Capítulo IV

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"Volvió" me repetía una y otra vez, aún con su rostro impregnado en mi mente. Se venían tantas cosas a mi cabeza, tantos recuerdos. Estaba tan inmersa en mis pensamientos que no me di cuenta que mi celular estaba sonando hace bastante tiempo y que aún seguía en el piso, lo recogí pero dejó de sonar, ví y era Valerie llamando, estaba por llamarla de nuevo cuando alguien tocó a la puerta, inmediatamente pensé en Lucas me armé de valor dispuesta a confrontarlo y abrí la puerta. Un chico estaba parado ahí con un paquete.

-¿Señorita Kaia Graham? —preguntó el chico despreocupado

–Si, soy yo —conseguí responder, y el chico me entrego una libreta junto con un lápiz

–Firme aquí —me indicó y así lo hice, me fijé que el chico me miró de pies a cabeza.

–Listo —dije y le entregue la libreta y el lápiz, acto seguido el chico me pasó el paquete, me dio una sonrisa y se la devolví luego entre en la casa.

Mi celular sonó de nuevo y esta vez si contesté

–Hola —mi voz no parecía tener emoción

–¡Kai! Al fin contestas ¿Que sucedió? ¿Estas bien? —no quería contarle lo de Lucas, no quería preocuparla — ¿Quieres que vaya a tu casa? —¡Oh, cierto! Val está aquí, con todo esto lo olvide, tendría que contarle

–Lucas... Él... Él ha vuelto —titubé

–¡¿Que?! Ese imbécil —murmuró algo que no pude comprender —voy para tu casa

–Esta bien —contesté, pero no creo que me haya escuchado ya que cuando termine de hablar se escuchaba un pequeño pitido

Me di cuenta de que estaba en pijama, y mi cabello hecho un desastre, así que subí a mi habitación a cambiarme y estar algo mas presentable. Me estaba peinando cuando el timbre sonó, me mire en el espejo una última vez, estaba bien, no como para salir, pero bien. Bajé las escaleras y cuando abrí la puerta estaban Ellie y Val allí, las deje pasar.

–¡Kai! —chilló Ellie —¿Estas bien? ¿Que paso? ¡Dios! ¡Como se atreve ese imbécil a venir aquí! Tiene una mente realmente retorcida ¿Crees que tenga una personalidad algo psicópata? Leí que hay personas que tienen actitudes psicópatas, no sienten culpa —Val y yo nos miramos y rodé los ojos, Val rió lo que hizo que Ellie parara su exagerado y largo discurso — ¿Qué? —preguntó

–Nada, nada —rió Val

Nos sentamos en el sillón y me miraron con atención

–¿Y bien? ¡Cuenta! —exigió Ellie, reí por lo bajo, esta chica me subía el animo en cualquier situación

–Muy bien, hmm... Pues Val me llamó y estábamos hablando cuando tocaron el timbre.

–Si, te dije que quería oírte abrir la puerta porque pensé que seria el repartidor —explicó Val

–Si bueno, bajé y allí estaba, él muy idiota me preguntó porqué no lo saludaba, le grite por supuesto y le cerré la puerta en la cara

–Hijo de puta —susurró Ellie con rabia

–Esta bien, estoy bien, sólo me sorprendió con la guardia baja, eso es todo —la calme

Hablamos mucho y reímos también, recordamos anécdotas, ya que Val estaba de vuelta había que disfrutarla al máximo. Val me dijo que el paquete era un regalo y Ellie dijo que también había recibido uno, lo abrí y era un cuadro de nosotras cuando pequeñas junto con una tarjetita que decía "Todas para una y una para todas", Val era tan detallista, la abracé y se lo agradecí mucho.

–¡Chicas! —gritó Val de repente haciéndonos sobresaltar —No adivinarán lo que tengo que contarles —reímos divertidas

–¿Qué? —dije ansiosa, Val nos miró sin decir nada

–¡Habla ya! —rió Ellie

–Esta bien, no me golpees —bromeó Val — lo que sucede es que... — hizo una pausa de suspenso — he vuelto... ¡Para quedarme!

Y es cierto eso que dicen que no hay mal que por bien no venga, había vuelto Lucas, pero Val también estaba de vuelta y eso me alegraba muchísimo. Otra vez las tres mosqueteras juntas, era algo que decíamos cuando pequeñas. Teníamos esa complicidad de mirar a la otra y saber que piensa, nos conocíamos desde los cinco años, éramos prácticamente hermanas.

Mi tía llegó a eso de las 2 y nos encontró hablando en el sillón.

–Hola chicas —dijo como siempre y luego se fijó en Val, hace tiempo que no se veían —¡Val Cuanto tiempo cariño! —la abrazó —¿Cómo están tus papás?

–Muy bien tía

–Me alegro mucho, ¿ellos también han venido contigo?

–No, no. Yo he venido sola con mis abuelos... Hmm.. Bueno de hecho me quedaré con ellos —le contó Val

–¡Oh! Eso es genial, te hemos extrañado mucho cariño —mi tía le sonrió

Seguimos conversando, luego almorzamos y vimos una película, agradezco que a Val tampoco le gusten las películas de terror, básicamente nuestras vacaciones eran salir al centro comercial, comer y ver películas, ninguna de nosotras éramos de salir a fiestas, aunque si alguna buena surgía no nos podíamos negar. Luego de terminada la película las chicas se fueron y yo subí a mi habitación, pensé en leer pero no podía sacármelo de la cabeza, Lucas ¿Qué estás haciendo aquí?. No podía hacer nada más que recordar.

Hace 3 años mamá murió, yo estaba a punto de cumplir 15 años cuando sucedió, un trágico accidente automovilístico me arrebató a mi mamá. Papá quedó destrozado, él la amaba. Yo por mi parte me hice la fuerte y transformé toda esa tristeza en ira, me volví "rebelde", salía a fiestas, cambie de amigos, me escapaba de la casa, etc. Resumiendo fui una idiota y en ese lapso de idiotez fue cuando lo conocí. Lucas era el niño rico malcriado que siempre tenia lo que quería y a quién quería, yo quería divertirme, distraerme mas bien y él me pareció perfecto, a pesar de conocer la mala fama que tenia con las chicas, empezamos a salir, primer gran error. Él empezó a decirme que estaba enamorado de mí, que era capaz de cambiar, que haría cualquier cosa por mí, me dijo que le diera el privilegio de mi amor y con esa absurda palabrería caí, me enamoré de él, segundo gran error. Pero detrás de todo esto había un trasfondo que yo no conocía, un 15 de abril a los 16 años perdí mi virginidad con él, ese fue mi error fatal. Al día siguiente el me ignoró, actuó como si no me conociera, los rumores empezaron a correr, el pueblo era pequeño y allí absolutamente todo se sabía, y yo no podía caminar por la calle, me sentía terrible, me arrepentía de todo, por supuesto los chismes también llegaron a oídos de mis amigas, ellas me ayudaron a pesar de haberlas dejado de lado durante un tiempo, me apoyaron y muchas veces me defendieron en la escuela. A los pocos meses Lucas se fue del pueblo y fue un alivio, todo empezó a ir mejor, progresivamente mi vida iba retomando su curso y cada vez iba olvidando más de aquella mala experiencia, y ahora llegaba él y lo arruinaba todo. Sinceramente no entendía ¿Que quería de mi? ¿Por qué volvió? ¿Por qué vino aquí?

¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? Era lo único que podía pensar, hasta que el sonido de la puerta principal y un "Llegué" proveniente de mi papá me sacó de mis pensamientos, pero no era el típico tono de voz alegre de papá algo andaba mal.

–Hola James —gritó mi tía desde su habitación, la oí salir y bajar las escaleras, salí de mi habitación y con cuidado de que nadie me viera miré escaleras abajo,daba directamente hacia el living, había una mujer allí y mi tía la saludaba, no escuchaba bien pero lo sabia ella era la novia de papá.

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Holaa!! Bueno espero que les guste el capítulo, voten comenten que les pareció (: gracias

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