[EN OBELIA]
A partir de su encuentro con Claude, Athanasia no volvió a abrir los ojos.
Claude no la había asesinado. Por el contrario, las palabras de la niña rompieron algo en su corazón de hielo que volvió toda su ira en remordimientos.
Estaba seguro de que él era quien estaba maldecido, y que por su culpa, su amada Diana había fallecido.
La niña tenía mucha razón en odiarlo, pues el le había arrebatado lo más Preciado en su vida: a su madre.
Tanto tiempo culpo a su única hija, tanto tiempo la odio, y hasta trato de deshacerse de ella en su nacimiento, sin darse cuenta que todas las desgracias ocurridas eran totalmente su culpa... y peor aún, ella había sufrido más que nadie las consecuencias, pues, a sus 5 años de edad, había estado completamente sola...
El de verdad amaba a esa niña, la amaba más que a nadie en este mundo, y ahora estaba a punto de perderla.
¿Como vería a Diana en el más allá si su hija moría por su culpa?
Era algo que no podía permitir.
Por años, busco a los mejores médicos y magos de Obelia, pero todos le daban la misma respuesta: ninguno encontró nada mal en la salud de la princesa.
Algunos médicos incluso se atrevieron a decir que ella no tenía la voluntad de despertar.
Incluso utilizó su propio mana y su magia, pero nada cambio, ella siguió durmiendo.
Con el paso de los años, su desesperación creció a tal punto de dedicar casi todo su tiempo al cuidado de la princesa, cepillando su larga cabellera o asegurándose personalmente de que todo estuviera en orden en su habitación.
Pasó noches en vela, llorando amargamente entre los recuerdos que lo atormentaban. La cara aterrorizada de Athanasia y sus gritos hacían eco en sus pensamientos, y al pie de la cama, sus lágrimas se derramaban pidiendo el perdón de su amada princesa.
No podía permitir que su pequeña hija se fuera, no así.
Incluso pensó que si su muerte era necesaria para traerla de vuelta, moriría sin dudarlo.
Pasaron 10 años en Obelia, y la princesa seguía sin despertar.
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En el reino, todos hablaban acerca de la desgracia del emperador. Nadie sabía hasta ese momento de la existencia de la princesa, ni tampoco de cuán amada era por su padre.
Todos estaban sorprendidos de que, aquel emperador de sangre fría que había encabezado grandes masacres y la rebelión de Obelia, se hubiera vuelto una persona tan decadente.
La familia Alfierce por su parte, estaba al tanto de la situación. Intentando aprovecharse de la vulnerabilidad del emperador, presentaron a Jeanette como su hija, pero su plan no dio frutos. Claude ni siquiera escuchó sus palabras y les echó del palacio en el primer instante.
-Lo que sale de tu boca es solo basura- dijo Claude a Roger -la única hija que tengo y reconozco es aquella niña que no quiere despertar- y con estas palabras pidió a los soldados echarles del palacio.
Jeanette estaba destrozada. Y la familia Alfierce había perdido la poca gracia que conservaba de su majestad.
Habían pasado 15 años desde que a Jeanette se le comenzó a educar para ser una princesa, y en segundos, su sueño se hizo añicos junto con la posibilidad de tener una familia y el amor de padre que le habían prometido solo para ella.
¿Por que el destino debía ser así de cruel con ella?
¿Por que lo único que le importaba a Claude era Athanasia, si ella también era su hija?
Su corazón en mil pedazos buscaba respuestas que nadie podía darle, y comenzó a odiar a aquella que, a sus ojos, se había quedado con todo lo que más amaba, y le había arrebatado la familia que tanto anhelaba.
Claude por su parte, ni se inmutó ante los ojos de gema de Jeanette. El solo pensaba en regresar a aquella habitación del palacio esmeralda donde su pequeña princesa aguardaba.
Los años siguieron pasando, y la princesa seguía inmersa en un profundo sueño que no parecía tener final.
——————————————————-Holiiiiii!! Les habla Pinky Lilu!
Agarrense, ahora si viene lo bueno!!!!! 😱😱😱😱 la Quimera está enojada!!!!!
Nos vemos en el siguiente capítulo!!!!!
Las imágenes no me pertenecen, créditos a quien corresponda!
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Esta no es la historia que pedí
RomanceLa vida da muchos giros. Sucesos del pasado pueden cambiar el rumbo de nuestro futuro, y en una vida donde he sido abandonada por todos, mi única esperanza de vivir es luchando por ello. Aquella historia me llena de sentimientos encontrados, y en la...