Capítulo 8: "Perdón"

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- ¡Hija!¿Por qué nos abandonaste? -Escuché a mi mamá-

- Hermanita no me dejes, no quiero morir -Escuche a Wirnny-

- No debí rescatarte del bosque, ahora estoy muerto -Escuché a Erza-

- Ahora que estoy viajando contigo, va a ser tu culpa si me pasa algo -Escuché a Raybund-

- Eres alguien despreciable, aléjate de mí -Escuché a Killian-

- Jaja, ¿Será que me pasó algo cuando te fuiste? ¿En qué problema me metiste? -Escuché a Cabel-

- ¿Qué me pasará cuando te encuentres conmigo? -Escuché a Iris-

- Tonta princesa, hubiera sido mejor que hubieras estado en aquella explosión -Escuché a Bill-

- ¡Te mereces estar muriendo! -Escuché a todos-

¡No! Yo no quise hacer eso, no quería abandonar a mi familia, no quería que mataran a Erza, no quería que al irme algo le pasara a Cabel o a Bill, no quiero que nada les suceda a Raybund y a Killian, no quiero que le pase algo malo a Iris, no quería tomar ese veneno, no quiero morir.

Los escuchaba pero no los veía, aún así quería gritarles que no fue, no es ni será mi intención hacerles daño ¡No quería!

- Perdón -Pude decir por fin-

...

Me desperté gritando y envuelta en lágrimas, sentía que mi corazón se me iba a salir, estaba temblando y no podía detener mis lágrimas que caían como cataratas a través de mis mejillas.

Escuché a dos personas sobresaltarse al oír mi grito, Raybund y Killian estaban tensos en unas sillas frente a mi cama mirándome asombrados.

- ¡MAYA! -Gritaron al unísono-

Corrieron a mi lado tocándome la frente a ver si tenía fiebre, revisando si me encontraba bien, si previo aviso me abrazaron al tiempo y no me soltaron. Esto me hizo llorar aún más, si les pasa algo no sé qué será de mi.

- Perdón -Dije llorando y abrazando con fuerza a los dos-

No paraba de repetir la única palabra que recordaba y lograba decir, era lo único que se me ocurría hacer aparte de llorar, siempre he sido dura de sentimientos pero esta vez fue demasiado para mí sola.

- Ya tranquila, no hiciste nada malo -Dijo Raybund-

- No necesitas pedir perdón, nosotros somos los que te debemos una disculpa -Dijo Killian-

Alcé mi rostro lleno de lágrimas para verlos a los dos, que tenían cara de preocupación, una cara que nadie en un buen tiempo me había mostrado. Solo quería llorar, y lo hice, me aferré aún más a sus cuerpos y hundí mi cara en sus pechos, estos solo se miraron y me abrazaron aún más.

...

- ¿Estás mejor? -Dijo Killian al entrar al cuarto-

Después de tanto llorar me dió sueño, pero no quería quedarme sola, tenía miedo de que ese horrible sueño volviera a mi, por lo que decidieron que Raybund se quedaría cuidándome mientras que Killian iba por comida para los tres, ya que al ver bien sus caras se notaba que no habían dormido ni comido.

- ¿Ustedes están bien? Parecen muertos -Dije preocupada-

Los dos se voltearon a ver y estallaron a carcajadas, no entendía qué era tan gracioso, y con mi cara de desconcierto ellos se calmaron y me explicaron.

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