfonso mantiene la mirada alejada, su dedo índice sobre su boca, yo diría que es casi posible ver los engranajes de su cerebro funcionando.
-Puedes repetir la historia, Anahi, por favor. - es la primera vez que habla desde que le conté todo - La parte que Lindsay describió al extraño.
-Dijo que llevaba sombrero, uniforme y una estrella en el pecho.
Alfonso sonríe en un rincón y saca su notebook escribiendo con una velocidad que me marea. Phillip simplemente lo mira en silencio, tal vez porque no quiere interrumpir el razonamiento de Alfonso y yo simplemente sigo su ejemplo.
Minutos después, Alfonso levanta el puño en el aire y una sonrisa en los labios.
-Tenemos un nombre. - dice como si Phillip y yo ya conociéramos sus ideas - Lindsay dijo que el hombre llevaba sombrero, uniforme y tenía una estrella en el pecho. Solo los sheriff de las ciudades pequeñas lucen estas estrellas.  No fue difícil encontrar uno con antecedentes dudosos, despedido por la policía de Nueva York y escondido en Libby.
-¡Mierda, Alfonso! ¿Qué haría yo sin ti?  - Phillip le aprieta el hombro de manera amistosa - ¿Cómo pude olvidar eso?
-La primera pieza del rompecabezas ya tenemos, ahora es revisar las cuentas y propiedades de este sheriff, si estaba tomando a las mujeres como forma de "peaje", ciertamente están vivas.
No puedo decir una palabra, solo agradezco mentalmente a la vida por traerme a Alfonso.
-Empezaré a coordinar una nueva acción en la ciudad de Libby, mientras tú encuentras la manera de que podamos obtener un mandato para las propiedades de este sheriff.  - Phillip ahora parece estar muy emocionado cuando habla con Alfonso.
-No será difícil, tiene algunas transacciones bancarias sospechosas, fechas que se cruzan exactamente con depósitos o transferencias de la cuenta de Joe a esa cuenta del paraíso fiscal.
-Bueno que hayas renunciado a esas vacaciones. - Phillip se ríe a carcajadas - Por hoy estás excusado, Alfonso, vete a casa y llévate tu Anahi contigo.
Alfonso se levanta y envuelve un brazo alrededor de mi cintura mientras nos despedimos de Phillip y salimos del edificio.
-¿Por qué tan callada, mi ángel? - pregunta tan pronto como nos subimos al auto.
Me vuelvo para mirarlo y mi pecho se llena de orgullo y amor por este hombre tan especial.
-Te veo trabajando, tan rápido, tan eficiente, tan inteligente ... Me siento tan orgullosa de ti, creo que me enamoré aún más, Alfonso.
Deja escapar una risa deliciosa que vibra dentro de mí.
-Ah, Anahi, te amo. - las palabras están dichas llenas de amor y alegría y me siento muy afortunada.
-Yo también te amo, Alfonso.