No lo podía creer des pues de siete años, cruzar nuestras miras de nuevo, fue fantástico, algo volvió a nacer en mí, no ¿pero que estaba diciendo?
Niall tiene novia, la que muy pronto será su esposa y le dará hijos, sería algo terrible si por culpa mía su relación se viera afectada.
Seguí con mi maleta tratando de evitar a mirada que tenía clavada de Niall en toda mi parte trasera, tome un taxi al hotel donde me quede la primera vez que vine a New York.
Pedí mi habitación y entre, lo primero que hice fue tomar un relajante baño para pensar ¿por qué el destino se decidía a jugar a si conmigo?
Salí de la ducha con mi mente totalmente confundida, en verdad sentía algo por Niall, no lo habría superado como dije años atrás, bueno, lo importante ahora es que lo tenga frente a mí y no hable como una tarada.
Pasadas las horas me acosté a dormir me levante por el fuerte ruido de la alarma y al instante entro una llamada, no había que ser un adivino, para saber que era will.
Conteste y puse el celular en mi oreja.
— cariño tienes un reunión en 30 minutos, el taxi te está esperando así que date prisa
— ¿que, pero?
— nada de peros adiós ¡te esperan!
Me callo como baldé de agua fría.
Corrí al baño y me bañe de rapidez. Salí y me puse una falda blanca no muy larga, ceñida a las piernas con una blusa negra y tacones. Me maquille, aplique perfume y Salí corriendo.
Tome en ascensor, con lentitud este bajo, abrió sus puertas y empecé a correr. Como siempre no falta el tonto que se atraviesa. Me choque con una persona. Un hombre, mi bolso cayo, me agache y lo levante mientras estiraba las arrugas de mi falda.
— emm yo lo siento es mi culpa—me disculpe, aun tenia la mirada en el piso. Pues acomodaba mi falda
— tranquila no hay problema
— emm si fue mi culpa voy de afán, y bueno—farfulle, alce mi vista, este hombre era tan familiar
— ¿ eres quien yo creo que eres?—pregunto asombrado
— ¿Nick?—murmure
— ¿____ Miller?
— Nick como has cambiado
— lo mismo digo ____
— Nick sabes voy de paso, cuando venga de la reunión hablamos—me excuse y Salí corriendo
Entre al taxi apresuradamente, este se puso en marcha, ya los nervios de las reuniones habían desaparecido, después de haber hecho varias, eso era pan comido.
Llegamos hasta un gran edificio, me baje del taxi entre, pedí indicaciones, y una mujer rubia me dijo que me llevaría hasta donde seria la dichosa reunión, caminamos por un pasillo hasta subir a un ascensor. Todo edificio era tétrico, no había nada de color.
Entre a la reunión, habían más mujeres que hombres, eso me dio seguridad, me siente en uno de los puestos vacios. Poco a poco se iba llenado, hasta que quedo repleto, cada uno dio su concepto del negocio hasta que con mi última palabra y mi poder de convencimiento cerramos el trato. Todo había sido maravilloso.
Regrese al edificio, era hora de unas merecidas vacaciones o eso creía yo. Busque a Nick, hable un rato con él y recordamos viejos tiempos. El era genial. Necesitaba despejar mi mente, a unos cuanto metro había una heladería que él me había recomendado, sin más preámbulo camine hasta allá y tome asiento en una mesa.
— Buenas, que desea ordenar—dijo una joven peli negra y con un uniforme que más parecía de pediatría
— Bueno, algo sencillo, o no se... hmm... una brownie doble si eso, y una botella de agua
— Su orden estará en cinco minutos
— Gracias—sonreí y la muchacha se marcho
Eran las siete en punto de la mañana, y a las siete con cinco minutos llego la muchacha con la bandeja entre sus manos, si que eran rápidas.
— Brindo por mí misma, por cerrar un contrato Miller—murmuré para mí misma.
Metí la cuchara en el brownie y partí un poco, lo lleve a mi boca y era el mejor que había probado en toda mi vida. Un carro se poso en la acera, estorbando mi vista. Lo maldigo, por impregnar todo con el olor a gasolina. De aquel carro, la puerta que está en frente mío se abre, y deja a la vista un zapato supra de color blanco, lo recorrí con mis ojos, y mi mundo se vino abajo, era Niall, lo tenía en frente.
El tenía una sonrisa en su rostro, y un brillo en sus ojos. Cerró la puerta del auto, luego otro ruido se escucho y era Zayn, debí imaginármelo. Camino hacia mí, yo no lo podía creer, casi siete años sin verlo, ya ahora lo tenía en frente. Me levante y quedamos a centímetros de distancia
— Cuanto tiempo ____Miller— murmuro
— Amm... lo mismo digo—conteste algo nerviosa. Confundida.
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Summer Love [N.H.]
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