Summer Love [N.H.]

Capitulo 30: Final del verano

Niall

Hoy era la firma de autógrafo, estaba agotado, rubí había explotado todo de mí en la noche. Era salvaje.

Me levante con el cuidado de no despertarla, me di un baño, me puse algo ligero,  prepare mi desayuno, tome las llaves de mi auto y de camino a la firma desayune.

Llegue a la firma y  una fila de fans que cruzaba la calle estaba esperando emocionadas, todas aquellas chicas con camisetas donde yo aparecía, algunas tenían cd's otras, tenia afiches, entre otras cosas.

Entre desapercibido,  estacione el auto y me escoltaron hasta la mesa donde estaría durante un par de horas. Las chicas guardaron compostura, me senté en la silla, acomode un poco mi trasero, troné los dedos de mis manos. Era hora de un largo día.

Una chica castaña se acerco a mí, rebusco entre su bolso y saco una foto, claramente la reconocía, era la primera foto que me había tomado con ____

—   ¿Niall quien es ella?—pregunto

—   es una amiga—conteste

—   mmm linda foto—rio

—   -¿me la devolverías?—pedí

—   no—sonrió con malicia

—   -vamos te doy pases en primera fila—propuse

—   -mmm—dudo y jugueteo con la foto

—   bueno pases en primera fila para ti y tres amigas, de la chaqueta que tenia puesta saque tres boletos y se los di

—   ok está bien toma—dijo entregándome la foto

La foto seria un lindo recuerdo para un gran amor.

_____

Estaba ya en casa, y decidí revisar mis cosas en especial mi cartera pero note que algo faltaba así que decidí preguntarle a marrie:

—   -marrie!! ¿no has visto mi foto con Niall?

—   no amiga—contesto  

—   -la foto o por dios no puede ser la deje caer en el concierto de Liam—grite desesperada

—   -¿ para que llevas una foto a un concierto?—cuestión con burla

—   estaba en mi bolso, seguramente fui a sacar algo y se cayó—le explique

—   es solo una foto además ya no quieres a Niall

—   claro que si lo quiero y lo único que puedo tener de él es una foto—reproche

—   bueno llego papa me voy, gracias por el viaje—se acerco a mí y me dio un beso en la mejilla

—   ok hablamos—conteste

—    

Tres meses después,  ya estaba en la universidad, todo era pasado, tenia nuevos amigos, pero sin dejar a los viejos atrás, todo marchaba bien.

El timbre de la entrada empezó a sonar apresuradamente, no había otra cosa que me molestara más que  eso. Baje las escaleras y abrí la puerta, para encontrarme con marrie quien lloraba desesperadamente.