La vida da muchos giros. Sucesos del pasado pueden cambiar el rumbo de nuestro futuro, y en una vida donde he sido abandonada por todos, mi única esperanza de vivir es luchando por ello.
Aquella historia me llena de sentimientos encontrados, y en la...
Athanasia avanzó de forma apresurada en la pista de baile.
Ella no caminaba para encontrarse con las demás debutantes, sino que estaba huyendo apresuradamente del salón.
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Sus pasos eran silenciados por el bullicio de las personas y la estruendosa música, pero ni todo eso podía acallar sus oscuros pensamientos.
Cada vez intentaba alejarse más y más de la vista de su padre.
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Sus pasos tan apresurados y su cabeza tan confundida no le permitieron darse cuenta de que había alguien frente a ella, e inevitablemente chocó de frente con el.
-L-lo siento- dijo la princesa.
Al levantar su mirada, se encontró con los ojos más dulces que jamás había conocido. Su tibio resplandor, tal como el amanecer de verano, le regresó instantáneamente un poco de la calma que necesitaba.
-¡Princesa! ¿Se encuentra bien?
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Athanasia quedó estupefacta. Aquel chico amable le recordaba a alguien, que en su vida pasada habría sido importante, pero no lo recordaba con claridad. ¿Cuál era el nombre de este chico?
-¿Necesita ayuda princesa? ¿Hay algo que pueda hacer por usted?- dijo el joven
-Lo siento caballero, ha sido un accidente. Yo... solo estaba un poco distraída, estaba buscando algo de chocolate. Si, eso era.
