Capítulo 27: Charlas de familia.

736 76 12
                                    

No pasan ni siquiera 24 horas antes de que Hizashi y Shouta sean llamados a testificar.

Por supuesto, en un caso como ese es necesario todo un juicio, teniendo en cuenta que los villanos liberaron a los secuestrados, que tenían hijos y muchas otras cosas, era necesario saber que se haría a partir de ese momento con los dos adultos y sobre todo, con los jóvenes que estaban "a su cargo." No eran villanos comunes así que se necesitaba una sentencia diferente a las normales.

Lo que sorprendió a Shouta es que al llegar a la estación de policía no fueron conducidos de inmediato a hablar con el juez a cargo del caso, si no que pasaron con el detective Tsukauchi que esperaba verlos a ambos para discutir un asunto "familiar."

Ellos quieren hablar con ustedes. — Es lo que dice el hombre tan pronto como la pareja pone un pie en su oficina.

¿Disculpa? — Es Aizawa quien dice eso, por supuesto, después de que su esposo estuviera fuera de peligro, después de que llorara durante lo que pareció una hora entera abrazado a él y a sus amados niños, una vez que tuvo la cabeza y el pensamiento fríos toda esa situación lo había hecho despertar, era claro que no tenía ganas de hablar con los tipos que casi habían matado a su otra mitad.

Se que no quieres hacerlo. — Tsukauchi junto sus manos sobre la mesa. — Es por eso que los llame, no estamos realmente seguros de lo que ellos quieran conseguir al hablar con ustedes pero obviamente no va a ser nada bueno, así que los traje aquí primero para que piensen en su decisión.

¿Se veían amenazantes o algo por el estilo? — Hizashi atiende a preguntar, colocando una mano sobre el hombro de su marido antes de que este pudiera decir que no.

No realmente. — El detective aseguro. — Se veían... Preocupados, no dijeron mucho además de que querían aclarar algunas cosas con ustedes antes del juicio.

No creo que tengamos nada que aclarar. — Shouta escupió con veneno en su voz. — Sus acciones han hablado.

En ese caso, estoy de acuerdo con mi esposo. — El rubio presente asintió. — No creo que sea buena idea.

No hay nada más que decir entonces. — Tsukauchi comenzó a levantarse, buscando algo entre el bolsillo de su saco antes de irse, lo lanzó sobre la mesa para los dos. — Me dijeron que les diera esto, lo revisamos a fondo, no hay peligro si lo tocan o presionan el botón.

Aizawa fue quien se atrevió a tocarlo, el objeto era en realidad parecido a una pulsera del tobillo, pero en ella había un gran botón verde que al presionarlo, no hacía nada más que emitir un pequeño sonido, estuvo a punto de olvidarse del aparato antes de que, por curiosidad, decidiera darle la vuelta.

Las siglas "A.T.M" se presentaron ante él.

Sus ojos se llenaron de terror, eran simplemente tres letras pero acaban de hacer que todos los vellos de su cuerpo se erizaran con preocupación y angustia, había tres palabras corriendo en su mente que no le gustaban para nada.

Espera. — La voz del pelinegro resonó en las paredes, haciendo que el detective mirara hacía atrás.

Tengo que hablar con ellos. — Apretó el dispositivo en su mano. — Tengo que saber que es esto.

Tsukauchi asintió, conduciéndolos a ambos hacia la celda donde estaban los villanos, Hizashi cuestiono a su esposo durante el camino pero por supuesto, no recibió respuesta alguna.

No lo haría hasta que el propio Aizawa obtuvieralas respuestas que necesitaba. 

 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Pequeños cambios.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora