La mujer del diablo [+18] ©

9. De repente, ni el Diablo lo siente

Sexy Back - Justin Timberlake

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Después de aquella visita de Celia, en la casa de Faith con todos presentes, el ambiente no pudo ponerse más tenso. Todos parecían tener miedo de que saliera a la luz su mayor secreto, solo que no había ningún otro tan sorprendente, como el que se guarda Lenore y Craig, estando involucrada en eso, Celia.

Afortunadamente, el estar esa señora ahí, no pasó a nada grave. Faith con mucha molestia, la sacó de su casa verdaderamente enfadada. Ella creía que, porque sea la única "familia" que le quedaba a la joven, tenía todo el derecho de hacer lo que se le plazca con ella.

Una vez ya lo hizo, pero eso era algo que no se iba a repetir.

Habían pasado dos semanas desde ese ridículo incidente. 

Craig no se ha vuelto a ver a escondidas con Lenore. Desde aquel trío, no ha vuelto a estar con esa chica. Por alguna razón, no le ha querido prestar más atención, aunque Lenore esté detrás de él, la mayoría del tiempo.

Con esas dos semanas, hasta parece que la relación con Faith se fortaleció más, a pesar que ahora era esa joven la que tenía algo raro con Greinger.

Y sobre justamente ese hombre. Craig ha hecho hasta lo imposible para poder ignorarlo, para no dirigirle la mirada, y ni siquiera respirar el mismo aire que él. Ese tacto de la última vez, lo dejó muy desconcertado, y con miedo en su interior. 

Cuando antes lo quería enfrentar porque parecía que todos les clavaban los ojos, ahora solo quiere alejarse lo más que pueda.

Después de tantos planes, llegó el día en el que tenían que arreglar el club para la fiesta. Todos estaban muy apurados. Aun no se hacía la hora en la que empezaba, pero se suponía que mucho antes, como unas tres horas después, ya debería de estar todo listo. Solo que, en este caso, ni se habían dado cuenta de que había llegado el día.

Cada uno tenía mucho que hacer. Ninguno se quedaba mirando al techo mientras se relajaba. A excepción de Greinger y Forest, que se encontraban en la puerta de la entrada, viendo como todos andaban como locos de un lado al otro, organizando hasta lo más mínimo, para luego llevárselas al club.

Por suerte, como Craig tenía su auto, iba llevando cada una de las cosas a el lugar de la fiesta, y arreglándolo. Él era el único que iba a ese club para organizar todo, los otros sabían que sería en uno, más no cual, ni dónde. Él quería hacerlo algo sorpresa.

En la casa de Faith, estuvieron un largo rato recogiendo. Cuando la dueña de la casa va directa hacía la puerta, con la penúltima caja en brazos, y dejarla afuera para Craig, nota que al frente de Greinger y Forest hay una persona más, y le dio curiosidad de conocerla.