Capitulo 36.
Matt habia llegado con pizzas y helado. Habiamos visto una pelicula de acción, porque segun el "yo no estaba para ver películas tristes y absurdas sobre amor".
Matthew solo apoyaba las peliculas de terror o acción. Lo cual me parecia tonto porque tampoco tiene mucho sentido ver películas para asustarte. Pero que mas da.
Nos habiamos quedado dormidos en el sillón de la sala cuando la puerta detrás de nosotros se abrió. Abrí los ojos como pude, tratando de acostumbrarme a la luz de la tv y a la luz del techo que, quien sea el que habia entrado, se habia encargado de encender. Al abrir los ojos note que estaba dormida en el pecho de Matt. Al mismo tiempo que yo, el se despertó y nos dimos la vuelta para ver quien era el que interrumpia nuestro descanso.
Mis piernas me temblaron al ver que quien había entrado era Michael. Mi padre.
Estaba de pie al otro lado del living con una valija y vestido con un traje negro.
-Buenas noches-dijo observandome a mi y luego, aun mas detenidamente a Matt.
-Buenas noches, señor Jones.-dijo Matt.
-¿Como estas Alex? Veo que te han permitido salir del hospital.
-Si, hace unas semanas; estoy bien, aunque no es que te importe...
-Claro que me importa.
-Si, lo demuestras al irte al instante en que tuvimos un accidente y también al ni siquiera llamar.
-Tuve cosas importantes que hacer.
-¿Aun mas que saber si tus hijos aun estan vivos? Wow. En este momento se me ocurren unas cuantas cosas mas importantes que eso; haber, espera.... mmm.... NO.
-Lo siento. Ahora se que ambos estan sanos y salvos.
¿Sanos y salvos?
Bueno, yo si, pero Chad no.
-¿Y como lo sabes? De seguro ni siquiera te molestaste en llamar a mi madre.
-Hablé con tu madre.
-¿Cuando?-lo desafié, imaginando que mentía.
-Hoy.
-Entonces supongo que debes saber donde esta...
-Aqui.-dijo seguro de que su respuesta fuera la correcta y se dio la vuelta para marcharse a su habitación con su valija en mano; pero mi voz lo detuvo.
-Ella no esta aqui.-dije con una risa amarga e irónica.
-¿Que?
-Eres un mentiroso.
-¿Donde esta tu madre Alex?-dijo levantando el tono de su voz, pero no me asuste.
-No lo se, tu deberias saberlo.
-Alex...-dijo Matt en un susurro.
-Matthew puedes dejarnos a solas, por favor.-dijo Michael.
-Claro, me voy.-dijo Matt.
-No.-dije yo.-Espera en mi habitación. Ahora subo.
Mi padre me miró enfadado pero no dijo nada.
Matt miró a mi padre esperando su aprobación y el asintió, asi que Matthew desapareció al subir las escaleras.
-¿Donde esta Elisabeth?-preguntó luego de un largo silencio y un suspiro de su parte, como juntando paciencia para no matarme.
-Dijiste que la habias llamado asi que---
-Pero no lo hice, ¿ok?-dijo interrumpiendome.
-¿Hay algo de lo que dices que sea cierto?
-¿Me dirás donde esta tu madre?
-En el hospital.-dije de golpe.
-¿Que le pasó?-dijo fingiendo interés, muy mal de hecho.
-¿Sabes donde esta Chad?
-Aqui.
-Bueno, no. No sabes nada. Ese "sanos y salvos" esta bien conmigo pero no con Chad.
-¿Que ocurre?-dijo confundido.
-Chad.-dije juntando fuerzas para no llorar.-El... el salió aun peor que yo. Tuvieron que operarlo y perdió mucha sangre---
-¿Chad murió?-dijo no tan sorprendido.
-¡Cierra la boca!-grité furiosa-¡No vuelvas a decir algo asi con esa libertad, jo*der! ¡Ni siquuera te importa! De hecho si cualquier de nosotros estaria muerto a ti no te importaria.
-¿Puedes explicarme que es lo que ocurre?
-¡Chad esta en coma!-dije llorando.
-Bueno, podria haber sido peor...-dijo tranquilo.
-¡Eres el peor padre del mundo! ¡Te da igual cualquier cosa que nos ocurra! ¡De hecho, estoy muy arrepentida de haberle dicho a Chad que se parecia a ti, porque eso no es cierto en lo mas mínimo! El es genial, la gente lo ama, tu eres un mentiroso, ¡nadie te quiere! Yo... ¡Yo te odio!-grité y sentí un ardor en mi mejilla derecha. Me habia golpeado. Acto seguido se dio la vuelta y se fue de la casa. Me largué a llorar y escuché los pasos apurados de Matt bajando la escalera.
-¡Alex! Se escuchaban los gritos desde arriba, ¿esta todo bien?-dijo arrodillado en el suelo para estar a mi altura, ya que yo estaba hecha bolita en el suelo. Corrió mi pelo que se habia pegado a mi cara por las lágrimas y me miró.-¿El... el te golpeó?
Me lancé a sus brazos y lloré como si no hubiera un mañana.
-El no me quiere. ¿Tan mala persona soy que ni siquiera mi padre me quiere?
-Alex, el no quiere a nadie. Tu sabes como es. El se lo pierde. Tu eres genial.
-Quiero irme de aqui.-dije levantándome del suelo y corriendo hacia las escaleras. Matt me seguia.
-¿A donde?
-No lo se. Lejos.
Entré a mk habitación y llené un bolso con algunas ropas, calzados, etc.
-No me quedare en esta casa ni un segundo mas.
Saqué de un cajón una tarjeta de crédito que me habían dado mis padres y un fajo de dinero, lo que llamó "ahorros".
Matthew se quedó sorprendido al ver el dinero pero no tanto, su familia también era muy rica.
-¿Vienes conmigo o no?-dije decidida.
-No tengo idea de a donde quieres ir.-dijo nervioso y confundido.
-Me voy. Me voy del pais.
