Capitulo 41.
Nick me dejó en la puerta de la casa de Austin y bajé. Estaba por caminar hacia la casa pero Nick me habló y bajó el vidrio.
-Hey-me llamó y me di la vuelta.-Cuidado con lo que hacen.-dijo giñandome un ojo.
-Eres un tonto.-dije riendo.
-Vuelvo en 30 minutos. Ni 1 minuto más, ni 1 minuto menos. ¿Ok?
-Ok.
Subió el vidrio y arrancó el auto, avanzó unos centímetros pero retrocedió, se detuvo en donde estaba yo y bajo el vidrio.
-Considerando que hoy no tengo nada mejor que hacer y que tu no verás a Austin por un tiempo luego de esto, te daré tiempo extra.-me guiño un ojo y yo sonreí. Avancé a la casa y me dirigi por uno de los costados al fondo, es decir, al patio trasero. En la pared contraria a la pared del frente de la casa habian ventanales gigantes para salir al patio pero en la pared de al lado habia una ventana a la altura del piso, en forma rectangular y alli estaba la habitación de Austin, en el sotano.
Asi que la abri y pasé primero mis piernas y luego el resto de mi cuerpo. Cai en el escritorio. Bajé silenciosamente y por la luz que entraba de la ventana, noté que dormia plácidamente en su cama. Asi que me acerqué. Estaba en el borde de la cama y me habia sentado.
-¿Que haces aqui?-susurró.
-¿Como sabes que soy yo?-susurré.
-Acabas de decirme que me amas, asi que supongo que ahora vienes a decirme que estas arrepentida.-dijo bajo, sin moverse de su lugar, ni mirarme, por supuesto.
-¿Como sabes que era yo la que te dijo que te amaba?-pregunté confundida.
-Tu escribes muchos "wow" en los mensajes. Y además quisiste hacerme creer que Amber me dejaria pero de una manera sutil, para que no me lastime supongo. Pero el problema es que no me lo crei, ella nunca me dejaría, nunca nada empezó entre nosotros, ella---
-Si, lo se. Lei ese mensaje. Ella te chantajeo. Lo hiciste por mi.-dije tocando su espalda. El miraba hacia el otro lado, pero podia sentir que sus ojos estaban cerrados.
-De todas formas, ¿que hacias en casa de Amber?-pero antes de que yo conteste el habló.-Si la mataste sólo no me lo digas. No puedo defenderte si se la verdad.
-No. No la mate tonto.-dije con una sonrisa.-le dejé algo.
-Ok. No haré mas preguntas.
Hubo un silencio y yo quité mi mano de su espalda y la dejé en mi regazo.
-El me engañaba.-susurré.
-Lo se. Te lo dije. Justo ahora quisiera matarlo. Fuiste una tonta al darle otra oportunidad. ¿Fue por que yo "salia" con Amber?
-No. No fue por eso. Es que... yo lo amaba.
-¿Como puedes llamar a eso amor si lloras mas de lo que sonries?
-Si. Lo se. Yo lo extrañaba. Extrañaba los viejos tiempos, ¿sabes? Pero ya entendi algo.
-¿Que?
-Solo porque extrañes a alguien no significa que quieras a esa persona de nuevo en tu vida. Extrañar es solo una parte de superar.
-¿Superar?
-Si. Superar.
-¿Lo tienes superado?
-Si. Lo tengo. A veces tienes que renunciar a personas, no porque no te importen, si no porque tu no les importas a ellas.
-Si. Eso es cierto. Por un momento he pensado en renunciar a ti.
-Me importas mucho Austin.
-No lo se. Me siento como una segunda opción.
-No eres una segunda opción. Es que, ahora me doy cuenta de que aunque este con Matthew, ya nada será lo mismo. La herida sana, pero uno ya no es el mismo. Yo te amo a ti. Y me siento una tonta por no haberlo descubierto antes. Te amo con el corazón.
-¿Tu corazón no estaba roto por él?
-Estoy orgullosa de mi corazón, ha sido despreciado, roto y engañado pero aun funciona. Aun puedo amarte.-dije con lágrimas en los ojos.
Austin se dio la vuelta de golpe y me tomó de mi rostro. Nuestras bocas estaban a centímetros, podía sentir su respiración y el la mia.
-Tambien te amo.-juntó nuestros labios en un beso lleno de amor y pasión. Me atrajo hacia el y me recostó en la cama, el estaba encima mio y seguia besándome.
Fue el mejor momento de mi vida.
[...]
Estábamos recostados, mi cabeza estaba en su pecho y mis piernas encima de las suyas. El me abrazaba y su mentón estaba en mi cabeza. Con su mano derecha acariciaba mi cabello.
-Siento haberte lastimado tanto.-dije en voz baja.
-Eso ya no importa. Es el pasado. Alex, yo te quiero y no solo para palabras bonitas, abrazos y perfección, te quiero para risas, caidas, llantos, raspones, te quiero en lo malo como también en lo bueno.-dijo mirandome a los ojos.-Y ya nada mas importa.
Puse mi mano en su mejilla y lo besé.
-También te amo.
-Ahora todo será diferente. Será genial. He esperado que esto ocurra contigo hace tiempo.
Entonces recordé que tenia que irme.
-Austin, yo... lo siento,-dije levantándome y tomando mi ropa que estaba en el suelo.-tengo que irme.-dije mientras me vestia y me hacía una coleta.
-¿Que? ¿Por que?-dijo levantandose de golpe y vistiéndose con solo sus boxers.
-Lo siento, debi decirtelo antes pero no lo recordé.
Me miraba esperando que dijera algo.
-Me voy.
-¿Que? ¿A donde?
-Lejos.
-Alex no lo entiendo.
-Todo esta mal en mi vida. Yo no puedo quedarme.
-No puedes irte y dejarme luego de esto.
-En serio, lo siento pero no me queda otra opción.
-Siempre hay una segunda opción.
-Mi padre ha vuelto. Me ha golpeado. Mi madre esta con una profunda depresión y sigue con la estúpida e inútil idea de que Chad despertará. Esta volviéndose loca. Cuando se de cuenta de que Chad no despertará ella... no se lo que hará. Bridgit se alejó por mi causa. Y Chad... el no despertará y yo lo extraño tanto, me siento tan culpable por lo que le ocurrió, lo necesito, pero no soy lo suficientemente valiente para verlo. Soy una maldita cobarde.
-No. No lo eres. Yo estaré alli para ti, todo el tiempo. Pero por favor, no te vallas.
-Te amo.-dije besándolo quizá por ultima vez.-Te amo mucho y nada ni nadie podrá cambiar eso, nunca lo olvides.
Me di la vuelta y subi por la ventana. Escuché sollozos desde dentro y tambien lloré. Sali del patio de la casa y fui a la calle esperando ver el coche de Nick. Y así fue. Nick estaba allí esperando.
