BAJO LAS ALAS DE LOS DIOSES

capítulo 2: Peligro ausente

una flama... una flama diminuta, en medio de la oscuridad.

Es tan pequeña, extinguiéndose. De alguna manera siento que tengo que alcanzarla y avivar su fuego. No puedo permitir que desaparezca. estiro mi brazo pero no es suficiente, corro. La llama desaparece, me siento perdido. se escucha el eco lejano de una gota, algo esta cayendo. cuando el sonido me alcanza de manera que pareciera que esta justo detrás de mí, me giro y......

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-kenjiiiii!!!-

-ah?!, qué es esto?-

-kenji, te quedaste dormido, ¿no viste el mensaje que te envíe?-

-No, Lo siento estaba muy cansado y dormí de más. ¿Cómo entraste?-

-Ayer me dijiste que guardabas una llave de repuesto en la planta que está junto a la puerta-

-Ah, es cierto-

-Vamos que te quiero presentar a alguien-

-¿A quién?-

-ya lo verás, alístate-

Debería cambiarme rápido; Me vestí tomando lo primero que encontré en mi camino y tomé mi mochila de un solo tirante antes de salir del departamento. Cuando salí de la habitación Ryuu se encontraba hablando por teléfono.

-hai hai, lo tengo claro, ve a hacer tus cosas de escorpión negro (黒サソリ Kuro sasori)-

Terminó de llamar y se dirigió hacia mi.

-¿Listo?-

-Sí-

-Muy bien, en marcha-

salimos del departamento y dejé las llaves entre la tierra de la maceta. el camino fue sigiloso, pero para nada incómodo, no sé por que me sentía de esta manera cuando estaba con él.

- vayamos a la feria, nos encontraremos ahí con él-

Asentí y seguí su firme paso. La feria no se encontraba muy lejos. Siendo un lugar de campos y construcciones había mucho espacio para una, Estaba temporalmente cerrada por reparaciones. Me preguntaba que clase de persona estaba a punto de conocer, podría ser alguien alto y fornido, o todo lo contrario. Ryuu realmente no me ha contado mucho sobre 'él'.

Cuando nos acercábamos a la entrada, vi a un niño de cabello rubio hasta el cuello que comía una paleta. Tendría unos 9 años. Es demasiado pequeño; no puede ser él, solo está esperando a alguien. Esos eran mis pensamientos cuando de repente Ryuu gritó aturdiéndome tanto que tuve que parar por un momento a cubrir mis oídos .

-Liaaam!!-

El chico volteo a vernos y entonces su cara se iluminó mientras corría a abrazar a Ryuu.

-Rii! ¿por qué no habías venido a verme?-

-Lo siento, he tenido mucho trabajo. Pero te he traído algo-

-waa, que es!-

Ryuu tomó su sombrero y saco una paleta casi como un truco de magia, y sin siquiera parpadear el chico la tomó entre sus pequeñas manos.

-aah Rii, mi favorita-

Ryuu sonrió de una manera enternecedora mientras acariciaba la cabeza del pequeño.

-Escucha liam, él es Sadao Kenji. Es un buen amigo y ahora es un nuevo miembro de los hellebore-

El chico se volvió hacia mí con una mirada seria, a decir verdad sentí algo de miedo. De repente el chico se me abalanzó dándome un gran abrazo que casi me hace caer.