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Freya seguía a Thor hacia las celdas para sacarlo y poner en marcha su plan, la pelirroja sabía que era muy arriesgado lo que estaba haciendo y sobre todo sentía que estaba traicionando todos sus principios. Pero ella había prometido a Frigga que los protegería con su vida de cualquier amenaza, incluyendo el propio Odín. Al entrar ambos tuvieron que noquear y encadenar a los guardias que custodiaban las celdas, la pelirroja alza la mirada encontrándose con la de Loki, que al instante es desviada cuando él nota con quien estaba. —Thor. Después de tanto tiempo, vienes a visitarme. ¿Por qué? —el par se mira unos segundos sabiendo que lo que estaba en frente de ellos no era el verdadero Loki. —¿Viniste a regodearte? ¿A burlarte de mí?
—Loki, es suficiente. Basta de ilusiones—dice seriamente Thor, y Freya y Loki se miran por unos minutos, en lo que el pelinegro cierra los ojos y la ilusión empieza a desaparecer, revelando un Loki tirado en el suelo con toda la celda destruida y unas cuantas gotas de sangre en el suelo. Freya traga en seco, sabiendo que él estaría peor de los tres, porque Frigga fue la madre que siempre quiso tener.
—Ahora ya me ves, hermano. —la pelirroja se mantuvo en su lugar, mientras que Thor rodeaba la celda para estar más cerca de él y poder hablar mejor. —¿Sufrió?
—No vine a compartir nuestro dolor—interrumpe Thor, molestando un poco a Freya por el poco tacto hacia su hermano. —Vine a ofrecerte la oportunidad de un sacramento mucho más rico.
Loki mira a Freya unos segundos y luego a su hermano. —Continúa.
—Sabemos que quieres vengarte tanto como yo. Si me ayudas a escapar de Asgard, te la concederé. Venganza... y después, esta celda—propone el rubio.
—No es un trato muy justo, ¿lo sabes, verdad?—inquiere Freya caminando hacia Thor, Loki solo admiró la belleza y astucia de la pelirroja. —Si hubiera sabido que este era tu plan, me hubiera negado. Sé que Loki no aceptaría regresar de nuevo. —las miradas de ambos se conectaron. —Yo propongo algo mejor. Él te ayuda, y despúes, la libertad.
—Sabes que nuestro padre no lo permitirá.
—Yo no hablo de contarselo a Odín—murmura hacia Thor, quien suspira desviando la mirada. —¡Qué hipocrita eres! Vas a sacar a la pueblerina, quien es la culpable de todo esto, y no sacarás a tu propio hermano.
—Mató a muchas personas y quiso gobernar la tierra.
—¡Pero lo hizo por mi!—exclama molesta, sorprendiendo a Thor, quien no pudo evitar dirigir su mirada a su hermano. —Si vas a culpar a alguien, entonces culpame a mi por hacer esa estúpida promesa cuando eramos niños.