027; Ultraviolencia.

400 44 19
                                    

POV Luffy.


Y entonces me encontraba yo, drogado, suspendido en el aire, siendo maltratado de cualquier forma, ya sea física o mentalmente, y aunque estaba muy mal para poder siquiera pensar en que estaba existiendo, me preguntaba: ¿Esto es lo que yo quiero? ¿Esta es la persona a la que amo?

Law soltó el agarre en mi cuello, y me dejo caer, haciendo que mi cabeza se llevara un buen golpe contra la pared.

No dolía, no dolía porque yo era de goma, pero aún así, aquello me generó una herida de unas dos pulgadas, que pronto estaría cubriendo mi cabeza de sangre.

— ¿De qué manera necesito decírtelo, imbecil? –. Preguntó, hablando entre dientes, porque había mucha gente en el baño.

Había gente frotándose, drogandose, o simplemente, dándole la utilidad principal a los inodoros.

Entonces sentí un golpe en mi estómago provocado por su pie, golpe que pronto me hizo escupir sangre, y esto, esta vez dolía.
Mi cuerpo era de goma, pero yo poseía órganos, órganos que no eran de goma.

Me golpeaba de cualquier forma, me maltrataba, jalaba de mi cabello, a veces incluso, me escupía justo a la cara, y yo, yo no podía hacer nada al respecto, yo solo era un maldito muñeco, no era un buen momento para estar drogado, de no estarlo, hubiera acabado con él en dos segundos.
Me golpeaba con toda su ultraviolencia.
Y se reía, no estaba seguro de que, pero se reía, algo parecía tenerle especialmente molesto, y yo no tenía idea de que era exactamente el detonante de tanta furia, lo único que sabía, es que quería irme a casa y llorar hasta quedarme dormido en mi habitación mientras abrazaba a una almohada.

— Quiero irme a casa —. Testicule como pude.

Law me miró inexpresivo desde arriba.— ¿Eso quieres?

Yo asentí, ligeramente.

Me levanto de la sudadera y me sacó del baño a jalones. Law no era estupido, y el sabia que podían vernos, así que simplemente se las ingenió para transportarnos a las afueras del club antes que cualquiera de mis nakamas pudiera notar mi ausencia.
Me tomó entre sus brazos y me echo a su hombro, como si yo fuera un maldito costal de basura, y comenzó a caminar.
No sabía a dónde, pero conociendo a Law, estaba seguro que no me llevaría a casa, además, ni siquiera sabía en dónde vivía.
Intenté mantenerme despierto, pero me era imposible. No podía sentir dolor, porque la oxicodona de eso trataba, de no hacerme sentir dolor, pero, mi cerebro había comenzado a mandar hormonas de adormecimiento, y aunque la oxicodona ya me tenía bastante adormecido, para pronto me quede dormido yaciendo en el hombro del chico sin nombre.

Desperté cuando sentí que mi cuerpo era lanzado a un piso cubierto de una alfombra con un bordado rojo, y mi casa no tenía alfombra, estaba seguro de que esta no se trataba de mi habitación, ni nada parecido.

— Llevame a casa —. Rogué con mi inútil y nauseabundo estómago queriendo hacerme explotar.

Law se aproximó hacia mi y se sentó frente a mi, mirándome fijamente bajo el foco de su habitación. — ¿En dónde te habías metido? —. Preguntó mientras llevaba su mano hasta mi cabeza y apartaba mis cabellos ensangrentados de mi cara.

Le miré con pesadez, no podía reflejar confusión porque a penas me podía mover, pero se supone que esa pregunta la debería de hacer yo.

¡No estoy enamorado de ti! (Law × Luffy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora